Del Amor al Odio hay un solo Paso [Fairy Tail Nueva Generación]

Capítulo 22

Luna

Bajo los escalones cada vez más nerviosa.

—Luna-chan! —dice Fullbuster al verme. Estoy roja no, lo siguiente.

—Cómete la sopa. Ahora! —le ordeno.

—Luna-chan... Parece que estás más interesada en que te bese que yo... —me mira con una sonrisa pícara y yo me sonrojo a más no poder.

—Que te comas la puta sopa!! —digo dando un golpe en la mesa. Rin y Sylvia se asustan —Gomen...

—Vale, vale. No te pongas así —dice antes de llevarse una cucharada a la boca. Fullbuster pone cara de asco y empieza a toser.

—Nii-sama! —dice Sylvia.

—Ten —dice Rin y le da el vaso de leche. Vuelve a hacer lo mismo. Al final, Sylvia le da un vaso de agua. Parece que se ha calmado un poco.

Storm

No paro de toser. ¿Por qué me han tenido que dar esa sopa tan asquerosa? Ah. Ahora recuerdo. Por el picotazo del mosquito ese. Parece que he vuelto a ser el mismo de siempre. Antes hablaba el veneno del mosquito mezclado con mis sentimientos hacia Dragneel.

—Nii-chan! —dice RinRin —¿Estás bien, nii-chan?

RinRin y Sylvia-chan me miran preocupados y Dragneel me mira inquieta esperando a ver si ha funcionado la sopa. Hmm... Podría aprovecharme de esta situación... Pero solo un poco...

—Si, estoy bien —digo levantándome de la silla —. No podría estar mejor... —digo mirando a Dragneel con una sonrisa.

—Na-nani? —dice Dragneel con la cara roja.

—¿No me habías prometido algo, Luna-chan?

La cara de Dragneel es indescriptible. Parece que le ha dado un patatús.

—¿Has dicho... Luna-chan? —pregunta Dragneel con los ojos como platos.

—Es lo que he dicho, si...

A Dragneel no le sale palabra alguna por mucho que lo intente.

—Luna-san —la llama Sylvia-chan —, respira hondo.

—Ten —RinRin le acerca un vaso de agua. Dragneel empieza a beber como si no hubiese bebido agua en días.

—¿Ese no era mi vaso? —digo señalándolo y escupe el agua de golpe —Tranquila, Luna-chan —me acerco a ella —. Compartir en mismo vaso no es nada. Comparado con un beso.

Dragneel se ha quedado de piedra.

—Be-beso?

—Es lo que me habías prometido si me comía la sopa, ¿no?

—Pe-pero no te la has comido entera. Mir... —Dragneel señala el plato de sopa, pero RinRin se la ha comido.

—Bueno... Qué se le va a hacer... —digo acercándome a sus labios.

—E-espera —dice poniendo las manos entre nosotros.

—Qué?

—Si-si me vas a be-be-be-be...

—Besar.

—E-eso. Pre-preferiría que-qu-que fu-fu-fuese e-e-e-e-en u-u-u-u-u-una ci-ci-ci-ci-cita. En una cita —dice tartamuda. Está realmente nerviosa.

Luna

<<¿Pero qué estás diciendo, Luna? Estás majareta! Le acabas de pedir una cita! A FULLBUSTER!! Reacciona Luna! Reacciona!!>>

—Hmm... Una cita... No estaría mal... De acuerdo. Te espero en la plaza del árbol mañana a las 6 —dice Fullbuster con la sonrisa más bonita que he visto —Adiós —dice subiendo las escaleras. Cuando escucho la puerta cerrarse, suspiro muy fuerte.

—Lu-Luna-san —dice Sylvia —¿E-estás bien?

—Si, ¿por qué?

—Porque le acabas de pedir una cita a nii-chan!! —dice RinRin.

—Es para ver si es que la sopa hace efecto durante la noche.

—Luna-san tiene razón —dice Sylvia —. A lo mejor no es de efecto inmediato y tarda en hacer efecto.

—Puede que si...

—Lunaa!!! —grita oto-sama desde arriba.

—Nee-chan!! ¡¿Dónde diablos estás?! ¡¡Nee-chan!! —le sigue Nash. Subo y me encuentro a oto-sama y a Nash gritando por todo el gremio.

—Estoy aquí! —en cuanto pronuncio esas dos palabras, los dos corren hacia mi.

Empiezan a grita los dos y no me entero de nada.

—¡Queréis calmarse de una vez! —grito enfadada.

—Lo que quieren decir —dice oka-chan —es por qué le has pedido una cita a Storm.

Me quedo paralizada. ¿Por qué no se ha callado ese cubito de mierda?

—Pues... Etto... —oto-sama y Nash siguen esperando mi respuesta. Me acerco a oka-chan —¿Podría decíroslo en casa? —le pregunto y ella asiente.

***

—¿Y bien? —dicen oto-sama y Nash cuando me siento en mi silla de la mesa.

—Chicos —dice oka-chan sentándose en la suya —, dejadla en paz.

—Lo que pasa es que, cuando estuvimos en Edolas, a Fullbuster le picó un mosquito que puede cambiar la personalidad. Suki nos dijo la solución del problema, una sopa. Le dimos la sopa, pero no le hizo efecto.

—¿Y eso que tiene que ver con la cita? —dice oto-sama.

—Sylvia y Rin le dijeron que si se comía la sopa, podría...

—Podría... —dicen los dos a la vez.

—Be-be-be... —no termino de decir la palabra, pero en seguida saben lo que quiero decir por mi cara de color rojo.

—Voy a matar a dos gemelos —dice Nash.

—Pero, ¿y lo de la cita? —dice oka-chan.

—La sopa no parece funcionar instantáneamente. Le pedí "eso" porque pienso que tarda un poco en hacer efecto.

—¿Y si no se le pasa el efecto? —dice Nash.

—Ya se me ocurrirá algo.

—Iré con vosotros —dice oto-sama —. No puedo soportar la idea de que te vayas a ir con un Fullbuster.

—No —le ordena oka-chan —. Los dos os vais a quedar aquí.

—Pero, Luce...

—Nada de Luce. Esto es cosa de Luna. Y ahora bien, vayamos a dormir.

—Haaaai! —dice oto-sama desanimado subiendo las escaleras.

—Chicos, vosotros podéis pasar la noche aquí.

—Arigatou, oka-chan —decimos los dos a la vez.

—Oyasumi —dice oka-chan subiendo las escaleras.

—Oyasumi.

Nash y yo compartíamos habitación cuando vivíamos aquí.

—La habitación no ha cambiado nada —digo acercándome a mi estanteria de muñecas y cogiendo mi favorita. Nash bosteza.

—Yo me voy dormir, oyasumi —se dirige a su cama. Se quita la camiseta y se tira a la cama. Siempre me ha hecho gracia como duerme él y oto-sama. Con la boca super abierta, los brazos y las piernas cada uno por una lado...

Voy a mi armario y hay una camiseta negra corta y unos pantalones cortos de color negro. Es el pijama que tengo cuando vengo a dormir aquí. Me lo pongo, me hago un moñete y me acuesto.