Bellota
Allí nos encontrábamos los dos, frente a frente, con nuestras miradas neutras. La casa estaba completamente silenciosa; lo único qué rompían el hielo eran los suspiros innecesarios de él. Sin querer empecé a recordar aquélla escena tan embarazosa en el hospital para ser más exactos afuera de la habitación de mí padre delante de pacientes, doctores, enfermeros, y niños. Calor, demasiado calor abarcó en la zona de las mejillas cubriendo también mis orejas, estaba completamente enrojecida ante Dai el cuál sonrió perversamente obligándome a voltear la cara.... es un idiota ¿cree qué porqué vine a su casa olvidaré el abandono? Puede qué suene egoísta e incluso absurdo pero estoy en todo mí derecho de enfadarme.
- con esto ya puedo morir feliz- escuché el murmullo de mí acompañante para, seguido, un flash invadir por el lado izquierdo hasta llegar al rabillo del ojo.
-¡borrala!- exclamé furiosa intentando arrebatarle el teléfono, cosa qué no logré exitosamente.
- ¿pero porqué? ¡Te vez doblemente adorable!
¿Acaba de decir "doblemente adorable"? Por eso mis niños las drogas son malas....... Esperen ¿A quién le estoy hablando? Mierda, debería ir al psicólogo.
-deja de ser tan infantil Dai, tienes más de treinta años. Ni Shou se comporta así.
Su cara pasó de ser divertida a una llena de amargura y odio, mí hermano podría aguantar cualquier insulto e inclusive golpes, pero aceptar qué ya no era un adolescente, padre de dos niñas hermosas y un lujoso trabajo asegurado simplemente era una cachetada al mundo real bastante dolorosa. No pude evitar reír a carcajadas ya que, pasados cinco minutos, continuaba de la misma forma observándome enojado.
-¿tienes hambre?- preguntó claramente esquivando el tema- en el refrigerador tengo sushi.
-¿sushi?- no pude descifrar cuál era mí expresión facial en ése momento pero una llena de felicidad no era- odio ésa cosa cruda.
- bien entonces te mueres del hambre- lentamente sé levantó del suelo, cómo el apartamento era bastante pequeño en unos simples cuatro pasos ya sé encontraba husmeando en él- en casa de Princesa hay más comida.
- sabes qué odio cualquier cosa relacionado con ésa cosa- me crucé de brazos mientras arrugaba la nariz- mí orgullo puede más qué la comida.
Un suspiro salió de sus labios al mismo tiempo qué cerraba la puerta del refrigerador, en una mano traía el asqueroso y apestoso sushi, en la otra no pude identificar perfectamente el objeto ya qué lo llevada detrás de él. Con cuidado y precisión apoyó la comida sobre la mesa volviendo a sentarse, sutil y calmado.
- ten- me entregó un sobre rosa el cuál emitía una fragancia varonil.
- ¿qué es esto Dai?
- me enteré qué saldrás de viaje con los trillizos, ¿cierto?- asenti dudosa jugueteando con mis dedos bajo la superficie de madera- jurame qué no abriras ésta carta hasta qué lleguen haya y estés verdaderamente sola.
- lo prometo.
Brick
- ¡Que malvado eres Rage!, dejame cortarte ése pelirrojo cabello largo ¿si?- exclamó por novena vez el moreno persiguiéndolo con un par de tijeras y un peine pequeño.
- ya hablamos de esto Rave, mí sagrado y sensual cabello no se toca.
- ¿pero, no quisieras estar más sexy para tú novio?
La cara perversa de mí peluquero primo coloreó salvajemente el rostro del mayor dándole como respuesta "el dedo mágico del monte: vete a fabricar té en Tailandia", no griten nenas ésta maravillosa frase ya tiene derechos de autor.........Definitivamente necesito salir al mundo real y conocer personas qué no estén dentro de un libro.
- ¡Que no es mí novio!- chilló molesto sentándose sobre el sillón individual color mostaza- simplemente estamos saliendo, probando sí puede ocurrir algo más.
- ¿así qué el pequeño pasivo está en celo? Eres todo un loquillo cabeza de zanahoria 0.2- canturreo saliendo de la cocina Butch junto con los dos rubios, Boomer y Raze.
- ¿cabeza de zanahoria 0.2?- pregunté con cierta confusión.
- fácil- intervino con una sonrisa socarrona mí hermano menor- porque la zanahoria original eres tú.
> sabía qué la estupidez de Butch era contagiosa, pero nunca imaginé qué el virus se expandiera tan rápido <
Un visible TIC se apoderó de mi ojo izquierdo haciéndome temblar, ¿cuándo fue la última vez qué me pasó esto? ¡Oh ya lo recuerdo! Estábamos en el kinder y una niña se me " declaró ". Fue en ése momento de tensión qué empezó el movimiento desenfrenado espantando a la pequeña, cómo era la primera vez qué me ocurría lloré delante de todos, más tarde llamaré al psicólogo, volví a traumarme..... otra vez.
- ¿podemos concentrarnos en el tema principal?- interrogué carraspeando la garganta- los reuní a todos para contarles que saldremos de viaje a visitar a los viejos, ¿quieren venir con nosotros o prefieren quedarse?
- yo paso, el pelo se me estropea expuesto al sol por mucho tiempo- habló Raze haciendo pose de diva, está de más decir que no quiere ir ni aunque lo obliguemos. Bien una carga menos- ¿y ustedes hermanitos?
- iré a la playa con Burbuja, hace un mes venimos planeando éste viaje. Pero saluden a los tíos de mí parte por favor- rápidamente asentí con una gran sonrisa.
- adoraría ir con ustedes y arruinarles la existencia- dijo con entusiasmo mirándome, ésa fue la indirecta más directa que e visto en lo largo de mí vida- pero no gracias, pasaré todo el fin de semana con Mitch.
Los silbidos y aplausos se hicieron presentes en un simple pestañeo transformando poco a poco el ambiente a uno picante.
- traten de usar condones. No queremos que quedes embarazado Rage.
- ¿Más idiota imposible, verdad Butch?- cuestionó golpeando severamente al mencionado. A raíz de éso todos comenzamos a golpearnos tendidos en el suelo. ¿Cómo sucedió? Ésta vez no tengo una respuesta lógica para éste asunto. Pero una voz, ésa voz tan magestuosa, tan..... femenina, no podía creer lo qué mis ojos y oídos lograron ver y escuchar, nada más y nada menos qué es espantoso chillido de Raze rogando por su "precioso" cabello.
Ésta família no es normal, nadie es normal, ¡la normalidad no existe!
Puede qué no seamos los mejores en todo el mundo pero seremos los únicos.
Okey ya mejor me callo de una maldita vez.
ESTÁS LEYENDO
ENAMÓRATE DE MÍ (EDITANDO)
Fanfic- Cuéntame con sinceridad, ¿qué es lo último qué recuerdas? - preguntó por la línea una voz femenina desconcertando a la morocha. - Estaba con un par de chicos en medio de la nada y de repente me perdí en un bosque..... ya después todo es borroso...