Capítulo 24

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Desperté ya en la habitación del hospital, vi a Jason inquieto dando vueltas por la habitación sin darse cuenta de que me había despertado.

-Amor ¿Estas bien?

-Pequeña por fin despertaste, estaba muy preocupado. ¿Cómo te encuentras?

-Mareada y algo dolorida. Me gustaría poder ver a Blanca.

-Ya he llamado a mi madre para que la traiga.

-Siento todo lo que te hecho pasar amor.

-No lo sientas no es tu culpa lo importante que ya estas a mi lado por fin.

    Entonces Jason me abrazó con delicadeza y ternura y note que sus lágrimas caían sobre mis hombros y entonces también empezaron a caer lágrimas de mis mejillas en sus hombros y nos envolvimos en un abrazo lleno de llanto, amor y ternura, habíamos pasado mucho todo ese tiempo. Después de secarnos las lágrimas el uno al otro, Jason me dijo que descansara un poco, se tumbó a mi lado y me acarició el pelo y la cara hasta dormirme. Al cabo de una hora sentí dos manos pequeñitas acariciándome la cara y cuando desperté vi a Jason con Blanca en brazos a mi lado. Rompí en llanto por la alegría de tener a mi pequeña flor a mi lado por fin y la abracé con todo el amor de mi corazón y Blanca secaba mis lágrimas con sus manitas y al verme reír se reía. El doctor me dijo que debía estar 3 semanas porque llegué con tal debilidad que podía haber muerto. Era ya de noche, Jason y Blanca dormían a mi lado pero yo no dormía, pensaba en todo lo que me había sucedido, en todo lo que habíamos sufrido y que todo eso nos había hecho más fuertes, Jason me sorprendió porque había mejorado mucho en la lucha, me sentía orgullosa. Entonces empecé a sentir el cansancio y mis pensamientos se convirtieron en un profundo sueño.    

Personalidad Confusa: el regresoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora