Siempre A Tu Lado

Capitulo 60 - Yo No Quielo Helmanos

*****: ¿me extrañaste?

Ana Lucía: mucho y mi mami tamben.

La niña le dio un beso y bajó de sus brazos enseguida Roberta se lanzó a abrazarlo, besándolo apasionadamente mientras la pequeña los observaba divertida.

Giovanni: ¡hey! Que está aquí delante su hija, no sean intensos.

Ana Lucía: tío no legañes a mis papis, ellos se quielen y pol eso se dan besos, igual que tú con la tía Miranda ¿veldad papi?

Diego: sí princesa, yo amo a tu mami y por eso le dio besos.

Ana Lucía: ¿mami tu amas a mi papi?

Roberta: (abrazandolo) sí princesa, lo amo mucho.

Ana Lucía: ¿ves tío?

Giovanni: está bien, tu como llegaste tan pronto wey, no que llegabas en dos días.

Diego: pues se suponía pero firmamos hoy y ya no tenía nada que hacer allí así que me regresé.

Giovanni: entonces yo me voy, esta noche ya no están aquí solitas (guiñandole un ojo a Roberta) ¿verdad Choky?

Roberta: ya, no seas idiota, gracias por quedarte con nosotras.

Giovanni: de nada, adiós princesa, mañana nos vemos ¿vale?

Ana Lucía: shi tío, te quielo.

Diego: gracias por todo hermano.

Giovanni dio un beso a su ahijada y despues se despidió de Diego y Roberta, decidieron ver una película todos juntos, la pequeña no paraba de contarle a su papá como habían sido los últimos días en el kinder. Se quedó dormida a media película mientras Diego y Roberta se dedicaban pequeños arrumacos.

Diego: mira, se quedó dormida.

Roberta: sí, pobre estuvo toda la mañana en el kinder y en la tarde estuvo con Giovanni y Miguel en la productora.

Diego: mejor la llevo a la cama.

Roberta: ok, yo me voy al cuarto, te espero allá.

Diego: te alcanzo enseguida.

Diego cargó a su pequeña con cuidado de no despertarla y la llevó hasta su cuarto, la arropó con cuidado y le dio un beso en la frente, después fue hasta su cuarto donde Roberta lo esperaba, salió del baño con sólo unos shorts y una playera cortita, Diego la miró y rápidamente fue hasta ella, abrazandola mientras la besaba.

Diego: me encanta que te pongas estos pantanlocitos tan cortos.

Roberta: lo sé, te extrañé mucho estos días.

Diego: (mirandolo picaramente) y yo a ti.

Capturó sus labios en un beso apasionado mientras ella se dedicaba a desabrocharle la camisa y deshacerse de ella, lo hizo caminar hacia atrás cayendo ambos sobre la cama, comenzó a besar su cuello bajando por su hombro, deteniéndose y depositando un tierno beso sobre la pequeña marca que él tenía ahí desde hacía dos años, los recuerdos la desbordaron y dejó escapar algunas lágrimas, él al sentir sus lágrimas la abrazó fuertemente a su pecho.

Diego: ya mi amor, no llores.

Roberta: lo siento bebé, arruiné el momento, lo siento.

Diego: shh, ya no hables, ven acá.

Diego la hizo recostarse a su lado, abrazandola mientras ella recostaba su cabeza en el pecho de él.

Diego: vamos a dormir ¿sí?