No todos los ángeles tienen alas

13-UN POCO DE HISTORIA Y ALGO MÁS

Como había dicho esos chicos ya se habían acostumbrado a quedarse en mi casa, Jin los invitaba para cualquier cosa y ellos no dudaban en venir, aunque quisiera que ellos no estén no podía hacer mucho cuando a Jin se le metía algo en la cabeza era imposible hacerle cambiar de opinión.

Según lo que me había dicho Jin el ángel que estábamos buscando estaba siempre con Raziel, pero se nos hacía raro que un ángel lo esté ayudando, según lo que había averiguado ese ángel se había convertido en un ser no vivo; un ser no vivo era un humano el cual renunciaba a su alma dejando de existir las personas que te conocían se olvidaban de ti era como si nunca hubieras nacido, los seres no vivo que seguían a Raziel eran humanos a los cuales habían seleccionados hace tiempo, algunos humanos decidían convertirse en seres no vivo ; pero era perder demasiadas cosas por vivir un poco más de lo que estabas destinado a hacerlo, ellos jamás podrían tener una vida nuevamente, no sentían hambre ni frio ya no tenían sentimientos por nadie lo único para lo que servían era para peleas o para protección, después de un tiempo cuando su voluntad era doblegada eran como zombis a los cuales podías mandar a hacer lo que quisieras, pero con el tiempo ya no servían y los tenías que eliminar. No sé a cuantos seres no vivos elimino Raziel desde que todo esto empezó.

Un ángel si quería vivir eternamente tenía que renunciar a sus alas en una noche de luna llena, pero era muy doloroso que te arranquen las alas, un ángel convertido en un ser no vivo no era algo bueno, pero la pregunta era quien era ese ángel que había ayudado a un ser tan repugnante como Raziel.

Raziel era el jefe de un pueblo hace mucho tiempo él llevo a los suyos a atacarnos, esa noche lograron eliminarnos casi a todos, los pocos que logramos escapar nos mantuvimos juntos hasta que cada uno tomo su camino, como ya no teníamos alas podíamos pasar por humanos fácilmente, sobrevivimos a muchas cosas, nuestros dones seguían intactos así que lo fortalecimos.

Me encontré con Jin una noche en donde buscaba pistas de Raziel, estaba peleando con unos seres no vivos y le estaban ganando así que decidí ayudarlo desde esa vez ya no se despega de mí, eso fue hace unos 15 años atrás con Uriel siempre mantuve contacto desde que me lo cruce en Venecia.

Todos habíamos cambiados, el mundo nos obligó a cambiar, lo único que no cambio fue el objetivo de nuestra venganza los tres queríamos tener la cabeza de Raziel.

Mientras pasaba el tiempo nos hicimos de fortunas para poder sobrevivir cada uno hizo sus negocios y lo seguíamos haciendo se podría decir que teníamos suficiente dinero para vivir eternamente y era lo que estábamos haciendo.

Jin me hablo y decidimos salir, había una fiesta en donde de seguro iban a ir seres no vivos que aun conservaban su voluntad y tal vez sabían algo, me cambie y me puse un vestido corto negro sin mangas con el cabello suelto el cual llegaba a mi cintura tome una cartera de mano en donde guarde un arma con balas de plata mezclada con rubí, salimos y nos dirigimos a la dichosa fiesta en donde también iban a haber humanos lo cual iba a ser un problema.

La fiesta transcurrió normal encontramos muchos seres no vivos pero ninguno sabía nada, la mayoría eran adolescentes que de seguro hace más de un mes se habían transformado, no estuvimos mucho tiempo y decidí regresar a casa Jin quería disfrutar de la fiesta así que se quedó.

Llegue a casa y me dispuse a cambiar pero los vecinos estaban discutiendo me concentre en su pelea y al parecer no era la primera vez que discutían por el tema.

Al parecer uno de ellos iba a ser seleccionado para hacer un programa en donde te casabas y tenías un matrimonio virtual o algo así, N estaba enojado porque Leo y Ravi no querían participar diciendo que si los consideraban para el programa iban a salir a decir que tenían novias lo cual no era cierto, cada uno tenía una opinión diferente con respecto al programa N quería hacerlo al igual que los demás pero no estaba del todo seguro los sentimiento se interponían a tal grado que podrían enamorarse de verdad.

Escuchen un como azotaban la puerta de la entrada alguien había salido enojado y se dirigía a mi departamento, ni siquiera tuve tiempo de cambiarme cuando escuche sonar el timbre, así que tuve que ir a atender, al abrir la puerta estaba Leo enojado, pero se podría decir que su rostro cambio al verme, me miro de arriba abajo escaneando todo mi cuerpo y el vestido que llevaba no ayudaba demasiado.

Haniel: ¿pasa algo?- le pregunte haciendo que dejara de mirarme

Leo: yo... me preguntaba si puedo pasar la noche en tu casa

Haniel: está bien- me hice a un lado de la puerta para que pasara

Leo: ¿ibas a salir?

Haniel: no

Leo: ¿y porque el vestido?

Haniel: fui a una fiesta con Jin, pero me aburrí así que me regrese, estaba por irme a cambiar cuando tocaste el timbre

Leo: lo siento

Haniel: no importa, quieres algo para beber que no sea alcohol

Leo: un refresco estaría bien- me fui a la cocina a buscar algo para beber al regresar a la sala él seguía en el mismo lugar me acerque y le di la bebida, me senté a un lado de él, se podría decir que estaba nervioso pero no sabía el motivo

Haniel: ¿estás bien? parece que tienes fiebre- deje mi vaso en la mesita y acerque mi mano a su frente él se sorprendió pero no aparto mi mano, más bien la sujeto y me acerco a él soltando su vaso el cual cayó al piso. Me tenía sujetada de la cintura y sus labios prácticamente sobre los míos quise apartarlo pero no podía era como si mi fuerza se hubiese deteriorado en un solo instante. Sus labios estaban sobre los míos al principio estaban quietos pero luego los empezó a mover de forma delicada no sé en qué momento le empecé a responder con la misma delicadeza pero no quería que se detuviera, mi cordura se estaba yendo al carajo con esos labios los cuales estaba segura que se iban a volver mi adicción.