The Fast And Furious

Capítulo 12

-     Hola amor, ¿Cómo estas?, Yo estoy perfectamente bien, ¿ Y tú? – dije con sarcasmo.

 Ambos me ignoraron y se pusieron  a hablar entre ellos, Harry ayudaba a Elena a que se mantenga de pie. Maldita zorra qué mierda estaba haciendo y Harry qué demonios le pasaba.

-  ____, ¿Estás bien? – preguntó Liam preocupado detrás de mí.

Al no recibir ninguna respuesta de mi parte dirigió su mirada al mismo sitio, al cual me encontraba observando, se encontraban Harry y Elena, se estaban besando.

Algo en mi se rompió de inmediato, sentí mis ojos cristalizarse, me di la vuelta para adentrarme corriendo a mi casa pero los brazos de mi padre envolviéndome en un abrazo fuerte me lo impidieron. Sollocé mientras me aferraba a él.

- Ya mi bebe. – dijo sobando mi espalda y dándome un beso tierno en la frente –  ¡Sonríe! Nadie merece tus lágrimas.– dijo con media sonrisa. 

Traté de sonreír pero salió más una mueca que una sonrisa. pero no duro mucho. Mi madre apareció a nuestro lado.

-   Vamos – dijo suavemente mientras me agarraba del brazo para ingresar a casa.

-  LARGO DE AQUÍ – Gritó mi tío a Hobbs cuando me vio mal, ya que a él no le gustaba verme llorar.

Me alejé de mi madre para dirigirme hacia Elena ya que al parecer no escuchó el grito de mi tío Dom.

- ¿Acaso no escuchaste? - pregunté seria. Al ver que ni se inmutaron, me enojé más. - LARGO DE MI CASA MALDITA PERRA – grité haciendo que ella se sobresaltará al igual que Harry y se dieran cuenta de mi presencia. 

-  Adiós Harry, nos vemos pronto. – dijo acercándose a él para besarle.

Pero mi patada en su abdomen fue mucho más rápida que su intento de acercarse a Styles y cayó al piso tosiendo.

- ¿Qué demonios? –dijo Harry frunciendo el ceño.

- Lo mismo me pregunté cuando se estaban besando, pedazo de idiota. Ni se te ocurra entablar conversación conmigo ni acercarte. Mantente lejos de mí lo más que puedas Styles. – dije mientras clavaba mi dedo índice en su pecho.

Me giré dispuesta a irme pero su agarre en mi brazo izquierdo me lo impidió.

 -  ____ 

- CIERRA LA MALDITA BOCA. –grité.

Me solté bruscamente de su agarre y caminé a paso seguro para adentrarme en la casa. Nadie debía verme mal y ahora más que nunca.

Ya en mi habitación, agarré bruscamente un toalla y me adentré a bañarme. Al estar bajo el agua sentía mi labio inferior y mi ceja izquierda palpitar.

Luego de salir, me cambié y me inspeccioné en el espejo. Tenía la ceja un poquito abierta pero no era nada que no se podía curar, el labio inferior con un corte, de mi nariz salía sangre y la parte de debajo de mi ojo un poco violeta.

- Demonios. - gruñí.

Suspiré fuertemente. Salí del baño dando un portazo y tirándome en la cama mirando el techo en silencio. Hasta que alguien tocó mi puerta.

-  ¿Quién es? y  ¿Qué quieres? - No estaba de humor para hablar con nadie en este momento.

-  Soy tu padre y vengo a curarte tu hermosa carita - respondió con imitando la voz de un ogro.

- Pasa -  dije sentándome en la cama y sonriendo.

- Así te quiero ver, sonriendo – dijo con una sonrisa en su rostro mientras cerraba la puerta detrás de él y se sentaba a un lado mío en la cama.

- Con respecto a lo que paso hoy- dije como nena chiquita -  lo lamento –  agaché mi cabeza, mirando la sábanas.

- No hay problema, si es por la pelea que tuvimos todos con todos, ya es costumbre. Pero si es con respecto a ese chico - con su mano agarró mi rostro para hacer que lo mirara - Ambos se quieren de eso estoy seguro y como padre tengo que aceptar que mi hijita está creciendo y tiene que pasar por todas estas cosas – dijo acariciando mi mejilla. Yo le sonreí y él igual – pero tampoco voy a dejar que sufras y voy a estar para ti en todo momento. Te amo hija - me abrazó y le respondí de la misma manera- Y a partir de ahora vuelves llorando por algo que él hizo y ya me encargo en seguida- – dijo con su rostro neutro.