Capítulo 11, Apareciste

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Canción: Voy Amarte. Carlos Rivera.

Hoy no es día de actualización pero en vista de que UAS llegó a las dos mil lecturas, esta es mi manera de compensarles esto..DOS MIL veces gracias ♥

Este capítulo va para ti mi sol, Cici tqm, gracias por acompañarme aquí ♥

En multimedia, para que se hagan una idea de como viste para la carrera, Tori :D



«¿Por qué te niegas a lo que siente tu corazón?

Porque no es correcto, yo estoy con él. Compréndeme, mi príncipe.

No lo amas. Fin de la discusión. Por favor, mi princesa.

Siempre trato de hacer todo bien, que sea perfecto, no quiero arruinar eso.

¡No somos perfectos, Victoria, entiéndelo de una vez, maldita sea. La imperfección es la que nos hace únicos, así como este amor que siento por ti y estoy seguro que tú sientes lo mismo.»

—Victoria, vamos, despierta—escucho la voz de mi padre. Su mano, me acaricia el brazo. Me había quedado dormida en la habitación principal del jet. De nuevo esos sueños y voces en mi cabeza, sé que mi voz es una de ellas, pero lo otra es distorsionada, es agotador no recordar esa parte de mi vida. Me desperezo, mientras me siento en la cama.

—¿Ya llegamos?—hago la pregunta viendo a mí padre, mientras recojo mi cabello en una cola de caballo.

—Estamos a una hora de aterrizar, cariño.

—¿Tienes noticias de Jhonny, y mi bebé?

—Desde ayer, se encuentran en Francia. Jhonny, pronostica buen tiempo.

—No sabes como ansío ya estar en esa pista.

—Todo a su tiempo mi querida, Victoria. La impaciencia puede provocar un ataque al corazón, según varios estudios—no puedo evitar soltar una carcajada.

—Papá, creo que contando tus impaciencias, has tenido unos cien ataques cardiacos. Tu eres la persona más impaciente del planeta entero.

—Sí, eh, bueno, no lo niego, pero no sigas mis pasos, salvo que sea solo en las carreras de auto. Y ya levántate dormilona, necesitas comer algo, llevas muchas horas sin probar bocado.

Una hora después, aterrizamos en el aeropuerto de Marseille, en la ciudad de Marsella, desde acá debemos partir a los Alpes Marítimos, al distrito de Grasse, específicamente en la localidad de Le Castellet, en Provenza, donde se llevará a cabo el primer circuito, en el autódromo, Paul Ricard. Estamos algo retirados y el viaje es por carretera, eso nos llevará dos o tres días para llegar al sitio. Mi padre, ya tiene todo cronometrado, es el mejor manager, no me quejo para nada de él, salvo que ronca.

—¿Crees posible que partamos de una vez?—me pide, acariciando su mentón, eso lo hace cuando se encuentra inquieto.

—Por mí, no te preocupes, papá. Ya quiero llegar a Le Castellet—pronuncio esto último con mi perfecto francés.

—Bien. No se diga más.

Una hora después, nos encontramos vía a los Alpes Marítimos, a bordo de la ultima Ford Explorer del año. Detrás de nosotros, dos camionetas más del mismo modelo, con nuestros escoltas. Mi padre y su bendito sistema de seguridad, detesto tanta pomposidad aunque se que lo hace por nuestro resguardo. Decido dormir otra siestecita, me espera un viaje largo, con sus respectivas paradas en algún hotel, sin embargo, prefiero recargar energías desde ya.

Anhelo Secreto© Libro 1 Bilogía Secretos BorradorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora