Capítulo 18

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 Abro los ojos de golpe, confusa.

-¿Mike?

 Es lo primero que digo. He oído un golpe. ¿Dónde estoy? Miro a los lados confusa. ¿Qué hago aquí? Empiezo a respirar con fuerza asustada y sin poder evitarlo grito con miedo. Entonces mis ojos llorosos ven el póster. El maldito póster de pokemon. Me tapo la boca con ambas manos y respiro como puedo. Londres. Estoy en Londres.

-¡Erika! –Es la voz de Luke. Jack, Calum y él entran a la habitación con pistolas en la mano. ¿Qué hacen con armas?

 Oigo cómo suben las escaleras corriendo y apartan a Calum de un golpe. Michael entra con Ashton detrás mirándome preocupado. Mi corazón aún va rápido. Mi novio sube a la cama y deja una escopeta enorme de juguete a su lado mientras estira la mano a mis brazos, apartando mis manos de mi cara.

-¿Qué ha pasado? ¿Por qué has gritado?

-Me he despertado y estaba sola, en una habitación que no conozco y pues… pues… No sabía dónde estaba, ¿vale? Y, no sé, yo… He oído un golpe, creo, y he gritado… Hasta que he visto el póster.

 Calum y Jack se ríen, Ashton les mira mal y les dispara con su pistola. Ellos huyen y él se gira antes de salir:

-Vaya, susto, idiota. Van a ganarnos por tu culpa. –Guiña un ojo y sale corriendo.

-Me he despertado porque vais por ahí pegándoos tiros y dando golpes.

-Es una guerra, cariño. –Me dice Michael.

 Le sonrío y veo detrás de él que Luke sigue aquí mirándome. Michael se gira a él y nuestro amigo se acerca a mí. También deja el arma en la cama y me coge de los hombros.

-Erika. –Sus ojos desprenden miedo.- No vuelvas a gritar así. ¿De acuerdo? Jamás.

-Va...Vale –Tartamudeo.

 Su nariz está roja, intentado no llorar. Un recuerdo asalta mi mente, como pequeños flashbacks. Luke y yo en su calle, unas ruedas de coche frenando, y el choque. Una persona saliendo disparada del coche al asfalto. Mi grito de horror al reconocer al hermano mayor de Luke muerto en el suelo. Sangre por todas partes, mi mano arañando el brazo de Luke, él corriendo, sirenas en la calle. Sangre, gritos, lágrimas.

 Luke y yo seguimos mirándonos, pensando en lo mismo.

-Me voy a proteger la posición de la piscina, te esperamos Mike.

 Y dicho eso sale de la habitación dejándome llorando lo que él jamás llorará otra vez.

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 Alguien llama a la puerta. Me levanto del sofá y voy a abrir.

-Hola, querida.

-Hola, George-Le sonrío.- Deja que te ayude.

-No, tranquila, puedo con todo.

 Entra con las cajas de pizza y cierro la puerta tras él.

-¡Chicos la cena!-Grita Eskai.

-¡Ya vamos!

 Al segundo entran corriendo al salón aún algo mojados de la piscina.

-¿Podemos cenar fuera? –Nos pregunta Calum- Hace muy buena noche y aún tenemos el pelo empapado…

-Yo lo veo bien-Razona Eskai- ¿Votos a favor?

 Levantamos todos la mano, así que sacamos las pizzas y las bebidas al porche de madera. Creo que es mi parte favorita de la casa; la zona chill-out, la madera, la música, la piscina…

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