ENCUENTRO CON LA OSCURIDAD

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Una mañana como cualquier otra me encontraba lista para luchar a la hora del desayuno.
Como les decía, me costaba mucho comer por la llenura que sentía.
Pero bueno, yo siempre hacía un gran esfuerzo.
Pude desayunar y me encontraba sentada en la cama viendo una película con mi mamá.
Recuerdo que era la famosa película "El Canguro Jack".

De repente mi cuerpo se desploma sobre la cama, mi madre sorprendida se acerca rápidamente haciéndome llamados y dándome pequeños golpes en las mejillas.
Pero yo no daba ninguna respuesta.
Mi madre empezó a gritar de desesperación y pedía ayuda.
Las enfermeras se acercaron rápidamente y llamaron a todos los médicos que pudieron encontrar cerca de la habitación en la que me encontraba.
La habitación se encontraba repleta de muchos médicos y sólo se escuchaba el llanto y los gritos de una madre desesperada viendo a su hija ser reanimada. Resulta había presentado una muerte súbita.
Realmente sólo recuerdo cuando estaba viendo la película y cuando reaccioné en medio de la oscuridad gritando y suplicando perdón a Dios por todos mis pecados.
Éstas fueron mis palabras:

¡Perdóname Dios, perdóname por todos mis pecados!

Recuerdo ver y presenciar OSCURIDAD.
Sentí que fue por solo unos segundos y luego desperté en la Unidad de Cuidados Intensivos.

¡Que experiencia tan terrible experimenté en esos momentos!
Sentí que la vida se me escapaba, sentí que la muerte estuvo a centímetros sobre mi alma.
Lo ocurrido me lo contó mi madre, esto que transcurrió cuando mi cuerpo se desplomó y quedé inconsciente hasta que reaccioné por unos segundos en la habitación. También expresándome lo que ella sintió en esos momentos.
Mi madre fue muy valiente...
¿Quién puede soportar ver a su hija casi morir frente a sus ojos?
Los médicos diagnosticaron que también tuve convulsiones y una pequeña isquemia cerebral.
Me encontré sin signos vitales durante 5 minutos.
Es decir, permanecí esos 5 minutos sin pensar en mi familia, en el fútbol, en mis sueños, en mi carrera, en mis logros, EN MI VIDA.
Ya no existía nada para mi en esos momentos.

LUCHANDO CONTRA LAS TORMENTAS DEL LUPUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora