Narra Mattew
— ¿Cómo me veo? — la dulce sonrisa de Emma aparece ante mí, vestida de celeste como en la primera cita. — Matt, ¿tan mal estoy?
— ¿Así se supone que los franceses no van a despertar su lado romántico contigo cerca? — levanto una ceja, o al menos eso intento. Emma vuielve a sonreír.
— Y yo soy la celosa...
—Eso se llama amor. — respondo cuando lo rodeo con mis brazos. — Hey, ya es tarde... vámonos.
— Está bien... — se aleja de mi un poco, pero toma mi mano. — vamos.
Salimos de la habitación hacia el restaurante del hotel. En una mesa grande, diviso a Jacke y Jamie, por lo que supongo todos deben estar ahí. efectivamente, en cuanto nos acercamos, veo al director.
— Buenas noches muchachos... llevamos 15 minutos esperándolos.
— Buen día director. Discúlpenos por favor, pero me quedé dormida. — es lo que puede responder mientras sus mejillas se tornan sonrojadas, lo que causa que los chicos empiecen a reírse.
— Sí, pero ya estamos aquí. — trato de que no le den mucha importancia a su excusa.
— Tomen asiento chicos. El desayuno será un especial de la casa. Luego, saldremos juntos a tomar el metro que nos llevará a la Torre Eiffel; supongo que es el primer lugar al que debemos ir.
— Si señor director, apoyo su idea. — respodo de inmediato, y Emma oculta un poco su sonrisa.
Llega el desayuno, todos hablan sobre sus expectativas al quedarse todo un mes en París, sobre los lugares que quieren visitar, las comidas que desean probar y otras cosas más.
El desayuno estuvo bien, estamos saliendo del hotel aunque tuve que volver a la habitación por mi cámara.
— ¿Te gustó el desayuno? — curiosea Emma.
— Estuvo bien, pero no cambiaré los pancakes de mi madre.
Mi respuesta al parecer le ha hecho mucha gracia; me alegra que cada vez que estamos juntos sonría mucho, más porque lo hace de verdad. No sería capaz de verla llorar sin saber qué hacer.
Caminando a la estación del metro, he fotografiado varios lugares mientras el grupo pasa, hasta que llegamos a nuestra respectiva parada.
Al parecer, también han contratado a un guía, quien saluda de manera formal al director y luego se dirige al grupo.
— Buenos días chicas... — detalla a cada una de las integrantes del grupo. — chicos. Bienvenidos a Francia, y por supuesto, ami bellísima París.
— Gracias. — responde el coro.
— El señor director me ha manifestado su deseo de visitar uno de los lugares más representativos y románticos de la ciudad y el mundo... ¡La torre Eiffel! Espero hayan traído sus cámaras; imagino que no quieren olvidar su estadía aquí. — junta sus manos con un inaudible aplauso, y sonríe como lo hacen todos en éste momento.
— Señor fotógrafo, el recuerdo grupal, por favor. —el directos me pide que me quede ahí, mientras todos pasan frente a mi cámara. El guía — que por cierto se llama François, como cosa extraña. — "compite" con Jacke por el lugar junto a la tímida chica de lentes.
— París a la una... a las dos... a las ¡tres!
—¡París! — dicen sonrientes.
No me preocupa el que salga o no en las fotografías, las mejores son las que tome junto a Emma.
Llega el metro, el guía nos hace una señal para que lo sigamos. Mientras se hace el recorrido, François nos dice los nombres de las calles por las que vamos pasando. Si que me parece complicado hablar francés, pero necesito apuntar toda la información para lo que planeo hacer durante mi estadía.
El metro se detiene, empezamos a caminar hacia la enorme estructura de metal que vemos "cerca".
— Emma, Jamie, ¿quieren una foto antes de llegar a ella? —pregunto a las chicas. Emma me mira un poco extrañada mientras que Jamie sonríe tímidamente. Ambas se acercan y se quedan de pie "enfrente" de la torre. — ¡Listo! —en cuanto voy a revisar la imagen, las dos chicas me piden que las deje ver.
Les ha gustado. Me devuelven la cámara y corren para alcanzar al grupo que nos llevan algo de ventaja.
Caminamos dos calles más, y por fin veo la torre frente a mí. François habla sobre ella, pero no le presto atención. Busco desesperadamente a Emma con la mirada, la encuentro y sus ojos se conectan con los míos. En sus labios se dibuja una dulce sonrisa.
Narra Emma
Pensaba esconderme detrásd e algún árbol o arbusto, pues aún me parece injusto que Mattew me hubiese ganado anoche. En otras palabras, me sentí un poco arrepentida por lo que aposté... Pero lo que se poromete se cumple, aún más cuando sentí un cosquilleo que me puso la piel de gallina al mirar sus ojos.
Aquí estoy, acercándome poco a poco al chico que se escapó de un libro romántico, que escribió de manera diferente mis sentimientos e ideales, y que ha sabido leer mis más profundos pensamientos.
— Hola. —me dirijo a él.
— Hola.
— ¿Cómo estás?
— Felíz... no estoy muy seguro. —responde con seriedad, y luego, una semisonrisa se dibuja en su rostro. — Creí que te había caído MUY bien François y que no ibas a voltear a verme.
— No se puede preferir a un guía, teniendo al mejor fotógrafo a tu lado. — le guiño un ojo. —Creí que te escaparías con la parisina rubia del metro, Mattew.
— No se puede preferir a un aparisina, cuando un ángel llega a tu pequeño infierno, y te hace sentir en el mismísimo paraíso. —Noto cómo sus palabras vienen desde lo más profundo de su corazón. Lentamente eleva sus ojos al cielo, toma mi mano cariñosamente mientras entrelaza sus dedos con los míos.
— Mattew, ¿sabías que te quiero? — Pregunto cuando caminamos hacia la torre; todo el grupo se ha ido a sentar al otro lado del parque. Parece que Matt no me ha escuchado, por lo que vuelvo apreguntarle. — Matt, ¿sabías qu — sus labios me dejan sin poder decir una palabra más. Seguido a ésto, el sonido de la cámara hace que se me escape una fugaz sonrisa.
— Ojalá no me quieras más de lo que yo a tí... y lo prometido es deuda, señorita apostadora.
— Sacaste provecho Mattew. Deberías regalarme ésa fotografía.
Me abraza un poco fuerte y ríe con gracia.
—Madame, con marco incluído y dedicatoria también. Ésperela en cuanto el viaje termine. —Me da un besito en la frente, y yo, lo estrecho un poco más entre mis brazos.
Hallo! Señoritas, señoritos, señores y señoras... espero traer el próximo capítulo lo más pronto posible.
Como dije antes, estamos en la recta final, no puedo decir que me está yendo de maravilla; por el contrario, estoy dudando de mis capacidades para hacer del final de esta historia lo mejor.
Un beso y un abrazo enorme desde mi casa hasta donde se encuentren *w*
![](https://img.wattpad.com/cover/52542680-288-k727479.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Un ángel en mi pequeño infierno | #ColorsAwards2017
Roman d'amourLa historia trata sobre Emma, una chica a la que no le gusta leer los libros de los que tanto hablan sus amigas, pero conoce a un chico de su escuela, Mattew, quien hará que su amor parezca una de las miles de historias románticas que ha escuchado. ...