-Pues como sabéis, mañana es el día. Que nadie llegue tarde.
-Si señora.- Respondemos al unísono.
Tras cerrar el local, y despedirnos, Marina me lleva de nuevo a casa. Me deja en la puerta, y como siempre, saludo a Ernesto, y cojo el ascensor hasta mi casa.
Alicia no está, es un poco raro, habrá quedado con alguna amiga, para tomar algo, supongo.
Me hago la cena, y leo un par de páginas del libro que compré hace un par de semanas. Es el primer libro del mítico detective Sherlock Holmes, pero en edición coleccionista, me los leí hace varios años, en la biblioteca de mi pueblo. Ahora los estoy comprando cada mes, en una página web, que los comercializa en edición coleccionista. Eso si, con un precio muy superior a los normales.
* * *
-Ves, se está bajando del coche de Marina.
-Si, si yo te creo, pero no creo que debas llamarme a las diez de la noche, por Skype, para enseñarme que tu novio se baja de un coche parecido al de Marina. Puede que sea amigo de Fer, y este lo lleve con su pandilla. Además, me estoy quedando sin megas.
-Es que no se lo que pensar. Bueno, está subiendo, me voy.
Salgo de mi casa, y bajo por las escaleras, mientras el, sube por el ascensor.
* * *
El timbre suena. Puede que sea Alicia.
-Sí, voy. Un momento que me vista.- Abro la puerta.
-Hola señor Daniel.
-Hola, don Ernesto, ¿que ha pasado?
-Una chica llamada Marina, pasó esta mañana y me dijo que si no bajaba sobre las once, que subiera a despertarle.
-Oh, muchas gracias. Espere un momento.- Saco un billete de mi cartera-. Gracias por el aviso.
-Siempre es un placer.- Dice, para luego retomar su tarea.
Mierda. Cierro la puerta deprisa, y me visto rápidamente, mientras despierto a Alicia, y preparo el desayuno.
A las once y media, me encuentro bajando por el ascensor, mientras escribo mensajes por el grupo, para ver si alguien me recoge.
Fer, actual novio de Marina, el cual se encuentra por la zona, se ofrece a recogerme.
Al llegar, me encuentro con que solo Fer y yo estamos aquí, así que entramos y nos tomamos unas cervezas, mientras esperamos.
A las doce, comienza a llegar la gente. Raúl, el cual trae una furgoneta con el equipo de música, me ayuda a montarlo. Si, sé montar equipos de música, tenía un pasado antes de que me conocierais.
Alguien nos avisa de que Alicia está aparcando, muy cerca de aquí, así que salgo del local, y cierro con llave, mientras los otros se esconden dentro.
Alicia aparece varios minutos después, al fondo de la calle.
-Hola.- Digo.
-Hola, ¿que haces aquí?
-Esperándote.- Digo, en tono misterioso.
-¿Esperándome?
-Tengo que hablar contigo. Llevo toda la semana ocupado, saliendo temprano, y regresando muy tarde, y no te he dado explicaciones.
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Mi vida como estudiante
Teen FictionPues si, como muchos estudiantes, mis intereses difieren de los de mis progenitores, y por eso, y gracias a la ayuda de un pariente, me mudo a otra ciudad para poder estudiar lo que realmente me interesa.