Baby... it's you [McLennon - Starrison]

3: A taste of honey

4 meses antes...

9 y 10 de Octubre de 1961
Narra Paul:

Descontrol.

Es la única manera en la que puedo definir todo lo que pasó.

Creo que le di a John un buen regalo de cumpleaños.

Durante el día solo nos dedicamos a festejar tranquilos. Lo desperté saltando en la cama y cantando el feliz cumpleaños. Desayunamos y almorzamos tranquilamente. Llegó la noche y comenzó la fiesta.

Logré conseguir unas pastillas de éxtasis como las que tomábamos en Hamburgo. Simplemente fuimos a una discoteca. Los franceses si que saben alocarse.

Bebimos mucho, besamos chicas, bailamos y nos emborrachamos. Sobre todo John. En un momento se le derramó un poco de cerveza en la camisa haciendo que esta se pegara mas a su cuerpo. No podía dejar de verlo. Tenía unas ganas terribles de arrastrarlo hasta un rincón y recorrer ese cuerpo bien formado. No sabía si todo esto era efecto de las pastillas, pero ya sentía como los pantalones me empezaban a apretar, así que decidí apartar la mirada. Tarde. El de dio cuenta de que lo observaba.

—¡¿Te gusta lo que ves Paulie?!—preguntó picaramente.

No pude evitar sonrojarme—Cállate Lennon.

Ya eran las 03.30 de la mañana. Su cumpleaños obviamente ya había terminado hacía unas horas pero nosotros seguíamos ahí, bailando y bebiendo. En un momento no aguante mas y fui al baño. Pero John me siguió.

—*Hip* Paulie... *hip*

—¿Que haces aquí John? Déjame orinar tranquilo. Estoy muerto.

Me tomó de la muñeca antes de que pueda entrar al cubículo.

—Paul...

—John, estas muy ebrio. ¿No quieres volver al hotel?

—Quiero hacer algo antes...—su voz era profunda.

—¿Que sucede John?

Y sucedió.

Me empujó contra la pared.

Nuestras miradas se sostuvieron por unos segundos. A pesar de todo en sus ojos no había ebriedad. Habia...¿amor? ¿lujuria?

No lo sabía. Pero en ese momento no podía pensar con claridad. El alcohol, las pastillas y tener a John tan cerca mio... todo se mezclaba en mi cabeza. Estaba muy confundido.

Sus labios...

Se pegaron a los míos.

Al principio solo era un roce. Sus labios eran tan suaves. Tenían un sabor a miel.

Hasta que fue tomando intensidad. Metió su lengua en mi boca. Ya no tenía control de mi mismo. Recorríamos la boca del otro con la lengua. El me pegaba mas a su cuerpo y yo enredaba mis dedos en su cabello. Levanté una pierna para juntar nuestros bultos. Gemimos, dejándonos llevar por el deseo.

Fue el beso mas salvaje e intenso que había dado.

Pero... algo en mi cerebro me gritaba. Algo me decía que parara. Esto no estaba bien, ambos somos dos hombres. Yo tenía novia y la quería a pesar de todo. Y John tenía la suya. A demás, esto era pura lujuria. John jamás sentiría lo que yo sentía por el... Lo empujé.

—Paul...

—John...

Nos quedamos mirando respirando muy agitados. Estaba tan confundido. Besar a John era algo que quería hace mucho. Pero pensar que eso solo había sido un acto de ebriedad me hacía sentir mal.