Disappeared

Capitulo 08

Corriendo por la casa Scarlet, se encontraban dos niños de 5 años. Ambos pelirrojos.

Uno era un enojon de primera categoría. Fanático de los dulces de nuez y chocolate, con una afición muy especial a los videojuegos de guerra.

La otra era un niña con las mejillas siempre rojas, con un carácter estricto y una gran habilidad para las matemáticas.
Los pequeños Ravee y Eileen eran dos chicos muy especiales en su área. Dotados por una inteligencia y habilidad de reacción que impresionarían a cualquiera.

Erza Scarlet, su madre, estaba orgullosa de sus retoños. Eran honestos y buenos niños, amables con todos y educados -eso según ella claro-

—Ravee, no hagas correr a tu hermana por la casa; mancharan sus trajes y nos tardaremos mas en llegar a la inauguración.

—Claro mami.

Él café Strauss había sido un éxito en Alakistasia, tanto así que Mirajane, Elfman y Lissanna habian decidido poner sucursales mas en Alvarez.

—Cariño, ¿Han visto mi bolso?

Los niños apuntaron a la barra y dijeron:

—Mama, llegaremos tarde si no te apresuras.

Vaya chico, ¿Eh? Eran dos perfectos hijos.

En otra parte del mundo, un pelinegro bastante mas alto, con un traje impecablemente pulcro y un maletín de viaje, salia de su casa con destino a el aeropuerto.

—¡Gray! –una mujer con una maleta mas para el hombre salio y con una sonrisa se la entregó —Se te olvido esto, suerte en el viaje cielo.

Con un corto beso se despidió Juvia de su pareja; Gray Fullbuster que tenia destino a Alvarez por negocios y otros asuntos personales.

—Hasta luego Juvia.

Sin decir mas, el se metió en el coche y arranco sin ver atrás. El había buscado a su pelirroja por 3 largos años, los cuales lo deterioraron muchísimo.
Juvia había insistido tanto en darse una oportunidad, que termino aceptando no muy convencido.

Tenían 3 años de relación y 1 de vivir juntos. Gray pensaba que Juvia estaba con el por el sexo casual, la compañía o el dinero de este... Pero no... Juvia estaba enamorada completamente de Fullbuster y no había manera de negarlo.

Gray tenia muchas cosas en la cabeza después de que Erza se fue. Recordaba haber tenido una conversación con ella hace años pero no la recuerda muy bien pues era en esos días en los que a el solo se le encontraba borracho.

Sonó su celular, lo miro y vio a su pelirrosa amigo. Natsu Dragneel.

—Natsu, ¿Que pasa? —Gray puso el bluetooh del auto y dejo el teléfono a un lado.

—¡Hielito! ¿Que parte de "llega temprano" no entiendes? –Natsu estaba gritando frustrado. Tenían semanas planeando esto e incluso incluyeron al antisocial de Fullbuster (según palabras de Natsu) para que viniera y se tomara unas merecidas vacaciones sin quejivia, como llamaba Evergreen a Juvia.

—Relajate cabeza de alambre. Voy en camino.

—¡Mas te vale! Luke y Luce están desesperados.

—Alla los veo.

Y sin dejar hablar a Natsu, colgó. Luke, su ahijado, nació 5 meses después de que Natsu y Lucy se casaran. El rubio era un torbellino y junto con Elliot, el hijo de Elfman y Ever, era como un volcán explotando. Dinamita pura.

Gray miro su reloj, según esto, su vuelo salia a las 5:30 y eran las 5:23. Tenia que meterle pie para que alcanzara a la familia Dragneel.

Una vez en el aeropuerto, bajo corriendo con la maleta en la mano izquierda y el maletín en la mano derecha. Mentalmente hacia una lista de lo que tenia que llevar.
Cepillo de dientes, cambios de ropa para la inauguración y la fiesta del café Strauss y 7 días en Alvarez, papeleo importante de la empresa Fullbuster, ropa interior.... ¿No falta nada?

—¡Graaaay! ¡Corre!

La voz de Lucy le trajo de vuelta al mundo real. Ahí estaban... La familia Dragneel.

—¡Hola padrino! –saludo Luke.

—Casi perdemos el vuelo. Vamos o no llegaremos.

La familia y el pelinegro siguieron hasta la puerta de entrada. De ahí, iban a Alvarez, donde su bienvenida, seria una sorpresa enorme... O mas bien tres.