La Cazadora /nalu/

capitulo 14

Pov Lucy

Ya ha pasado unos tres días y sigo aquí, tengo que escapar con Natsu, estoy demasiado preocupada por el, ¿que le estarán haciendo?

Mi brazo hace mucho que se recupero, pero cada vez que viene la maldita, me pregunta por que mate a su maldito engrengo, y ya se lo dije mas de una vez, pero la maldita no me cree, cada vez que no respondo me da un latigazo, pero lo esquivo a veces bien.

Miro a todas las direcciones de las cuatro paredes malolientes, han pasado horas desde que estoy aquí y cada vez mi humor esta peor.

Ya no se que hacer, pero se que no me rendiré, no ahora, Natsu esta en peligro por mi culpa y eso es algo que no puedo considerar.

Pov Natsu

Los malditos vampiros me volvieron a drogar y encima me amarraron en la cama, ¿para que?, pues os lo diré, para que la maldita de su madre me este violando a cada rato.

Yo lo único que se me escapa de la boca es el nombre de Lucy. ¿Que le estarán haciendo?¿Estará bien?¿Podra escapar?, todas esas preguntas rondan por mi cabeza una y otra vez.

–Lobitoo~~-dijo una voz que ahora mismo odio.

Yo no contesto pero elevo mi cabeza y veo que esta con un conjunto provocativo, cree que con solo verla mi erección va por ella, pues no.

Es solo que me imagino a mi Lucy y mi amigo ya esta arriba.

Siento sus manos en mi abdomen, su intimidad rozando la mía, sus labios besando mi cuello, su lengua saboreando mi sudor.

–Bien pasemos a la acción.

Agarro mi pene y se lo puso en la entrada de su intimidad, entro poco a poco, ella empieza a gemir.

Cuando ya mi pene esta dentro de ella empieza a subir y a bajar, sus manos se las lleva a sus desnudos y redondos pechos con un tono gris. Empieza a estrujarlos, a pezñicarse sus pezones y ella sigue gimiendo.

Yo a cambio solo me imagino los redondos pechos blancos y perfectos con su pezón rosado, su voz gimiendo mi nombre, sus mejillas sonrojadas, sus ojos pidiendo mas y mas.

Su vientre plano, su intimida junto con la mía, hace que me excite aun mas. Su largo y rubio cabello que hace que mis mano se enreden y se pierdan ahí.

Oigo un gemido fuerte y veo como se corre y a la vez me corro yo.

En un susurro digo su nombre.

–Luce-digo.

Pov Lucy

Agudizo mi oído y oigo mi nombre, es la voz de Natsu, por lo que he oído, esta exhausto. ¿Que cojones le estarán haciendo?

Intento pensar como escapar de aqui, pero para mi ahora es imposible, los barrotes de la celda y la pequeña ventana es de puro metal. La maldita chupasangre lo tenia todo planeado, la negociación, la caseta y todo lo de ahora. Joder ¿por que tendría tanto enemigos justo ahora?, espera un momento esta esa persona.

Solo tengo que decir eso y ellos vendrán.

Pues bien que comience.

–Sonido de los cielos,
Abrelo de par en par,
Estrellas de todo el universo,
Muestrate ante mi con todo tu resplandor.
Oh! tetrabiblos, yo soy la soberana de las estrellas completa tu aspecto.
Abre la puerta malévola.
88 estrellas de los cielos.
VEN A MI!!!
URANO METRIA!!!

Y como por arte de magia la pared se rompió en añicos mostrando a un chico de cabellos rubios, ojos marrones, cicatriz en su ojo izquierdo. Acompañado de su compañero, un lobo de unos cinco metros de altura, que supera a cualquier hombre lobo transformado, pinturas en su cuerpo, ojos color del mismo oro, están delante de mi. Mis viejos y queridos amigos.

–Me alegro de veros Abdallh y Abdul-dije con una sonrisa.

–Tambien nosotros Lucy, recordastes lo que te dije aquella vez-dijo recostándose en su compañero.

–No debo daros las gracias por venir a recastarme-dije y ellos abrieron los ojos y a la vez se miraron.

–¿Como?-dijo confuso.

–Si me secuestro Ducayne-dije seria.

–Ya veo-dijo arrascandose la nuca.

–¿Que creerías que era?-dije cruzandome los brazos.

–Nada nada-dijo mirándome.

–Bien primero tengo que ir al coche que ahí por allí aparcado, tengo que cambiarme de ropa y coger todas mis armas, aquí va a llover mucha sangre-dije saliendo de esa pocilga, me voltee hacia ellos que estaban parados-vamos-dije para que despertaran y andaran-¿Me....ayunaréis?-digo con mi flequillo tampandome mis ojos.

–No hace falta que lo digas Lucy, sabes que si-dijo Abdallh.

–Gracias chicos, os contare todo por el camino.

Al cabo de un rato llegamos al coche y ya les he contado todo de pe a pa. Rompo el cristal del coche con el codo y abro por adentro, cojo la maleta que tiene mi ropa adentro y la otra maleta que lleva mis armas.

Abro la maleta de la ropa y cojo unos pantalones ceñidos negros, una blusa de tirantes negra pegada a mi cuerpo, unas botas negras, una chaqueta de cuero negro y al final me hago una cola alta. Agarro la maleta de armas y cojo todas las armas y dejar la maleta vacía.

Me volteo y me dirijo hacia ellos, me miran arriba a bajo, chasqueo mis dedos y ellos ponen atención.

–Nos vamos muchachos-dije y nos ponemos a caminar hacia el castillo otra vez.

Continuara......

Foto de Abdallh y Abdul.