Lo que vive un corazón adueñado (Saga Gaia's Tales I)

Capítulo XXXII

Holaaa, antes de nada disculparme por la tardanza. Lo siento mucho de verdad. Espero que no os haya molestado mucho.

No tengo mucho que decir así que...

La dedicatoria va a SONIMOON

JESSY_218

DANICLACE

I_LOVE_DIVERGENT_FAN

CRIKURI

ANGELAZARELYTOVARVAL

Gracias a todos por los votos y los comentarios. Os lo agradezco de corazón.

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*Naruto*

Un año. Llevaba viviendo aquí un año y en todo este tiempo no me he contactado con nadie de Astapor, no es como que ellos no intentaran hablar conmigo cada vez que llamaban, lo intentaban e insistían, pero yo no quería saber nada de ninguno de ellos, de ninguno excepto de Sasuke, el único de entre todos ellos que no había dado señales de vida.

Durante este largo tiempo en el que no había podido conciliar el sueño y en el que tuve que empezar a ver un psicólogo para que me ayudara a superar lo que había pasado me había dado cuenta de una cosa que era tan injusta que me daban ganas de gritar de frustración.

Y es que a pesar de todo lo que había pasado, a pesar de todo lo que me había hecho, las mentiras que me había contado... ingenuamente seguía enamorado de Sasuke, él seguía siendo el amor de mi vida.

Había pasado un año y no había podido arrancar de mi corazón a Sasuke.

Vivía una vida monótona y rutinaria. Al levantarme lo primero que hacía era verme al espejo, luego me preparaba para ir al nuevo instituto al que me había matriculado Jiraiya.

Allí no tenía amigos, de hecho, no me llevaba bien con ninguno de mis compañeros. La única persona con la que hablaba era un alumno de último año llamado Neji.

Al principio no había querido hablar con él, pero no importaba cuántas veces le ignoraba él siempre volvía a intentar iniciar una conversación conmigo, al final terminé por rendirme y comencé a hablar con él en los recesos de las clases. Neji era un chico raro, no hablaba con mucha gente y tenía un comportamiento arrogante y engreído, me hacía recordar a Sasuke. Una de las mayores razones por las cuales no había querido estar en su presencia era por el enorme parecido que tenía con mi primer amor. Su forma de ser era tan parecida a la de Sasuke que había veces en las que llegaba a confundirme.

Ya no era la misma persona que antes, había cambiado considerablemente y Jiraiya me lo repetía siempre que me llamaba y hablábamos un tiempo. Cuando sus vacaciones se habían acabado había tenido que volver a viajar para poder seguir con su trabajo, se despidió de mí por teléfono en una llamada que duró más de dos horas.

Había sido bastante fácil acostumbrarme a mi nuevo hogar, de todos modos, todo me daba igual, ya nada importaba.

Miré de nuevo por la ventana de la clase de biología al mismo tiempo que la profesora dejaba de explicar para anunciar el final de la clase.

Me levanté con pesadez de la silla y cogí mi mochila, quería irme a mi casa de una vez por todas, no me gustaba estar aquí por nada del mundo.

Pasé al lado de todos mis compañeros sin hacer caso a nadie y me fui.