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>Narra Ashton<
-Habíamos quedado para comprar en el paseo y mirar vestidos –Empieza a contarme Annie- . No me apetecía mucho, porque la semana pasada dejaron en ridículo a Emma. No sé si sabes quién es… La chica con el pelo rubio cortito que está en la biblioteca y es un poco compulsiva, tiene unas gafas chulísimas y unas convers pintadas.
-Sí, Emma, ya me acuerdo. –La miro para que siga contándome, mientras pienso que en verdad ella es más de lo que el mundo ha visto, simplemente por la descripción que ha hecho de Emma. Ni siquiera ha usado la palabra “rarita” o parecidos.
-Pues ella. Rompieron su mochila tirándola desde el segundo edificio del campus. Fue horrible. Ese ha sido el golpe definitivo para librarme ya de lo que ellas jodían en mi vida, solo necesitaba la ocasión para mandarlas a la mierda. Y cuando llego a su lado… Bueno, estaban hablando entre ellas y Ashley me ha preguntado si tenía otra cuenta de twitter. Ese motivo me bastaba para que me llamasen friki y poder irme, porque en la cuenta hablo de todo lo que me gusta. Pero… no han podido dejarlo ahí. Se han metido con vosotros. Han dicho…
Le falla la voz y se muerde el labio. Va a echarse a llorar. Paso mi mano por sus hombros acercándola a mí para que se sienta más segura. Ella agarra mi cintura. Baja la cabeza por primera vez en la tarde.
-Cito textualmente: “¿Qué querías? ¿Pasar tus años del instituto con ese grupo de frikis con guitarras? Esos cuatro pringados. El del pelo rarito, el alto que se cree el más guapo y el moreno, ni siquiera parece de aquí, ¿qué es, chino o algo así? Y el más pringado de todos, el que se raja, tendría que haberse muerto, total, quién quiere escuchar esa puta risa todo el día molestando” –Me tenso a su lado, pero intento que no se note-. Ahí es cuando le he pegado. Toda la rabia que sentía por ellas estaba en ese puño, pero no era nada comparado con el odio que tenía dentro por lo que acababa de decir. No… No sé. Duele. De normal duele pero cuando ha dicho eso yo… No podía dejar que dijese eso. Tú eres vital, tú tienes que estar aquí y ellos, vosotros no sois frikis ni pringados ni…
Las lágrimas vuelven a caer por sus mejillas mientras intento decir algo.
-No hay nada que pueda decirte para agradecértelo, Annie. No me gusta que te hayas peleado porque te podrían haber hecho daño, aunque veo que puedes defenderte. Pero gracias. Por defendernos, por defenderte y por defenderme, en especial a mí y con ese… tema. Gracias Annie.
Ella sonríe y vuelve a alzar la cabeza como siempre. Me mira a los ojos.
-Ha valido la pena.
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>Narra Erika<
-Bueno, ¿entramos?-Le pregunta Calum a nadie.
-Sí, sí. –Le respondo, dándole una palmada en la mano.
Llevamos varios minutos apoyados en la barandilla de piedra mirando el mar. Eskai está sentada arriba mientras Luke la abraza. Ashton rodea la cintura de Annie mirando la arena hablando y Michael me besa.
-Calum modo sujeta velas. –Pone su cara de cachorrito abandonado y cojo su brazo bien fuerte andando con él hacia el bar.
-Con lo bien que se está aquí fuera, Cal.
-Sí, claro. Me lo estoy pasando de muerte.
-No seas exagerado. Nos estamos moviendo hacia el bar.
-Vale, vale. Dejo de quejarme.
Entramos poco a poco todos menos Luke y Eskai que se quedan un rato más mirando el mar. Es un bar al que veníamos muchísimo antes. Ellos tocaron aquí alguna vez. Está cerca de la playa y ponen buena música, mezcla de todo, lo que está bien porque así bailamos todos.
Nos sentamos en los sillones rojos del fondo. Se acerca Melody, la camarera, con una gran sonrisa en la cara. Lleva una coleta alta que se mueve con ella cuando anda. Recoge el mechón tras su oreja y saca la libreta. Luke y Eskai se nos unen en los sillones.
-Bienvenidos, chicos. Jo, os he echado muchísimo de menos. Es raro veros tan rodeados de gente y no aquí tocando. –Sonríe encantada de vernos. -¡Hola, Erika!
-¡Hola, Mel!
Es una chica muy vivaz, simpática y feliz, siempre de lado a lado y haciéndolo todo bien. La apreciaba mucho.
-¿Lo de siempre?
-Sí-Responde Calum por todos.
-¿Y vosotras? Por cierto, yo soy Melody.
-Hola, yo soy Annie y ella es Eskai. Yo quiero una cerveza. ¿Eskai?
-Coca-cola por favor. Y encantada.
-Igual, ahora mismo os lo traigo.
Se va andando con sus pitillos, el delantal y la camiseta roja hacia la barra.
-Mel tiene razón, hacía muchísimo que no veníamos. –Nos dice Luke.
-¡Oh, me encanta esta canción!-Grita Annie de repente.
Ni siquiera la distingo del ruido del bar pero ella arrastra a Ashton hacia el centro para bailar. Nos miramos entre todos asintiendo y sonriendo. En la pista Annie abraza a Ashton y él se pega a ella. Son adorables. La melena negra de Annie va de lado a lado mientras se ríe con Ash. Dan una vuelta y veo sus puños con heridas.
-Es admirable lo que Annie ha hecho por vosotros, sobre todo por Ash.
-Pero realmente, ¿qué dijeron Nataly y Ashley para que ella reaccione así?
-Cosas malas de sus gustos, ataques hacia vosotros y Ashton. Según su “Cito textualmente”, algo así como: frikis con guitarras, cuatro pringados, el del pelo rarito, el alto que se cree guapo, el moreno que no parece de aquí y lo que más le ha dolido a Annie… El que se raja, que tendría que haberse muerto, que quién quiere escuchar esa puta risa todo el día molestando… Y ahí ella le ha partido la cara. Que también os digo que es normal, yo también lo hubiese hecho.
-Joder. Tengo que darle las gracias.
-Sí, y yo.
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>Narra Annie<
Ashton agarra mis caderas, siento sus manos en mí y quiero besarle. Pero realmente, ¿qué siente él por mí? La canción cambia, no sé qué está sonando pero Ashton se acerca a mi oído y susurra:
-¿Lo intentamos?
-¿El qué? –Respondo confusa.
-Tú y yo.
Todo mi mundo para, centrando su atención en esos ojos.
-Sí –Le digo.
Sus hoyuelos responden a mi felicidad y nos besamos con la música de fondo en el bar donde le vi actuar por primera vez, enamorándome irremediablemente de Ashton Irwin.
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Vuelve
Fanfiction¡Hola! Antes de leer tienes que saber algo. Escribí esta historia para sacar de mi cabeza todos estos momentos. Puede que algunos sean demasiado bonitos, imposibles, demasiado ficticios. Hay momentos duros, serios, momentos que no quieres vivir y mo...