12

3.1K 155 2
                                    


TERCER AÑO

HERMIONE

Tuve un verano magnifico, mis padres me llevaron de acampada al Bosque de Dean, era un lugar precioso y especial y lo más curioso es que había una cabaña al lado de un rio, mis padres decidieron comprarla para que podamos pasar todos los veranos allí y desconectar de lo que hay fuera.

Llegue al andén 9 ¾ me despedí de mis padres y me adentre en él, fui directa al tren en busca de un compartimento vacío. Mientras iba caminando un chico choco contra mí, haciéndome caer al suelo, no me podía creer vaya manera de empezar un año en Hogwarts.

Cuando me dispuse a levantarme, vi que una mano estaba extendida delante de mis ojos, puse la mi mano y me levanté, sin dejar de mirarle a los ojos.


Gracias -dije embobada, no me podía creer como me estaba comportando en ese momento, era un chico realmente precioso y tenía unos ojos de color verdoso que más de un suspiro habrán provocado.

Lo lamento mucho, no era mi intención hacerte caer, pero iba corriendo y no mire por donde iba -dijo rascándose el pelo

No, no te preocupes estoy -dije

Me llamo Terry Boot – dijo sonriéndome, mientras yo me estaba ruborizando poco a poco, espero que no lo haya notado.

Yo...yo soy Hermione Granger -dije

Lo sé, compartimos una o dos clases -dijo sonriente

Perdóname por no acordarme de ti...-dije un poco apenada, no me podía creer que no me acordara de él, aunque es verdad que yo no era de esas chicas que se iban fijando en chicos, en el único chico que me fije acabo haciéndome daño.

¿Oye te puedo hacer una pregunta? -dijo

Claro -dije, poniéndome un poco nerviosa

Te gustaría que nos viéramos algún día -dijo poniéndose nervioso y pude ver como sus mejillas se ponían rojas.

Me encantaría -dije también poniéndome algo nerviosa

Bien, ahora si me disculpa señorita, me tengo que ir -dijo mientras se acercaba a mí para darme un beso en la mejilla, para después irse a su compartimento.


Me senté en el mismo compartimento que otros años y me dispuse a leer, hasta que noté como la puerta se abría y alguien entraba, no solo, sino que se sentaba enfrente mía, levanté la vista para poder ver quien era. No me lo podía creer, lo que me faltaba ahora, después de haberle olvidado por completo, tenía que ver esa maldita cara otra vez.


Que te ocurre Granger, has visto un fantasma -dijo a carcajadas

No, he visto algo peor, tu cara Malfoy -dije con una sonrisa burlona, mientras la expresión de su cara cambiaba y se ponía seria

Quien te ha dado permiso para hablarme así, sangre sucia -dijo con un tono muy serio y poniendo una mueca de asco.

Si no te gusta cómo te hablo te puedes largar de aquí, que nadie te ha obligado a sentarte en este compartimento – dije intentando contener las lágrimas, no pensé que me dolería tanto que me llamara así.

El amor lo puede todo || Draco Malfoy Y Hermione GrangerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora