Diègue íba en su carruaje rumbo a la casa de su padre, pero su mente estaba con ella, con Emerauld.
Se habia dado cuenta del interés de Claude por su dinero pero eso no le importó en lo mas mínimo, pues solo le interesaba casarse con su hermosa Emerauld.
De camino íba pensando a qué lugar la podría invitar el día de mañana.
El carruaje paró y Diègue bajó y se dirigió a la entrada, estaba ansioso por contarle a su padre y así lo liberaría de la angustia de tener que buscarle esposa a su hijo.
Pero al parecer había llegado demasiado tarde.
Pasó en frente de la sala del té y notó la presencia de algunas visitas.
Se acercó con pasó inseguro pues no conocía a ninguno de los presentes.
Los escuchó reir y antes que entrara Agnès lo detuvo. -No entres ahí- Le dijo muy asustada.
¿Por qué no Agnès? ¿Qué pasa? ¿Quién está ahí?
- Es el Duque de Estrasburgo Jacques Bouffard. Por una extraña razón se enteró de la enfermedad de nuestro padre y a venido dispuesto a casar a alguno de sus hijos con nosotros. Mamá ha estado hablando con él tratando de hacerlo entender que ninguno de sus hijos esta preparado para el matrimonio y menos yo que solo tengo 16 años-.
- ¿Pero ha venido solo?-
-No, a traído a toda su familia consigo,su esposa Céline, su hijo Sébastien que por cierto es bastante feito y a sus dos hijas Lorraine y Monique que se parecen mucho a su hermano jajaja- Agnès no evitó la risa.
Diègue se asomó para ver a las hijas del Duque y efectivamente eran bastante feas ni se comparaban a su hermosa Emerauld. También rió junto a su hermana y decidieron esconderse en el jardín.
Ambos reían de la situación tan incómoda que debería estar pasando su madre y decidieron ir a ayudarla.
Agnès y Diègue entraron en la salita tomados del brazo e hicieron una reverencia y prosiguieron a sentarse a un lado de su madre.
Annette presentó a sus dos hijos los cuales permanecieron sentados sin dar una muestra de respeto. Ambos querían pasar como irrespetuosos para que el Duque no los considerara a la hora de elegir esposos para sus hijos.
Pero al parecer al Duque no le importó. Y sin lugar a cordialidades ofreció a sus hijos como si fueran una mercancía.
Comenzó a decir - Este es mi único hijo varón Sébastien quien heredará mi título y se convertirá en el futuro Duque de Estrasburgo. Y actualmente es uno de los jóvenes mas cotizados por las familias nobles-. Y antes de que continuara ofreciendo a sus hijas Agnès lo interrumpió diciendo - Monseur Bouffard lamento interferir pero quisiera añadir algo, su hijo puede ser su heredero pero no quita el hecho de que su fisionomía no es atractiva para algunas damas, en especial para mi-.
Diègue no soportó mas y tratando de esconder su risa con su mano se levantó en dirección de la ventana.
Annette disimuló muy bien su risa al ver como se descomponía la cara del Duque.
Toda la familia se paró indignada ante tal comentario.
El Duque exclamó furioso- ¡Debería enseñarle un poco de educación a sus hijos!-
A lo que Annette respondió parandose altiva frente al Duque - Pues si no le gustan mis hijos nadie lo tiene obligado aquí así que puede irse con su familia cuando guste-.
El Duque desapareció en un santiamén debido a la verguenza que habían pasado.
Todo el mundo hablaba de los hijos del Duque de Estrasburgo, se decía que no eran sus hijos pues el Duque era bastante bien parecido y los jóvenes se parecían mas bien al mayordomo de la casa. Pero el Duque disimulaba muy bien ante tales comentarios pues sabía que no podían ser sus hijos, se pensaba que el Duque era estéril.
Pero en realidad lo que pasaba es que el Duque odiaba a su mujer por haberse casado obligado y amaba a otra mujer con la cual si queria llegar hasta el matrimonio. Nunca tocó a su mujer por el asco que ésta le causaba. Era una mujer horrorosa y el Duque un hombre muy guapo.
La despreciaba y ella a él por lo que lo engañaba con el primer hombre que tenía oportunidad.
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Amor a la Francesa
RomansaFrancia. A nadie parecia importarle que las uniones en aquella época fueran por amor, sino por cuantos francos venían con el novio o su familia. Pero Diègue no estaba dispuesto a ser uno más de la larga lista de los novios casados por conveniencia...