Bullshit con B de BoyxBoy

Crack

Sumario: Harry estudia artes plásticas y para su evaluación tiene que hacer un dibujo de alguien desnudo; y es cuando conoce al chico de ojos azules.

Advertencias: Contenido explícito y uso de drogas. Este es mi primer OS en en el que hablo explícitamente de las drogas como si no fueran algo totalmente malo (por eso la imagen). Quiero aclarar que no estoy ni a favor ni el contra de éstas, son las personas las que deciden usarlas y las que deciden (en algunos casos) dejarlas. Esto influye mucho en este OS, así que si te molesta el tema o eres sensible, se recomienda que no sigas leyendo.

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—¿Queda claro lo que tienen que hacer? —preguntó el profesor de dibujo. Todos asintieron, algunos más convencidos que otros. En realidad no era una tarea difícil; durante todo el semestre había estado haciendo bocetos de desnudos y ya hasta comenzaba a acostumbrase. Había aprendido que el cuerpo en sí era arte de la forma en que se viera, pero explícale eso a alguien más para convencerlo a que se desnude y tú lo dibujes.

Mientras salía del salón de clases, Zayn, su amigo desde que egresó a la universidad, ya comenzaba a hacerle varias preguntas. "¿Ya tienes pensado a quién?" "¿Crees que Liam me quiera ayudar en esto?" "¿Cuánto cobrará cualquier persona?" eran algunas de las que logró captar.

Propiamente dibujo de desnudos no era algo que gozara mucho, quizá era porque las modelos eran aburridas, o porque los modelos eran demasiado perfectos como para creer que lo hicieran para contribuir con los estudios de los próximos artistas. De igual forma, había escogido artes plásticas y no derecho, donde te enseñan que desnudarte en público no es algo ilegal. Soltó el aire pesadamente.

—No tengo ni idea de a quién pedirle ayuda —respondió, yendo hacia la salida. Volteó a ver a su amigo. Él prácticamente era un dios griego pero estaba prohibido dibujarse entre sí...— Zayn, ¿no quieres ser mi modelo?

El nombrado soltó una carcajada.

—Eso es casi un halago, Hazza. Pero ya escuchaste que no podemos hacerlo.

Harry asintió. Realmente necesitaba encontrar a alguien antes de la próxima semana.

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Louis entró al supermercado donde pasaba cuatro horas trabajando arreglando productos, acomodándolos en sus lugares correctos; era entretenido buscar el lugar exacto para cada cosa, especialmente porque no era algo tan laborioso. No era por decir que le gustaban los trabajos sencillos, pero lo hacían, por eso en las tardes trabajaba manejando una ambulancia. Era un trabajo fácil y que le dejaba dinero suficiente como para mantenerse él solo.

—¿Te falta mucho? —preguntó alguien a sus espaldas, sacándolo de sus pensamientos. Volteó hacia atrás y vio a Liam, el gerente. Louis negó, sonriendo.

—Ya estaba por terminar —comentó, mirando embelesado a Liam. Aún recuerda cuando llegó a este lugar pidiendo trabajo y el que lo aceptó fue él; y jura que jamás vio sonrisa tan linda y ojos tan brillosos como los que tiene Liam.

—Qué bien —dijo sonrojándose—. ¿Cuando termines puedes acomodar las galletas? Algún niño las dejó por todos lados.

El ojiazul asintió. Diez minutos más y estaba recogiendo paquetes de galletas, acomodándolos hasta bajo del estante.

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Harry había entrado al supermercado buscando agua oxigenada para Gemma que estudiaba medicina. Caminó por varios pasillos, dándose su tiempo para ver algunas cosas que podría comprar para comer. Pasó al pasillo de las galletas y dulces, y lo único que vio fue un hermoso y bien formado trasero que estaba en cunclillas. Nunca antes había estado más emocionado por dibujar a alguien desnudo. Se acercó con cuidado y cuando estuvo cerca, aclaró la voz y dijo suavemente: