Alex (Serie Love 05)

El tatuaje

Clarise

Al principio me asustó que él no respondiese al beso.
Me arriesgué mucho al dar ese paso pero llevaba mucho tiempo esperando por él.
Jack ha sido mi mayor secreto. Bueno mis sentimientos hacia él.

Conocí a Jack Sullivan el primer día de instituto.
Se sentaba a mi lado en clase.
Yo estaba tan nerviosa porque nos dijeron que haríamos una prueba para comprobar nuestros conocimientos.
Tuve tan mala suerte que mi estuche cayó al suelo, desperdigando mi bolígrafos.
-Dios... Que mala suerte.
Desesperada porque estaba totalmente prohibido levantarse, empecé a temer que no pudiese hacer la prueba.
-No te preocupes, piccola. Ten.
Me vuelvo hacia la voz y me quedo sin aire por primera vez en mi vida.
Balbuceo mientras tiendo la mano para coger un bolígrafo.
La mano me tiembla al sentir su roce.
-Gracias.
-En cualquier momento.- me guiña un ojo y se centra en las hojas que tiene frente a él.

Todavía recuerdo su sonrisa de entonces.
Tal vez fue ahí cuando me enamoré de él, o una hora después cuando dijo que podía quedarme con el bolígrafo.

A partir de ese momento, siempre trataba de sentarme cerca de él.
Con el tiempo nos hicimos amigos, muy buenos amigos.
Nos volvimos inseparables.
Y mis sentimientos crecieron con cada momento que compartíamos.

El problema llegó el último año de instituto.
Un alumno nuevo, muy atractivo, se fijó en mi.
Jack empezó a distanciarse, lo que me llevó a mi a los brazos de Giulio.
Giulio me trataba bien, me hacia reír y me llevó al baile de fin de curso.
Giulio también me dejó embarazada y mi vida cambió del todo.

Suspiro aliviada cuando Jack empieza a devolverme el beso.
Me encuentro de pronto entre sus brazos, rodeando su cintura con mis piernas y él me levanta como si yo no pesase absolutamente nada.
-Joder, Clarissa- murmura contra mis labios- Abre la boca. Déjame entrar.
Obedezco inmediatamente y su lengua invade mi boca haciéndome gemir.
El sonido del ascensor al llegar a su destino, nos interrumpe.
-¿Que estamos haciendo,Clarissa?
No se ha separado de mi, aunque mis pies ya tocan el suelo.
-Tenia que hacerlo. Tenia que saber si...
-¿Si, qué?
-Si aun sentía algo por ti.
-¿Por mi? ¿Sentias algo por mi?
Asiento y me guardo el echo de que eso no ha cambiado y posiblemente nunca cambie.
-Ven.-coge mi mano y me arrastra por el pasillo hasta una habitación vacía.
Entramos y cierra la puerta.
Me apoyo en la cama mientras él se quita la bata, seguidamente la camisa y la camiseta por último.
-¿Que estas... Que haces?
-Mirame. Mira mi brazo.
Me acerco y veo un tatuaje en él.
Una paloma junto a un corazón.
Una paloma...
Mi corazón se acelera y le miro con los ojos anegados en lágrimas.
Palabras suyas de hace años vuelven a mi de golpe.
-Clarissa, mi colomba (paloma). Llegarás lejos. Volarás alto y te alejarás un día.

-¿Por qué?-le pregunto asombrada aun.
-Porque te amaba y yo tenia razón. Volaste lejos y te alejaste. Lo único distinto, es que te llevaste mi corazón contigo.