Capítulo XXVII

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Narra Allison

Estaba durmiendo, escuchaba la voz de alguien, mis párpados se sentían pesados

-Despierta- dice de mala gana. Comienzo a abrir los ojos -Despierta ya!- me grita

-¿Quién eres?- digo con voz ronca

-Alaska- me mira con desprecio
-Alaska Seller- me dice seria

-Bebe esto- me extiende un vaso con agua, sin pensarlo lo tomo -Y tus padres- dice mirando el lugar

-Por allá- le señalo hacía un estante, donde se encontraban papá y mamá durmiendo

-Dales esto- me dejo un vaso con sangre -No querrán estar débiles cuando su pequeña hijita muera- me dice con una sonrisa en los labios

-¿Por qué me quieren matar?- digo con una voz chillona

-Crimson tiene sus razones. Y yo las mías- dice acercándose un poco a mi -Me robaste el amor de Dylan, tendrás que pagar por ello- sabia a que se refería

-Yo he conocido a Dylan en un viaje- digo tratando de parecer confudida

-Vaya niña tonta, aún no recuerda nada. Tu amiguita si es poderosa- dice seria -Tú elegiste a Dylan niña tonta, desde entonces no hace otra cosa que cuidarte- dice enojada

-No es mi culpa-

-Sí lo es- dice seria. Escucho un golpe en la parte de arriba y al parecer ella igual

-Levanta a tus padres- me ordena, cierra la puerta del sótano y camino a donde estaba mamá y papá.

-Despierten- les digo moviendo sus hombros ligeramente

-Alli, ¿qué pasa?- dice papá con voz ronca

-Alguien ha estado aquí, y me ha dejado esto- les extiendo el vaso, el toma y mamá igual

-¿Quién ha estado aquí?- dice mamá

-Alaska- digo mirando a la puerta -Alaska Seller-

-Ya veo, ¿qué es ese ruido Allison?- dice mamá mirando a la puerta

-No estoy segura, cuando ella bajó de pronto escuchamos un ruido, y ella subió a ver que ocurría- escuchamos que la puerta se abría y que alguien bajaba. Lo vi bajando de las escaleras, era Dylan, junto a Peter, Anne y ¿Madd?

-Madd, ¿qué haces aquí?- le digo corriendo a abrazarla

-Ya lo sé todo Alli, tenemos que salir de aquí- me dice tomándome de la mano

-Thomas, Lia, apresúrense- dice Dylan levantando a mi madre del suelo -Jordan no detendrá mucho tiempo a Crimson- dice Dylan

-¿Haz llamado a Jordan?- dice mi padre sin poder creerlo

-Era necesario- dice Dylan, se acerca a mi y toma mis rostro entre sus manos

-¿Te encuentras bien?- me dice tierno, y solo asiento. Al subir a la sala pude notar que estaba Alaska peleando junto a dos chicas, una rubia y otra castaña. Alaska estaba realmente lastimada y sin fuerzas.

-Emilly, Jane, es hora de irnos- dice Dylan dirigiéndose a las chicas, que al parecer eran sus hermanas, había recordado sus nombres

-¿A dónde se dirigen amigos?- dice Crimson entrando en la casa, tenía sangre en sus manos y uno que otro rasguño

-¿Y Jordan?- dice la chica castaña con cara de preocupación

-Pasando sus últimos segundos en el bosque- dice con una sonrisa de satisfacción

-Emilly, lleva a Allison lejos- dice Dylan empujándome hacia aquella castaña

-Madd, Jane, vayan con ellas- dice Thomas y ellas asienten -Nosotros nos encargamos- dice Anne

-Si ustedes quieren, tengo para todos- dice Crimson con los ojos rojos y los colmillos ya de fuera

Dark SecretsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora