(N&S) Mi niña de prosper +18

Capítulo 33*

- Cariño, al fin te dignas venir a verme

- Lo siento, mamá – dije besando su mejilla – Estaba fuera de la ciudad

- Sí, ya me dijo tu padre que tenías vacaciones en el hospital, pero pensé que tal vez vinieses antes a visitarme.

- Lo siento. – me disculpé – Pero finalmente aquí estoy y tengo grandes novedades que contarte.

Había decidido cenar con mi familia y así ponerles al corriente sobre mi boda. Sabía que sería difícil que lo comprendieran así como así, pero no tenía otra opción. De todos modos, la parte más difícil sería explicárselo a Minato, pero estaba en un congreso del cual no regresaba hasta el día siguiente, así que contaba con tener la ayuda de mi madre para decírselo.

- Y bien, ¿cuáles son esas grandes novedades? – preguntó Kushina luego de servir el té que había llevado Shasha  al salón.

- Es un poco difícil de explicar – dije pasándome nerviosamente la mano por la nuca

Kushina me miraba extrañada instándome a proseguir. Tomé aire sonoramente.

- Me he casado – anuncié y la taza de mi madre tambaleó sobre el plato

- Cómo!! ¿Qué quieres decir? – preguntó dejando el plato sobre la mesa

- Me he casado – repetí enseñándole la delgada alianza de oro que descansaba en mi dedo

- No lo entiendo, Naruto – respondió atónita cogiendo mi mano – ¿Cómo que te has casado? ¿Cuándo? ¿Por qué? ¿Con quién?

- Recuerdas a Sakura … - comencé

- ¿ Sakura …? ¿Es la chica que había desaparecido?

- La misma. Pues bien, la encontré. E increíblemente me perdonó.

Hablar con Kushina era tan sencillo. Mi madre siempre puso la felicidad de sus hijos por encima de cualquier otra cosa; y ella sabía cuánto había sufrido yo por esa chica a la que ella desconocía. Las palabras brotaban de mis labios con fluidez y fue muy fácil que ella entendiera todo, lo aceptara y se sintiese feliz por mí.

- No puedo creerlo – suspiró – No voy a negarte que me duele no haber podido ser parte de tu boda, pero si tú eres feliz, entonces para mí todo está bien

- Gracias, mamá. Sabía que lo entenderías.

- Lo entiendo, cariño, pero igual te prohíbo que vuelvas a hacer algo semejante sin compartirlo conmigo.

- No te preocupes, mamá – sonreí besando su mejilla

- Y bien, ¿cuándo voy a conocerla?

- Volverá de Prosper el próximo fin de semana, así que supongo que podríamos cenar juntos la semana siguiente.

- Perfecto. Organizaré una cena familiar, entonces. ¿Se lo has dicho a tus hermanos?

- A Menma aún no, pero Ino ya lo sabe.

- ¿Y a tu padre? – preguntó con cautela

Bajé la vista preocupado

- No – susurré – ¿Cómo crees que se lo tome?

- Bien, ¿por qué habría de ser de otra forma? – me preguntó extrañada

- Tú sabes, Hinata es la hija de Hiashi …

- No te preocupes por ello, cariño, si lo tuyo con Hinata no funcionó, nadie tiene la culpa

- Ya. ¿Pero y si mi ruptura con Hinata generase problemas con Hiashi en la clínica?