Terreno Peligroso (Cross Gene) [Editando]

Capitulo 10

ZeXiang se despertó cuando oyó el primer grito y corrió a su habitación. Takuya había dejado encendida la luz de la mesilla. Estaba enterado entre las sabanas, retorciéndose como si estuviera luchando con alguien.

ZeXiang se sentó a su lado y apartó las sabanas.

-No -grito Takuya.

El terror que impregnaba esa única sílaba le puso a ZeXiang los pelos de punta. Takuya empezó a llorar y a forcejear con el mientras intentaba despertarlo.

-No pasa nada, Takuya. Despierta. Todo esta bien.

Tuvo que repetírselo varias veces con firmeza, hasta que consiguió arrancarlo de los brazos de la pesadilla. Al fin, por suerte, el abrió los ojos. Tenía las pupilas dilatadas y todo el cuerpo le temblaba.

ZeXiang la dio unos segundos para comprender donde se hallaba y lo tomó entre sus brazos.

-Shhhh -lo calmo el-. Todo esta bien. Era un sueño -añadió, acariciándole el pelo-. Nadie va a hacerte daño.

Takuya hundió la cabeza en su pecho. Entonces, de pronto, ZeXiang se dio cuenta de lo que llevaba puesto. Al tocar la seda de su camisón, se le quedo la boca seca. Maldita Amber, pensó. Ella no pudo haber trabajado sola. Su otra prima debió de ayudarla. Su romántica prima había intentando sacarlo de su cueva muchas veces... En el pasado. Se había empeñado en presentarle a amigos y compañeras de trabajo.

Pero en no necesitaba a alguien para ser feliz. El sexo...eso era otra historia. De todos modos, un hombre podía resolver sus necesidades con sus propias manos, si era necesario. Hasta que encontrará a alguien en quien pudiera confiar, no estaba interesado en la compañía de otro.

No obstante, su libido estaba demasiado despierto y no podía dejar de pensar en lo suave que era su invitado, el olor de su pelo, sus pezones al descubierto apretados contra su torso.

-Apaga la luz -pidió Takuya con voz ronca y sensual y se aparto de el, quitándose el pelo del rostro con manos temblorosas.

ZeXiang hizo lo que le pedía.

-Estaba corriendo en la oscuridad -relato Takuya con labios temblorosos-. Algo me perseguía. Yo sabía que, si encontraba el camino a casa, me salvaría. Pero, cada vez que abría una puerta, no había nada detrás. Tengo mucho miedo de que me odies cuando descubras por que vine a verte -reconoció el, sin pensarlo.

ZeXiang supo, en su interior, que era sincero.

-Te irás a tu casa dentro de unos días. Hasta entonces, tienes que pensar en otra cosa -aconsejo ZeXiang, sin confesarle que había mandado hacer investigación sobre el señor Terada.

-Es fácil para ti decirlo. No eres tu quien tiene el cerebro en blanco. Estabas dormido?

-Son las dos de la madrugada. Claro que estaba dormido -respondió ZeXiang. Y teniendo unos sueños muy bonitos.

Takuya tembló y ZeXiang le acarició el brazo.

-Estarás bien?

Takuya lo miró con expresión de vulnerabilidad.

-No. Puedes quedarte? Por favor.

***

ZeXiang se quedó boquiabierto un momento y, al instante, esbozó una expresión indescifrable. Aunque no podía ocultar la erección que latía entre ellos.

-Puedo quedarme sentado mientras te duermes -ofreció el, poniéndose en pie y pasándose la mano por el pelo.

-Y si tengo otra pesadilla cuando te hayas ido?