Si el amor duele, ¿por qué decidí amarte?

Epílogo.

Acababa de llegar junto a su mejor amigo a la casa de éste y las risas no se demoraron en aparecer desde la sala de estar, no necesitó siquiera en esforzarse para saber de quienes se trataban porque podía verlos desde su posición; ahí estaba el hijo menor del señor Kim, a horcajadas sobre el chico que podía reconocerlo como su novio. Se besaban como si no hubiese nadie más en la casa, tal vez no contaban con su presencia ya que ellos recién habían llegado, pero estaba la servidumbre e incluso podían llegar en cualquier momento los señores Kim.

Su mirada no se apartó de la pareja sobre el sofá, aun cuando parecía que ellos pasarían de nivel en cualquier momento en ese mismo lugar, ya que las manos del novio del menor de los Kim, se paseaban por su trasero con tal descaro que si el papá de este lo viera no lo consideraría el novio perfecto para su hijo.

Te besas así con otros cuando estás enamorado de mí, no quiero imaginarme como sería si yo fuera el que estuviera ahí.

—¡Tae Min! —gritó su mejor amigo.

Pero la diversión no le duró demasiado a la pareja del sofá, ya que el hermano del menor de ellos decidió interrumpirlos antes de que tuvieran todo un espectáculo en la sala de estar.

Observó como la pareja se separó de inmediato un poco asustados, pero el rostro de Tae Min se endureció en cuanto se paró y vio que se trataba de su medio hermano, casi escuchándolo bufar cuando este ni siquiera separó sus labios y tomó la mano de su novio para que se levantara del sofá en donde él continuaba sentado.

—Vámonos Chang Seon, ya llegó el aburrido de mi hermano.

La palabra "hermano" fue dicha con desprecio y sarcasmo, ya que quería molestar a Jong Hyun por arruinarle su momento.

—Hola, Min Ho —dijo el menor de los Kim.

El tono que usó al saludarlo al chico fue muy alegre comparado con el que fue para su medio hermano.

Los vio subir las escaleras y dirigirse a la habitación de Tae Min; sacudió su cabeza porque ya se hacía a la idea de lo que sucedería en aquella habitación, porque los dos parecían querer terminar lo que iniciaron en el sofá de la casa.

Dejó de pensar en lo que podía suceder ahí, y siguió a su mejor amigo hasta la recámara de este para realizar el trabajo que tenían, sorprendiéndose un poco por el poco interés que este presentó frente a que su hermano fuera a su habitación con su novio y, que minutos antes parecía que tendría sexo en el sofá sin importarle ser visto.

Ingresaron en la habitación de este y Jong Hyun comenzó a buscar los materiales para su trabajo, mientras él no podía creer ese poco interés de su mejor amigo por su hermano. Sabía de su mala relación, pero si a él le había perturbado la situación, le parecía lógico que Jong Hyun lo estuviera todavía más.

—¿Ni siquiera te molesta saber lo que tu hermano y su noviecito pueden estar haciendo? — inquirió.

—No —lo miró sorprendido ante su respuesta cortante —Tae Min no es un niño, sabe lo que hace, además de que no me interesa lo que él haga con su vida.

Se sentó frente a su escritorio.

—Si lo detuve antes en la sala no era porque no quisiera que continuara, él puede hacer lo que desee, pero no quiero enterarme si tiene sexo o no, y no estoy seguro que a mi padre le guste encontrarse con esa escena; además, a mí me hubiesen regañado si lo hacía, está en su habitación, puede hacer lo que quiera, él no me interesa en lo absoluto.

Min Ho no preguntó más, conocía a la perfección aquella mala relación entre los hermanos Kim, porque sí, a pesar de que Tae Min llevase el apellido Lee, para él era un Kim.