Capítulo XX

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Narra Allison

Después de cenar con Dylan, me dejó en mi apartamento. Grace me había pedido que durmiera con ella, ya que no había estado últimamente con ella.

-Alli, ¿puedo hacerte una pregunta?- dice tomando su oso de peluche entre sus manos y jugando con él

-Sí Grace, dime- me posiciono junto a ella en la cama y me tapo con la cobija

-¿Extrañas a mamá?- dice tímida

Suelto un suspiro -Demasiado- digo acariciando su cabello -¿Por qué lo preguntas Grace?- digo curiosa

-Mamá me ha dicho que muy pronto estará con nosotras de nuevo, que debemos ser pacientes- dice con una sonrisa. Me quedo confundida ante lo que he escuchado.

-¿Mamá te ha dicho eso?- digo confundida

-Sí, mami me ha dicho que papi y ella volverán pronto- dice sonriente

-Pues entonces hay que esperarlos- digo sonriendo. Probablemente Grace había soñado con eso, ella los necesitaba más que yo.

-Allison- dice Grace con voz temblorosa

-¿Pasa algo?- digo preocupada

-Ese hombre ha vuelto a mi habitación- dice señalando el árbol que se encontraba justo a lado de la ventana. Miro y veo que allí no hay nadie

-¿Qué hombre pequeña? ¿y cuándo ha estado aquí?-

-Todas las noches viene, y me dice que papi y mami son malos, y que tú también- dice mirándome
-Verdad que tú no eres mala-

-No pequeña- digo dándole un beso en su cabeza

-Dile que se vaya- dice con enojo

-De acuerdo Grace- me acerco a la ventana y la abro -Hey hombre, asustas a mi hermanita. Ella no quiere verte más, así que por favor podrías no venir más- digo mirando a Grace. Miro por unos segundos aquél árbol y veo como sobre salen unos ojos de color rojo. Achino mis ojos para poder ver mejor, y veo una sombra. Mi corazón comienza a latir demasiado rápido, siento que en cualquier momento este va a salir de su sitio.

-Tus deseos son órdenes, hermosa- dice una voz masculina.

-Grace, corre, ve con la tía Anne- le grito a Grace y ella me obedece.

Veo como aquél hombre, alto, y fuerte, con esa mirada roja salta la ventana, como ningún humano pudiera hacerlo.

-Al fin te tengo frente a mí- dice con una sonrisa

-¿Quién eres?- digo nerviosa y asustada. Puedo sentir como mis piernas tiemblan, en cualquier segundo podría caer al suelo

-Pero que grosero de mi parte- dice estirando su mano -Crimson Whedon- me mira como bicho raro después de ver que no reaccionaba

-¿Qué quieres?- digo nerviosa

-A ti- sin darme cuenta este hombre me tenía entre sus brazos, no podía gritar, el miedo me invadía por completo. Sin dudarlo tomé la lámpara de Grace y se la estrellé en la frente. Me soltó por un segundo....me asusté más al ver que no le había causado rasguño alguno....Bajó la cabeza sonriendo....al subirla pude ver su enojo recorrerlo por completo....mi corazón latía con más fuerza al notar que le salían colmillos afilados y sus ojos eran ahora más rojos.

-Quise hacerlo por las buenas, pero eres igual de necia que tu madre joder- en cuestión me tenía de nuevo en sus brazos, traté de safarme de aquél agarre. Pude ver como la tía Anne trataba de entrar a la habitación pero no lo logró, aquél hombre cerró la puerta con tan solo mirarla. No comprendía nada, sentía que en cualquier momento iba a desmayarme. La tía Anne golpeaba la puerta y gritaba como loca.

"-Crimson, déjala en paz-" escuché decir a mi tía Anne

"-Muy tarde mi querida Anne, muy pronto la estúpida profecía se hará realidad-" dijo aquel hombre. Miraba directo a la puerta achinando sus ojos y pude escuchar como tía Anne se quejaba
-¿Qué le haces?- dije intentando sonar valiente

-Le causo dolor- dijo con una sonrisa de satisfacción

-No la lastimes, por favor- dije en un sollozo

-Como quieras- después todo se tornó negro

Dark SecretsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora