Él cogió mi mano, parte de mi brazo y tiró pillándome de improvisto. De la fuerza que hizo mi cuerpo acabó a un lado del suyo con mi cabeza en sus piernas y mis piernas en el respaldo del sofá.
V- Te perdono si me dejas besarte.
W- ...Te dije que no hacía falta preguntar.
Él solo sonrío, se abalanzó sobre mí cubriendo todo mi cuerpo y me besó en la frente pasando a mis labios, pero mientras me besaba había una pregunta que rondaba mi cabeza...
¿Quién era Laura?
Se separó y mirándome a los ojos empezó a hablar.
-Willy...eso que te dijo Luzu...¿Quieres que te lo cuente?
Bajé mis pies del respaldo y me senté a su lado correctamente.
-No
Él me miró sorprendido.
-¿Pero no querías saberlo antes?
Sonrío un poco, me levanto y me quedo de pie en frente de él. Apoyo mis manos en su cabello, él apoya su cabeza en mi vientre y rodea mi cadera con sus brazos mientras yo sigo acariciando su cabello.
-Creo que no tiene importancia conocer lo que pasó, no va a cambiar nada. Además, no te ves feliz hablando de ello.
Nos quedamos así por minutos, hasta que mis tripas rugieron.
-...
-...
-Vamos a comer
Se levanta del sofá y cogiéndome de la mano vamos los dos de nuevo a la habitación en la que nos encontramos a todos mirando la televisión con cara de aburrimiento.
L- Al fin. Chicos, nosotros ya nos vamos. Vendremos mañana.
Todos se levantaron a la vez y fueron hasta la puerta.
W-¿No os queréis quedar a comer?
LA- No hace falta, vamos a salir a un restaurante
Dijo con una sonrisa abrazando a Luzu del brazo.
A- Y yo tengo algunas cosas que hacer. ¿Ya llamaste a los de seguridad no?
V- Si, el edificio está bien protegido.
L- Si pasa algo nos llamas.
Se despidieron todos y salieron dejándonos solos.
-Bueno, ¿si ahora pido comida no le cerrarás la puerta en las narices al pobre cocinero no?
-Ahora no. Tengo hambre ¿qué pedimos?
-¿Quieres comer pizza?
-¡Si! Hace un montón que no comemos pizza.
-Pues decidido, voy a llamar.
Esperamos unos 20 minutos a que nos trajeran la pizza viendo la tele y cuando por fin llegó nos la comimos en menos de 15, sí que teníamos hambre.
-¿Vemos que hay en Netflix?
Le pregunté comiendo una rebanada de mango como postre, pero me acerqué a él preocupado al ver que tenía la cabeza gacha.
-¿Vegetta? ¿Estás bien?
-Sólo...un poco cansado. No es nada.
-Estás pálido.
Toco su mejilla y hago que me mire.
-¿Que te pasa?
-...Sangre
ESTÁS LEYENDO
Soy...¿su compañero?
FanficWilly nunca había creído en seres fantásticos o mitológicos, hasta que un día ocurre lo más inesperado y su vida da un giro de 180º. ¿Su compañero de piso tiene algo que ver en esto?