Imaginas de Tom Hiddleston

THE SPARKS FLY

Te despiertas, tu vuelo sale en 1 hora, estás tan emocionada, esta es la primera vez que viajarías a Londres, tu recompensa por tus buenas notas era esa, un viaje a Londres, o como tú la llamas "la ciudad de los sueños" tus padres están muy orgullosos de ti.

Te vestiste rápido, no querías llegar tarde al aeropuerto. Tu corazón y tus emociones están brincando de un lado a otro, mientras te vistes, piensas "Espera... Londres... esa es la ciudad donde vive Tom Hiddleston, ¿Lo conoceré? Oh vamos chica, eso es imposible" te terminas de vestir y escuchas que tu madre te llama desde las escaleras:

—Querida ¡se te hace tarde mi vida! ¡Apúrate!

—Sí mamá—respondes. Una vez más estás en la sala, tu mamá y papá están muy orgullosos pero tristes de que te vayas lejos, tú mirando sus rostros de tristeza les dices—Estaré bien... los amo tanto. Los veo en 3 semanas.

—Adiós mi niña nosotros también te amamos—después de eso sales de la casa y vas al aeropuerto para enfrentarte a una nueva aventura, pero tú no sabías lo que venía después para ti.

Llegas al aeropuerto, tomas tus cosas y vas a esperar tu avión. Ves mucha gente mirando al mismo punto en la sala, de repente decides ir a caminar y cuando estás en las escaleras eléctricas, ves a alguien que te golpea en la cara por accidente.

—Oh, mi Dios lo siento señorita.

—No te preocupes... estoy bien... oye... tú eres...—comienzas a decir cuando ves ese rostro de ángel frente a ti.

—Sí, soy Tom Hiddleston, encantado de conocerte y perdón por haberte golpeado en la cara, perdona, ¿Cuál es tu nombre?—te pregunta tomando tu mano, estás temblando ahora. Sus ojos son más hermosos en persona.

—...Mi nombre es... encantada de conocerte Tom.

—Hola. Eres hermosa, ¿quieres ir a cenar conmigo esta noche? Tómalo como una recompensa por el accidente—dice él haciéndote sonreír, y tú, feliz, nerviosa, e incluso asustada, le contestas, perdiéndote a ti misma en esos hermosos ojos verdes—...Me encantaría, sí, sí Tom.

—Genial, ¿A dónde vas ahora?

—Londres.

—Yo también, regresaré a Londres ahora ¿Quieres venir conmigo?

—Sí, claro, vamos—Tom te lleva contigo a su avión, tú no puedes creerlo todavía... este es el más hermoso momento en toda tu vida...

Después de que Tom y tú llegaron a Londres, te llevó a tu hotel, tú sonrojada aceptaste su ofrecimiento y acto seguido te dejó ahí comportándose como todo un caballero, después de que bajaste de su limusina te dijo besando tu mano:

—Llegaré por ti a las 7:00 linda.

—Me encanta como me llamas...—dijiste, sin darte cuenta de que fue en voz alta y no en tu pensamiento.

—A mí me encanta tu sonrisa—te contestó haciendo que te derritieras en tu interior, después de ese evidente coqueteo te dijo otra vez dejándote en la puerta del hotel—espero verte pronto.

—...Nos vemos—se marchó. Tú con tu corazón latiendo frenético, te apresuras a llegar a tu habitación, una vez que estás ahí rápidamente te despojas de tus ropas y te metes a la ducha. Una hora después sales para comenzar a arreglarte, no sabes que ponerte, y optas por un vestido de noche corto, color blanco con detalles azules. Miras tu cabello y decides por recogértelo en un chongo dejándolo caer a un lado de tu oreja; después vas a tu cara, decides un maquillaje discreto y muy poca joyería. Una vez que estás lista te das cuenta de que hace frío y está por llover, a lo que decides tomar un abrigo de lana color blanco.