Amigos.

19 3 0
                                    

Era un sábado, "Sábado de me quedo en casa a dormir".
Pero tuvo que llegar Jorge y estuvimos hablando hasta que sacó el tema de "Una Salida"
-Debes salir a divertirte amigo.
-Me divierto en mi casa.
-¡Listo! Le diré a Lily y a su amiga que vayamos a algún lado.
-Yo no iré. -me negué, no quería ir, seguro haría el ridículo o capaz con mi aburrimiento arruine todo.
-No seas agua fiesta, iremos todos y nos divertiremos como nunca, iremos a la tarde. -sentenció.
No me quedaba de otra, me dejó ir a cambiarme y ponerme ropa más cómoda. Mientras me ponía un short de jeans planeaba escaparme por la ventana.
-¡Pareces un chica! ¡Tardas mucho! -me gritó Jorge desde la sala. -Voy a comer todas tus galletas...
Sinceramente no me importaba.
Cundo baje estaba comiendo en la mesa haciendo mucha miga, era muy desordenado, estaba por echarlo de casa...
-Vamonos.
Salimos y fuimos hasta un parque y ahí estaba ella, estaba con su guitarra y Mar la acompaña cantando.
Al vernos pararon.
-¡Hola chicos! -saludó Mar.
-¡Hola! -Lily.
-Hola...
-¿Qué hacen? -preguntó Jorge.
-¿Qué no es obvio? -preguntó Mar riendo.
Y todos reímos.
Ellos tocaron un rato y yo solo observaba el show gratis que estaba recibiendo.
-Vamos a tomar helado. -propuso Jorge.
-Vamos al lago. -dijo Lily con entusiasmo.
-¡Sii al lago! -exclamó Mar.
Yo, sinceramente no sabía dónde era "El lago".
Y partimos para allá.
Lily iba al frente y en su espalda llevaba su guitarra como una mochila.
-Ya estamos llegando...
-Eso me lo vienes diciendo hace rato Jorge. -Ya estaba cansado.
-¡Llegamos! -gritó Lily.
-Era hora... -solté con un tono malhumorado. Pero se me cambio el humor al ver ese hermoso lugar: era muy lindo, el pasto era tan verde que parecía artificial de esos que venden en las tiendas.
El agua, bueno, no era Cristina cómo la que vemos en las series o películas, no. El agua era de un tono verde oscuro y estaba muy quieta casi sin corriente. Parecía tan tranquila, transmitía una sensación de "Déjate llevar" creo que si no fuera por la risa de Lily, los gritos de Mar y las bromas de Jorge me dormiría con tanta paz. Pero... ¿Paz con ellos cerca? No, nunca, JAMÁS y ojo no del mal sentido, ellos eran mis amigos. Mueven mi mundo y no lo dejan tranquilo mientra están en el. Pero del buen sentido, creo que sin ellos mi vida sería bastante aburrida, más de lo habitual.
-¡Quiero lanzarme al lago! -escuche el grito de Jorge que terminó deshaciendo mis locos pensamientos que me llevaban hasta volar por las nubes.
-Yo también. -Esta vez hablo Lily. -Es tan hermoso... -lo dijo con una voz tan tierna que me dio ganas de mirarla como cuando miras a un bebé.
-Yo prefiero quedarme aquí. -los interrumpí. Si, si sabía nadar pero... No quería arriesgarme.
Cuando me di cuenta ya estaba volando directamente al agua con una mano que me arrastraba hacía allá.
¡Jorge!
Salí a tomar aire ya que me tomó tan de sorpresa que no pude almacenar ni un poco de oxígeno para mis pulmones.
-Eres... Un... Tonto. -un respiro entre cada palabra. Creo que me tragué medio lago.
Jorge estalló de risas, sin importarle lo más mínimo mi condición.
Vi a alguien saltar por encima de mi y al caer me salpicó agua. Fue Lily, que me sobresalto solo un poco...
-¡Ven Mar! -gritó Jorge pero ella solo lo miro y movió la cabeza en gesto de "No".
Al salir como pude me acomode a un par de metros de Mar y quedamos hablando de: ¿De quién será esta propiedad? ¿Cómo cuida tanto? Y cosas relacionadas con ese hermoso sitio mientras que Lily y Jorge jugaban en el agua y hablaban de lo que hacían de pequeños.
Cuando salieron nos pusimos en el sol para que nuestra ropa se seque mientras hablamos y reimos de cosas que sin importancia, estábamos agotados.
Nos quedamos acostados boca arriba mirando el cielo y como los pájaros volaban libres, sin preocupación, sin obligaciones, sin nada, me gustaría ser un pájaro, si, sin duda alguna me gustaría ser un pájaro.
Se estaba haciendo tarde y tenía que volver a casa. No, no quería. Era tan lindo estar con ellos, me sentía a gusto. Era como si con ellos era yo, yo sin miedo a ser yo, sin miedo a que me lleguen a juzgar. Ellos eran mis amigos. Los que siempre quise y nunca tuve "Lo bueno tarda en llegar".

Ella Era Como Su Guitarra.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora