Un amor diferente #Wattys2016

Capitulo 11

BY JESS:

El instituto me había dejado bastante apenada... Recién íbamos dos días nada más, y ya quería dejar de ir...

Ayer, el primer día había pasado toda la última hora sentada junto a un muchacho al que pensé que le caía bien, que me ponía nerviosa y me sacaba sonrisas solo con estar cerca... Y hoy, martes, había pasado todo el día, tratando de hablarle a Stefan, sin que el pareciera importarle

que estuviera a su lado... Me rebané los sesos, pensando porque tenía un cambio de actitud tan repentino con respecto a mi persona. La noche del sábado habíamos hablado sin parar, como dos viejos conocidos que se reencuentran después de mucho tiempo... Y ahora, parecía que lo único que quería era estar alejado de mí...

- Estúpido bipolar... - masculle suavemente. Al menos estaba sola y nadie me oía.

Thaly estaba por ahí, dando vueltas por la casa, y Liz, se había encerrado en su habitación. Desde que volvió de su paseo ayer, para lo único que salió fue para comer y para ir al instituto; no sé que le paso, pero tampoco quiere decírnoslo...

Nuevamente, me encontraba sentada sola en la sala, con un libro al cual no le prestaba atención, pero que me servía de excusa para que nadie me moleste... Cansada ya, deje el libro que pretendía leer devuelta en su lugar... La biblioteca era espectacular, desde el techo hasta el suelo cubierto de libros, un sueño para cualquier lector. Tenía un ventanal gigante, que daba al jardín, y de donde se podía observar toda la naturaleza que nos rodeaba.

Me tome unos minutos para mirar todo... los árboles, los pájaros que se posaban distraídos por doquier, las flores... En una esquina alejada, localice unos hermosos arbustos minados de jazmines, y como son mis flores preferidas, pensé que sería una buena idea buscar unos para ponerlos en mi cuarto. Revise en los cajones de la cocina, hasta encontrar una tijera enorme, con la que podría cortarlos con facilidad.

El día estaba hermoso, y el sol brillaba, calentando mi piel. Camine lentamente, respirando con suavidad, tratando de olvidar todos los problemas. No tenía donde apoyar las flores que cortaba, por lo que las fui dejando en el suelo, una a una. Después de cortar un buen ramo, no sé bien cuál fue la razón por la que levante la mirada, pero allí lo vi. Del otro lado de la medianera, se encontraba Stefan, sentado en un banco antiguo, escribiendo en... ¿un diario? Me pareció una actividad un tanto extraña para un muchacho de mi edad, pero estaba bastante segura de que era un diario.

Por mas de que tratara de cambiar de tema, mi mente seguía pensando en él... Era muy extraño como me hacia sentir, teniendo en cuenta que apenas lo conocía. Me quede absorta, mirándolo escribir quien sabe que, parecía muy concentrado, pero cada tanto se frenaba, y miraba perdidamente hacia el horizonte...

- ¿Cómo puede ser que seas tan hermoso? - susurré. Pese a que el sonido que salió de mi boca, fue extremadamente suave, él me miró fijamente después de que dije esto, clavando sus bellos ojos en mí, dejándome atrapada.

Otra vez, todos esos extraños sentimientos se apoderaron de mí, haciéndome sentir como una chiquilla tonta que se enamora por primera vez. Mi corazón se acelero cuando lo vi levantarse y dirigirse hacia donde me encontraba. Tratando de hacerme la desinteresada, me obligue a seguir cortando flores, como si nada hubiera pasado.

Tomándolas rápidamente por el tallo, y cortando mas rápido aún, no me percate de que en las flores había varias abejas, hasta que una voló prácticamente rozando mi mejilla. Arroje las flores que tenía en la mano, junto con la tijera, en mi afán de alejarme de esos detestables insectos. Cubriéndome el rostro con las manos, no vi donde ponía mis pies, y termine desparramada en el suelo. Ya me encontraba bastante lejos de los bichos, cuando finalmente me anime a espiar por entre mis dedos... Pero quien se encontraba muy cerca, era Stefan, que había saltado la tapia para auxiliarme. Lo que me hizo cubrirme aun más el rostro, pero esta vez por vergüenza, en vez de temor.