Imposible no enamorarse de Leondre Devries

♥ 48 ♥ ~Capítulo final~

-Bien, no te molestaré...Pero sabes, de verdad me gusta lo que llevas puesto- dice después de haberse burlado de mi ropa.

La polera que había sacado era ajustada, pensé que se vería bien pero siento que me asfixia cada vez que me tengo que mover. Lo demás no me molesta, pero no me siento cómoda en lo absoluto. Estoy acostumbrada a vestirme con cosas holgadas, a parte tengo a Leondre burlándose de mi. Debería cambiarme.

-No sé si lo dices en un buen sentido o tratas de burlarte otra vez de mí, de todos modos me cambiaré.- digo y me acercó al armario para sacar una polera más cómoda.

-¿No hablas en serio?- dice en tono burlón.

-Claro que sí, me siento incomoda, Leondre.- rebusco para encontrar algo decente, no podía ir luciendo como una vaga a la audición de los chicos.

-Ya sal de ahí- reclama.

-¿Estás seguro de que quieres que salga del closet?- digo divertida, mientras me cambió la apretada polera negra, por una blusa blanca que jamás en mi vida había usado, pero era adecuada para la ocasión. O eso al menos creo, mi sentido de la moda no esta muy desarrollado que digamos.

-Que graciosa estás hoy ___, ¿te tragaste un payaso o algo?

-Puede- me asomo y le regalo una sonrisa arrogante. Me acerco para darle un beso en la mejilla.

-Primero me dices tonterías y ahora te pones cariñosa ¿quien te entiende?- dice con ironía en su voz. -¿De quien era eso? ¿De tu abuela?- fruncí el ceño, no entendía a que se refería, hasta darme cuenta de que miraba mi blusa con una expresión burlona.

-Oye- digo a la defensiva -No te burles otra vez, mira que yo no te digo como tienes o no que vestirte.

-No necesito que nadie me de consejos de moda, yo se hacerlo por mi cuenta y créeme, que lo hago mejor que tú- me apunta con el dedo, enseñándome lo que llevo puesto. Rodé los ojos.

-Ya cállate- puse mi mano sobre su cara tirándolo hacía atrás bruscamente.

-¡No seas tan bruta!- se queja sobándose una mejilla.

-Ups- digo lo más exagerado posible.

-Uups- imita mis gestos con la voz chillona. -Lo dije en serio, a veces te pasas ____.

-Perdón, te dolió de verdad, lo siento mucho yo...- justo en el momento en que pensaba ir y acariciarle la mejilla Leondre me empuja bruscamente y suerte, que alcancé a afirmarme en la orilla de la cama. -¡Leondre!- empezó a reírse igual que un niño de cinco años.

-Bien, lo siento, ven- estira la mano para que me agarre de ella. -Woop- dice al retirarla rápidamente haciéndome caer nuevamente.

-¡Estúpido!- me levanto sintiendo un pequeño ardor en las rodillas. -Te voy a...- Leo levanta un dedo en señal de silencio y toma su celular que había empezado a sonar. -Eres increíble- digo moviendo mi cabeza.

-Lo sé, pero déjame contestar.- se da la vuelta y habla -¿Hola?...Si...¿ahora?- lo miro mientras asiente, no puedo escuchar de lo que habla ya que estoy bastante concentrada en la forma que toman sus labios cada vez que dice una palabra, son tan bonitos, suaves, que ganas de besarlo. -Pero te dije que ahora no puedo- dice cortante. -No...estoy con ____...ya te dije- en la forma que empezó a moverse de un lado a otro me empezó a preocupar ¿Qué le habrán dicho para que se moleste así?... -Bien adiós- corta y me mira con el ceño fruncido.

-¿Quién era?- pregunto al instante.

-Nadie, me tengo que ir.

-¿Por qué te molestaste?