Baby... it's you [McLennon - Starrison]

12: Honey Pie

Narra George:

Todo se volvió negro y me desperté sobresaltado en el suelo de la casa de Ringo.

Había sido un sueño.

Me pasé las manos por la cara pensando en lo mierda que era soñar que la persona que te encanta te bese.

Busqué a los chicos con la mirada. Vi a Paul envuelto en una frasada en el suelo. Ringo dormía a mi lado. Parecía un ángel. El colchón en el que había dormido John estaba vacío. Ya se había marchado.

Me sonroje enormemente al darme cuenta de que los pantalones me apretaban. Corrí las sabanas aun sabiendo lo que era. Una erección. ¿Que podía hacer?

Contemplé la idea de masturbarse en el baño, pero luego me pareció bastante morboso teniendo en cuenta que se trataba del baño de mi amigo. Tuve que pensar en otra cosa para que se me fuera.

-¿George?

Pegué un saltito en el colchón y me llevé la mano al pecho.

-¡R-Ringo!

El ojiazul me miraba curioso con ojos entrecerrados.-¿Hace cuanto estas despierto?

-U-Unos minutos.-Traté de levantarme para que Ringo no notara mi pequeño incidente.

-Vaya...-dijo despertándose mas.-Veo que tienes un problemita ahí...

¿Acaso era eso sonrojo en su rostro? Porque yo debía estar 10 veces peor.

-Ahm... yo...-no sabía dónde meterme.

-Hey, tranquilo hermano, es normal...¿gustas pasar al baño?

Abrí bien grandes los ojos.-No voy a masturbarme en tu baño.

-Yo no tengo problema.

En eso oímos a Paul reírse.

-George quiere que tu hagas el trabajito, Ringo.

Apreté los puños con fuerza, lo mataría en cuanto tuviese la oportunidad.

Ringo estaba muy sonrojado.

-Yo...mejor me voy-fue lo único que se me ocurrió decir.-Mis padres deben estar preocupados.

Tomé mis cosas y abrí la puerta de la casa.

-George espera...-oí decir a Ringo, pero yo ya estaba cerrando la puerta muerto de la vergüenza.

Necesitaba escapar, correr de todo eso que sentía.

Narra Paul:

-¡Mira lo que hiciste tonto!

Me removí en el colchón aún con mucho sueño. La verdad es que estaba bastante dormido y ni cuenta me daba de lo que decía.

-Perdón, tenía que decirlo-dije.

-Pobre Geo...debe ser muy vergonzoso.

Me senté estirándome y miré a mi amigo. No pudimos evitar reírnos.

-Prometo luego pedirle perdón-dije.-Debo irme Ringo, tengo que hacer las maletas.

-Si...yo también-suspiró.-No puedo creer que nos mudaremos a Londres. Me costará dejar esta ciudad...

-Si a mi también. Pero es una gran oportunidad. Desde hace mucho John y yo tenemos este sueño. Y al fin lo estamos consiguiendo.

Me levanté del colchón y noté que Ringo me estaba mirando.

-Paul...tu y John son muy amigos ¿no?

Me miraba desde el colchón entre dormido y curioso.

-Si... somos mejores amigos desde hace varios años.