- «¿Por qué Elicchi se habrá puesto tan nerviosa?» -Se preguntaba una y otra vez mientras seguía practicando la coreografía. Eran amigas desde hace un tiempo, no puede ser que se haya puesto nerviosa por esa pequeñez. ¿Será acaso que lo que estaba sospechando desde hace un tiempo era verdad?
No, claro que no, de ninguna manera, Eli Ayase, se enamoraría de ella-.
-Ah. . . Elicchi, necesito un descanso. -Comentó mientras se dirigía a una mesa en la cuál habían unos vasos de agua y algún que otro bocadillo para recuperar energía.
Qué bonito de ella que se tomara la molestia de preparar esto.
Después de unos diez minutos aproximadamente descansado, en la cuál su compañera no le dirigió la palabra, siguieron con la práctica. Hasta que perdió la paciencia y la "confrontó", por así decirlo-.
-¡Elicchi! ¿Por qué no me hablas? ¿Pasa algo?
-Oh, N-Nozomi, no pasa nada, t-tranquila. -Fue lo único que respondió. Esto le hizo sospechar más, y para aclararlas, decidió preguntarle directamente, ya que ella no se iba a quedar con sus dudas-.
-Elicchi, ¿Puedo hacerte una pregunta?
-Claro que puedes.
-Muy bien -Dijo, para después tomar un poco de aire y lanzar la "bomba"-. ¿Te gusto?
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Quería joder un rato, ¿okay?
