Bad Wolf. « theo raeken » EDITANDO

Capítulo 7. (BW2)

- Chicos, habéis bailado genial. - exclamó Lydia cuando salimos afuera.

Liam me miró con una sonrisa y guiño un ojo, haciéndome reír.

- Tenemos que vernos más veces. - dijo Stiles. - ¿Qué os parece el Sábado?.

- Me parece bien. - hablé. Todos asentimos y nos despedimos con un beso en la mejilla y un fuerte abrazo.

Liam agarro mi mano mientras caminábamos hacia el coche. Le mire sonriendo, Liam miro hacía todos lados y me metió en un callejón algo oscuro.

- ¿Qué haces?. - pregunté divertida.

Él sonrío, y atacó mi cuello, mordiendo, besando, jugando con él. Un suspiro salió de mí boca y le separe.

- Liam , aquí no. - murmuré. - Cualquiera nos podría ver.

- Eso es lo que lo hace más divertido. - dijo y volvió a besar mi cuello. Intente empujarle para que se detuviera, pero seguía haciendo fuerza para que no le separara. Metió sus manos por debajo de mí cintura, haciendo aún más fuerza.

- Liam, te he dicho que pares, por favor. - seguí empujando hasta que alguien agarro de la camiseta a Liam, lanzandole con fuerza hacía la pared.

Mi boca hizo una gran o y mis manos fueron hacía ella, sorprendida. Mis ojos estaban cristalinos, Liam nunca me había echo nada de esto, me sentía un objeto, algo qué no valía nada. ¿Él estaba apunto de violarme?.

Él señor se acercó a mi, y pude reconocer ese aroma que tanto me gustaba en un pasado y que aún me seguía atrayendo. Era Theo.

- Theo. - murmuré. Una sonrisa apareció en el rostro del chico. Lágrimas ya salían de mis ojos, no podía controlarlas, me sentía tan mal conmigo misma y tan decepcionada con Liam. Unos brazos me rodearon y me deje abrazar, sabía que era Theo pero ahora más que en ningún otro momento, necesitaba un abrazo.

- Te sacaré de aquí. - susurro y asentí, sabía que no debía ir a ningún lado con él, pero realmente necesitaba alejarme urgentemente de Liam, no podía ni mirarle. Theo agarro mi mano y entrelazo nuestros dedos fuertemente, miro por última vez a Liam. - ¿Quién coño te crees para hacerla eso a ella? Sobretodo por que todos pensábamos que la querías, pedazo de capullo. Prometo que ella no volverá a verte y tú no la volverás a tocar de ninguna manera.

Mi corazón se detuvo cuando Liam levanto la mirada y empezó a llorar, tapo sus preciosos ojos con sus manos mientras las lágrimas caían. No sabía ni que sentir en ese momento, Theo me ayudo a saberlo cuando tiro de mí para salir de aquel callejón.

- ¡Danna!. - escuché el grito de Liam, su voz estaba temblorosa y débil.

- Más rápido, por favor. - hablé entre lágrimas y Theo asintió acelerando el paso. Una vez que llegamos a su moto , cogió un casco y me lo colocó suavemente.

- ¡Danna, no , por favor!. - escuché su voz de nuevo aún más cerca. Liam se acercaba rápidamente hacía nosotros.

- ¡Arranca, ya!. - grité. Theo obedeció, y arranco pasando por su lado.

- ¡No!. - escuché su voz por última vez antes de que la moto doblará la esquina.

Mis lágrimas no dejaban de salir, me aferre con fuerza a Theo, apoyando mi cabeza en su espalda, dejando que las lágrimas se acumularan. Note como después de un rato, la moto se detuvo y como me quitaban el casco.

- Danna. - murmuró. Acerco una mano hacía mi cara y me acaricio suavemente. - No sé que dec...

- Tranquilo, yo tampoco lo sé. Tampoco sé que sentir ahora mismo. - murmuré cabizbaja. Él levanto mi cabeza con sus dos manos, haciendo que le mirara a los ojos.

- Ahora mismo puedes sentirte protegida, porque conmigo siempre lo estarás.

Trague con dificultad, no esperaba que él me dijera esto. Me confundía como mi cuerpo reaccionaba cuando el estaba cerca, tan vulnerable, tan débil, frágil, era una explosión de emociones dentro de mí que realmente me gustaba como se sentía aún pasando años el seguía haciéndome sentir lo mismo.

- No sé como agradecerte esto que has echo por mí. - él sonrío mientras seguía acariciando mi rostro.

- No tienes que agradecerme nada, mi dama estaba en apuros. - dijo con un tono divertido, haciéndome reír.

Tu dama estaba bailando contigo antes, yo no lo soy.

- ¿Acaso estás celosa?. - preguntó con una sonrisa de oreja a oreja. Mi corazón se detuvo, mierda, debería de dejar de pensar tan alto.

- No. - respondí, él seguía riendo, sabía que mentía. - ¿Está es tu nueva casa?. - pregunté mientras me bajaba de la moto, él asintió.

- Sí, la otra la vendí. - respondió. - Puedes quedarte aquí, conmigo, todo el tiempo que quieras.

Le miré y sonreí, él seguía siendo el mismo.