Capítulo 12

1.3K 165 181
                                    

Se formó un silencio incómodo entre los cuatro. ¿Qué decir ante  una situación así?

-Lo siento, amigo...

-No te preocupes.-Suspiró y dio un sorbo a su cerveza.

Después de unas bebidas más George se fue con una chica a quién sabe dónde, y Ringo regresó a su casa.

-Creo que ya me voy.

-¡Espera!

-¿Qué quieres?

-Pensaba que podríamos...Caminar o algo.

-¿Ahora? ¿A las tres de la mañana?

-Bueno...No ahora. Mañana o pasado, como quieras.

-Está bien.

-Genial-sonrió-Te iré a buscar a tu casa.

-Espera, espera. Eso me suena a cita. Mejor nos encontramos en un lugar.

-Está bien ¿dónde?

-Hay un parque cerca de mi casa, podemos vernos ahí. Pero cuando sea de noche, no quisiera que la gente nos acosara.

-Está bien.

----

Me sentía raro. Iba a salir con William. Yo. John Lennon. Los nervios no me abandonaron desde entonces, pasé todo el día con un nudo en el estómago. Después de cenar con Cyn y arropar a Julián, salí a mi encuentro con Faul.

Era una noche sin estrellas, con luna cuarto menguante. Soplaba una brisa fresca y, sin importar a dónde mirara, todo estaba desierto.

Cuando llegué al parque, William me esperaba sentado en un banco. Vestía una camiseta blanca con un suéter negro, pantalones negros y zapatos del mismo color.

-¿Por qué tanto negro?

-Casi toda mi ropa es negra.

-¿Por qué?

-Sólo me gusta. ¿Vamos?

-Vamos.

Se acercó hasta quedar a mi lado, y emprendimos el camino. No sabía qué decir, creo que esto fue mala idea.

-¿Qué tal las cosas con Cyn?

-Peleamos un poco...Pero estamos bien.

Eso era mentira. Estábamos muy lejos de estar bien.

-¿Y Yoko?

-Todo bien con ella, nos vemos de vez en cuando.

-¿Y no piensas hablar con Cynthia sobre esto?

-No...

-John, no puedes seguir así. Tienes que decidir entre ellas.

-¿Por qué hablo de esto contigo?

-Porque quiero que tengamos la confianza que Paul y tú tenían.

-Tú no eres Paul. 

Permaneció en silencio y seguimos caminando sin rumbo. Me sentí mal por ser tan cruel con él, por primera vez desde que lo conozco.

-Lo siento, no quise...

-No, John. Tienes razón, no soy Paul. Nunca lo seré.

-William, no quise...

-Cambiemos de tema ¿quieres?

-Bien...

Nos quedamos unos minutos en  silencio. No se me ocurría nada.

Faul [McLennon] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora