BARMAN

Preguntas

Youngjae

No pude dormir toda la noche ya que no dejaba de pensar en todo lo ocurrido, no me reconocía a mí mismo, (¿Por qué lo bese?, sé que desde que lo vi me llamo mucho la atención, pero no era para que le tomara mucha importancia, yo mismo me había propuesto en no interesarme en alguien, estaba asustado porque ya sabía la respuesta, me gusta y quiero estar con él).

Sin darme cuenta amaneció, así que decidí levantarme para ir a la escuela, cuando llegue me senté y coloque mi cabeza en la mesa para poder dormir un poco, después llego Zelo y vi que tenía algunos golpes eso me hizo enojar demasiado, pero Zelo me contó lo que le había pasado, cuando me estaba contando de la persona que lo salvo pude ver en él una gran sonrisa, sabía que le había gustado ese chico, porque yo ponía la misma cara cuando pensaba en ese estúpido barman.

En el transcurso de las clases seguía pensando que es lo que iba a hacer, si debía alejarme de él o debería decirle lo que siento, porque algo si sabía ya no podía llegar a ese bar como si nada hubiera pasado. Las clases se pasaron rápido porque no puse atención, sin darme cuenta ya estaba caminando con Zelo a la salida, en ese momento decidí que tenía que preguntarle qué es lo que sentía por mí, ya de lo que me respondiera tomaría una decisión, yo no quería ser el primero en decir que me gustaba porque sabía que iba a salir lastimado, por eso tenía que quitarme la duda, le dije a Zelo que se fuera solo ya que iría temprano para hablar con él me despedí y me fui al Liberum.

Antes de entrar respire profundo y agarre valor, al entrar como era temprano note que no había nadie me senté en la barra y vi que sólo estaba el dueño se acercó a mí.

-Qué raro que vengas tan temprano, Youngjae.

- ¿Cómo sabes mi nombre?

-Te vi en un artículo de una revista. Pero no te preocupes no le he dicho tu nombre a Daehyun- me respondió mientras me servía un trago.

-Por cierto, en donde está el- le conteste mientras tomaba un sorbo.

-No va a trabajar hoy, se enfermó.

-Está muy mal- lo dije un poco preocupado.

-No tanto solo que amaneció con fiebre y mejor le di el día.

-Menos mal.

-Si te preocupa tanto puedes ir a verlo, de echo no ha comido nada puedes llevarle la charola de comida que está a lado de su puerta.

-Claro yo se la llevo.

-Bueno, te dejo tengo que seguir limpiando- lo dijo mientras se metía al cuarto que estaba atrás de la barra.

Cuando me iba a levantar escuche la voz de Zelo, se había perdido así que accedí a que me esperara para que nos fuéramos juntos, le dije que en un momento regresaba. Me levante y fui a su cuarto del barman tome la charola que me dijo Yongguk que tomará y entre.

Él estaba acostado en su cama dormido, deje la charola sin hacer nada de ruido y me le quede observando un rato, se veía muy guapo dormido, mi mirada se fijó en sus labios, esos labios suaves que ayer había besado, me fui acercando más y más a su rostro quería volver a probar esos labios, cuando estaba a apunto me contuve (que estás haciendo Youngjae contrólate) me aleje de repente sentí como él tomo mi mano.

- ¿Porque te detuviste? - lo dijo mientras abría los ojos.

(Se estaba haciendo el dormido) me sonroje un poco solo agache la cabeza.

-Al menos debería de recibir un beso, por tu culpa me enferme- lo dijo en tono de burla.

Me puse aún más tenso no podía verlo a la cara, mi corazón empezó a acelerarse, se suponía que fui a verlo para preguntarle qué es lo que quería conmigo, pero cada vez que lo veo me quedo mudo.

-Es broma que te trae por aquí.

-Solo vine a dejarte la comida- le respondí mientras señalaba la charola.

-Nada más viniste a eso, pensé que querías hablar sobre lo que paso esa noche, me imagino que ya recordaste todo.

Al momento de escucharlo se me vinieron las imágenes a mi cabeza me puse nervioso.

-Mejor me voy adiós- le dije mientras me daba la vuelta para dirigirme a la puerta.

-Cobarde- me dijo mientras se levantaba de la cama - ¿siempre huyes cuando tienes miedo? -se empezó acercar a mí- ¿Por qué me besaste? ¿Porque vienes todos los días y solo me observas? ¿Porque te pusiste celoso cuando estaba hablando con esa chica y luego pusiste cara de tristeza cuando te dije que era mi novia?

-Te contestare todo si me respondes esta pregunta- estaba de espaldas sin verlo- ¿Te gusto?

-No te responderé con palabras mejor con acciones- al momento que dijo eso, me tomo del hombro para girarme y me beso tiernamente, yo solo cerré los ojos. - espero que esto sea una clara respuesta- lo dijo mientras que nuestros labios se separaban.

Mi corazón latía muy rápido, me sonroje y baje la mirada ya que él me estaba viendo fijamente.

-Bien ya te respondí es tu turno- lo dijo mientras acercaba más su rostro al mío, sentía su respiración eso me daba escalofríos.

Quería contestarle, pero no me salían las palabras, además tenía miedo de esto de lo que estaba sintiendo.

-Está bien si no quieres contestar te sacare la respuesta de otra forma- lo dijo mientras tomaba mi barbilla para levantarme el rostro y volverme a besar. Le volví a corresponder, esa sensación me agradaba hacia que me olvidara del vacío que sentía, lo abracé y empecé a besarlo intensamente, el seguía mi ritmo, introdujo su lengua y empezó a degustar toda mi cavidad sin querer solté un gemido, empezamos a caminar hacia la cama, pero al momento de llegar note que él se veía fatigado se me había olvidado que estaba enfermo, me separe.

-Lo siento creo que me regreso la fiebre- lo dijo mientras se tocaba la frente – al menos ya obtuve mi respuesta- lo dijo mientras me sonreía con un poco de fatiga.

Me sonroje un poco – será mejor que te acuestes- lo dije mientras lo tomaba del brazo y lo colocara en su almohada, después lo arrope y me voltee para irme.

-Espera quédate conmigo- lo dijo mientras me tomaba la mano.

-Lo siento, pero me tengo que ir alguien me está esperando- cuando lo dije vibro mi celular era un mensaje de Zelo, ya se había ido.

-Por favor no me gusta quedarme solo cuando estoy enfermo, me trae malos recuerdos- lo dijo mientras alzaba las cobijas y me invitara a entrar.

No dije nada solo entre y me acosté a su lado, el me abrazo – te puedo hacer una última pregunta, ¿Cómo te llamas? - me lo dijo un poco adormilado ya que la fiebre lo debilitaba.

No le conteste inmediatamente ya que no quería decirle mi nombre, tenia miedo de que cuando lo supiera sabría de donde soy y cambiara su forma de verme, que solo me viera como un banco como todos los demás, con los que salía nunca me había importado que supieran de donde venía, pero esta vez sí, no quería salir lastimado, pero algo en mi quería que el supiera todo sobre mí que me conociera bien que por primera vez a alguien le importara, así que agarre valor y respire hondo.

-Mi nombre es Youngjae.