Preguntas incómodas

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Han transcurrido dos meses más en los que he compartido con Luca, ya son cuatro, es increíble lo rápido que pasa todo; seguimos saliendo, nos escribimos, nos llamamos, conocemos amigos en común y compartimos mucho con Merith, que trata de hacerse a la idea de acostumbrarse a vivir sin su mamá, que en lo que a mi respecta no lograría jamás, pero ella cual roble, maneja de la mejor manera y nunca nos ha negado una sonrisa. 

Hoy salí a almorzar con Merith, y me preguntó, directamente, —¿y qué son ustedes?, ¿novios, amigos con derechos, solo amigos?, ¡de verdad no logro definirlo!. —

Honestamente este tipo de preguntas suelen darme problemas, porque no es una decisión individual, así que solo digo: —pues ni idea, estamos bien así.— algo que a mi edad, no debería ser un problema pero, ya llegará el momento.

Al otro día, luego de que Merith instalara elegantemente esa pregunta en mi mente, me dedique a hacer planes para un paseo que hace mucho tiempo tenía ganas de hacer con Luca en un lugar especial, para tratar de distraer mi mente en algo productivo, entre tanto quehacer de ambos ponerse de acuerdo es toda una osadía pero con unas llamadas y algunos permisos lo logramos, y estamos para el fin de semana. 

El viernes en la noche recibo el mensaje más lindo de la historia, de esos detalles que hacen diferentes: '' Nina, gracias por planear un paseo tan increíble para ambos, te tengo muchas sorpresas, espero de verdad te gusten; nos vemos mañana, paso por ti a las 8,  te quiero.'' 

Ya es sábado en la tarde, la hemos pasado increíble, hemos hablado de mil cosas, hablo de mis cosas frikis,por supuesto, mayoría que él no comprende, pero disfruto miles explicándole aunque lo escuche simplemente porque me quiere. 

Luego entre breves explicaciones de Pokemon, de soundtracks buenísimos en malas películas, me detiene y me pregunta: — ¿te gusta en dónde estamos ahorita?, la verdad es que me fascina estar contigo, y mi respuesta automática en medio del asombro  es  — ¡claro que si, me encantas y me encanta estar contigo!— me acerco le doy un beso, le sonrío, y me siento a su lado.

Noto que se pone nervioso, que se pone un poco serio, y toma mis manos, se me acerca más y me dice: —me gustas muchísimo, mi tiempo contigo ha sido increíble, tenemos nuestras diferencias como  todo, pero las sabemos llevar muy bien, a pesar de nuestro poco tiempo, siempre logramos tener chance de estar juntos, y la verdad, es que la pregunta sobra, pero para hacerlo oficial, ¿quieres ser mi novia?. —

Lo abrazo muy fuerte,le doy un beso,y le digo al oído:—me encantaría.—

Todo parece tan irreal, tan lindo, como si fuera sacado de la película más cursi que haya creado Fox, ha pasado casi un año desde el momento difícil por lo ocurrido con Federico, y la verdad es que no puedo pedir más. 



Antología de Amores PerdidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora