El último año en el Elite Way, giras, conciertos, un segundo disco...
Peleas, discusiones, reconciliaciones, una sorpresa inesperada para todos.
Y... ¿una promesa rota?
Poco más de las seis de la mañana eran en la capital española y Diego ya tenía todo listo para la sorpresa. Arregló una pequeña maleta y con cuidado de no despertar a su novia entro a su cuarto y arregló una para ella. Cogió al pequeño Álvaro y lo dejó encargado con Mía y una vez ya tenía todo listo fue por su novia, se recostó a su lado mientras depositaba besos en su cuello.
Roberta: umm, ya déjame. Tengo sueño.
Diego: despierta mi amor... Tenemos que irnos.
Roberta: ¿Diego? ¿que haces aquí?
Diego: venga va despierta que tenemos que irnos.
Roberta: ¿irnos? Por dios Diego (mirando el reloj sobre la mesita) son las seis y media, además Álvaro... (asustada) ¿donde está Álvaro?
Diego: está con Mía, tranquila. Venga va vístete y vámonos.
Roberta: ¿a donde?
Diego: ya te dije que era sorpresa, vístete rápido, te espero abajo.
Deposito un rápido beso en los labios de su novia y bajó corriendo hasta el coche donde Pablo los esperaba para llevarlos hasta la estación de tren. Poco después ya se encontraban despidiéndose de su amigo en la estación.
Después de subir al tren sin que Roberta supiera el destino y de varios intentos de ella por sonsacar a su novio ambos se quedaron dormidos.
Casi siete horas después llegaban a la estación de tren en Pontevedra, Diego alquiló un coche para los días que permanecieran en aquel lugar ya que esa ciudad no sería donde se alojarian.
Poco mas de media hora basto para llegar a su destino final, Sanxenxo, donde se alojarian en el maravilloso hotel Nuevo Astur. Roberta se quedó maravillada al ver el lugar, algo alejado de la ciudad, el hotel estaba rodeado de hermosos jardines. Después de que les entregaran su habitación, ella decidió explorar el lugar, deteniéndose en el gran jardín situado en la parte trasera del hotel.
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Roberta: wow mi amor, esto es hermoso.
Diego: (abrazandola por la espalda) ¿te gusta en serio?
Roberta: está increíble, todo es precioso y además muy tranquilo, lejos del ruido de la ciudad, que pena que solo vayamos a estar aquí un día.
Diego: sí bueno respecto a eso hay algo que tengo que decirte.
Roberta: (voltenadose para mirarlo) a ver que paso.
Diego: es que en realidad van a ser cinco días.
Roberta: ¿que? No Diego, pero Álvaro y los chavos, vinieron a verme y nosotros nos desparecemos.
Diego: por ellos no te preocupes, además Álvaro esta con tus hermanas y Pablo va a llevar a los chavos a la playa estos días y los va a llevar a conocer otros lugares.
