Narra MeiEsta vestido y parece no escuchar nada de lo que digo, como si estuviese dormido, intente despertarlo pero al tocarlo, puedo sentir como su cuerpo comienza a entrar en un temblequeo nervioso, no me mira, puede que este enojado o realmente no tiene fuerzas para emitir aunque sea solo una palabra.
-Rápido, dame una mano para poder llevarlo a dentro-.
-¿Tus padres nunca te dijeron que no metas chicos extraños en casa?-.
- Tu te metes en casa siempre, y a pesar de que te conozco aunque sea un poco, yo tendría mas miedo por ti que por él, rápido, no tiene nada en los pies y ya los tiene morados del frío, puede que este esperando desde temprano-.
-Podemos llevarlo hasta mi departamento si quieres, así no tendrás problemas cuando despierte-.
- Conozco a esta persona- suspiro- lamentablemente, mejor sera que pase la noche aquí, se asustará mucho si se despierta en un lugar desconocido, además, lo preferible seria no moverlo tanto, si tiene algo peor que hipotermia, no sabría como tratarlo-.
-Esta bien, pero quiero ir a esa cafetería y no pienso ir solo, podemos dejárselo a Carla, no te preocupes, estará mejor-.
Cami dejo de temblar, ya ni se movía, ante ese cambio repentino acerque mis dedos a su nariz queriendo saber si aun respiraba solo para confirmar que solo su corazón latía cada vez mas lento.
-¡Ayudame a meter a Cami dentro de la casa ahora!-.
Sin agregar nada más a la conversación, Lucían me ayudó a cargarlo hasta el sillón del living.
-¿Así que te la pasaras cuidando a este tipo?-.
-Carla esta durmiendo en este momento así que yo me encargare de él como pueda-.
-Suficiente, me voy-.
Se levanto y se fue, no parecía furioso, fue mas un berrinche según mi opinión, mas no se olvido de azotar la puerta al final, me gustaría creer que eso no fue una escena de celos, porque de ser así, esta muy equivocado si piensa manejar mí tiempo a su antojo. De todas formas, Cami volvió a temblar como estúpido al cabo de unos segundos, abrió un ojo y susurro.
-¿Ya se fue?-.
-Seras actor maldito hijo de....-.
-Es que no dejaba de insistir para que no me ayudaras y tenía miedo de que no me abrieras la puerta-.
-No era necesario, igual gracias a tu actuación me salvaste de tener que salir a una cafetería con lo lindo que esta aquí adentro, hace frío por si no te diste cuenta,....en todo caso, solo por esa razón puedes dormir aquí esta noche, seria mucho esfuerzo echarte-.
-Perdoname Meilin, no quiero ser un problema, podre extrañar tu compañía, pero lo único que quería era saber si estabas bien-.
-Parece que aun no perdiste ese toque de sin vergüenza que acostumbrabas tener, maldita vieja, aun tiene las ganas para seguir con ese trabajo de mierda, no te preocupes Cami, mas allá de mi odio y lo mucho que me falta para comprenderte, me gustaría que pases la noche aquí-.
Narración normal
Ambos quedaron en silencio, mirándose fijamente, como si lo de Meilin fuese más una orden que un pedido y la modestia de Cami una farsa, ambos sabían sus intenciones, pero disimular una educada conversación es lo mejor, es lo normal.
Cansada de tanta cortesía, ella cierra sus ojos, tomándose la cabeza con ambas manos, seguido por un notable suspiro en señal de un agotamiento inexistente.
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Enséñame a vivir
Teen FictionLa vida de Mei se ve interrumpida por la llegada de Cami, un ángel caído que busca remendar sus errores para así recuperar su lugar en el cielo. Ella lo ayudara a hacerse pasar como una persona común y corriente, enseñándole a vivir como un humano. ...