No todos los ángeles tienen alas

10- CONOCIENDONOS

Haniel

Cuando desperté no vi a nadie, estaba en mi habitación sola, me levante y note que traía otra ropa no le di tanta importancia y salí, fui a la sala en donde se escuchaba algunos murmullos, aunque mis oídos eran super afinados después de lo que me había pasado, mis sentidos se cerraban y no funcionaban bien, así que tuve que ir personalmente para ver quiénes eran.

Al llegar vi a mis vecinos todos estaban sentados; algunos en el sofá y otros en el piso, habían ordenado pollo y estaban comiendo, Jin me sintió llegar y se paró de inmediato.

Jin: ¿estás bien?

Haniel: todo fue tu culpa- estaba realmente enojada y más al saber que otras personas habían visto esa parte de mí.

Jin: si, lo siento pero esos sujetos me provocaron

Haniel: y desde cuando te interesa lo que los demás piensen de ti

Jin: es que no era de mí de quien hablaban, pero me alegro que estés bien, tuve que cambiarte de ropa la que tenías estaba con sangre, ya la puse a lavar así que no te preocupes.

Haniel: ¿qué hacen ellos aquí?- pregunte al ver a nuestros vecinos vernos discutir

Jin: estaban preocupados por ti así que les invite a comer hasta que despertaras

Hyuk: ¿Noona está bien? ¿Le duele mucho su herida?

Haniel: estoy bien, gracias por preocuparte- ese niño me daba algo de ternura aunque sabía que no debía encariñarme con nadie, me daba ganas de protegerlo o más bien me pasaba con esos 6 chicos en especial y no sabía el motivo.

N: creo que ya nos tenemos que ir, nos alegramos que estés bien, estábamos muy preocupados

Hongbin: si, Leo-hyung era el más preocupado

Haniel: ¿quieren venir a cenar mañana?- no es que me cayeran mal, ni bien pero no me gustaba deber nada a nadie así que lo único que se me ocurrió fue invitarlos a cenar.

Jin: digan que sí, no siempre se la encuentra de buen humor- dijo divertido

N: está bien, a las 8 te parece bien

Haniel: está bien- me gire y me regrese a mi habitación tenía que concentrarme y tratar de hacer que mis sentidos vuelvan a la normalidad.

La noche fue larga; tarde mucho para que mis sentidos vuelvan a su estado original y Jin no había dejado de molestar, había venido a mi habitación un millón de veces para ver si aún estaba viva.

Al día siguiente me puse a investigar; había demasiadas cosas que tenía que entender, por empezar era descubrir quién era el ángel que estaba ayudando a los humanos y segundo necesitaba los videos que Uriel no quería darme.

A pesar de todo; el día pasó rápido y cuando me di cuenta ya eran las 7 de la tarde y tenía que preparar la cena que había prometido hacer, así que me puse a hacer la cena mientras que Jin no hacía nada más que molestar.

Haniel: quédate quieto eres peor que un niño

Jin: pero me aburro

Haniel: si no dejas de molestar te voy a atar a la silla- no tarde demasiado en hacerlo, aunque sabía que podía desatarse si así lo quería, termine de preparar la cena y a las 8 en punto tocaron el timbre salí a atenderlos y estaban los seis con una sonrisa aunque no les duro demasiado, al entrar vieron a Jin atado en la sala quien estaba feliz por verlos.

Jin: qué bueno que llegaron, ya estaba aburrido

Ken: ¿porque estas atado a una silla?

Haniel: porque no dejaba de molestar

Hongbin: esto da miedo

Jin: ¿quien me desata?

Haniel: si molestas nuevamente te voy a atar con cadenas

Ravi: que miedo

N: creo que tendría que hacer lo mismo con cierto chico inquieto

Hyuk: ¿porque me miras a mí?

N: por nada en especial

Haniel: pueden ir ubicándose ya les traigo la cena- me adentre a la cocina y empecé a preparar los platos escuche que alguien se acercaba y entraba a la cocina, era Leo había aprendido a distinguir su esencia.

Leo: ¿necesitas ayuda?

Haniel: estoy bien, gracias

Leo: ¿ya estas mejor? Por lo de ayer

Haniel: si, lo siento por hacer toda escena- quería que se olvidaran lo que habían visto.

Leo: Jin estaba muy preocupado

Haniel: si, siempre es así

Leo: ¿Quiénes eran los sujetos de ayer?

Haniel: un viejo amigo

Leo: yo no lo consideraría un amigo

Haniel: por eso dije viejo amigo, ya está todo listo, ¡vamos! – tome algunos platos y me dirigí al comedor en donde todos nos estaban esperando

La cena transcurrió tranquila Jin y Ken se llevaban muy bien siempre hacían bromas y no dejaban de hablar, el mayor de todos ellos trataba de que los menores se comportaran pero era casi imposible controlarlos.

Haniel: deberías rendirte, no hay quien los pare- le dije viendo que se frustraba cada vez que no le hacían caso

N: ¿cómo haces con Jin? Todos ellos son como niños

Haniel: fácil, lo ignoro completamente

N: yo no puedo hacer eso

Haniel: ¡se nota! Pero Leo se está comportando

N: es el papá del grupo

Haniel: ¿y tú que eres?

Hyuk: él es nuestra madre- sonrió al decirlo y note como N se avergonzó un poco pero se notaba en sus ojos algo de felicidad y orgullo por ser nombrado así.

Jin: tengo curiosidad, ¿Hyuk porque le dices Noona a Haniel? Ella es menor que tú.

Hyuk: no lo sé, solo me sale decirle así

Ravi: eres el único que la llama así

Hyuk: creo que a ella no le molesta ¿verdad?

Haniel: realmente no me molesta, puedes llamarme como más te guste pero no me pongas sobrenombre raros

Jin: ¿yo también puedo llamarte como más me guste?

Haniel: NO- si dejaba que Jin me llamara como quisiera todo se iba a arruinar y no quería eso, era mejor que nuestra relación se mantuviera de la misma forma que se estuvo manteniendo por años.

Ken: ¿están solos en corea? ¿Y sus padres?

Jin: no tenemos padre fallecieron hace tiempo

Ken: lo siento, no lo sabía

Hongbin: ¿y como es que viven?

Jin: de la herencia y nos hicimos cargo de la empresa que nos dejaron

Haniel: creo que es mejor dejar hasta ahí la conversación de nuestra familia, no creo que quieran saber más- siempre era la misma historia, no podíamos decir quienes éramos o más bien que éramos, esa historia la inventamos hace tanto que aún nos sirve, porque siempre estamos en movimiento gamas nos quedamos en un país por más de 10 años así que no hay problemas.