Siempre A Tu Lado

Maratón 3/5 - Cap. 35 - Estás Pálida

Tres días después del compromiso de Mía y Miguel, Diego había inaugurado su productora. Ese mismo día Roberta también empezó con sus primeros casos como abogada.

Diego despertó temprano y después de darse una ducha y arreglarse decidió preparar el desayuno para su novia. Roberta despertó buscando a su novio en la cama pero al no encontrarlo miró por toda la habitación, se puso una bata y antes de salir ya corría hasta el cuarto de baño. En ese momento Diego entró y al oír ruidos en el baño decidió ver que sucedía, al entrar vio a su novia, arrodillada frente al baño, vomitando.

Roberta: Diego salte de aquí.

Diego: mi amor ¿que tienes?

Roberta no pudo responder mientras se agachaba de nuevo en el baño, Diego le recogió el pelo mientras le acariciaba la espalda. Unos minutos después, se lavó los dientes y salió hasta el cuarto seguida de Diego, se sentó en los pies de la cama y él se arrodillo frente a ella mientras acariciaba su cara.

Diego: mi amor ¿que fue eso? Estás pálida.

Roberta: no pasa nada, creo que me sentó mal la cena de anoche.

Diego: ¿estás segura? No quiero que te vuelvas a enfermar.

Roberta: no te preocupes amor, estoy bien.

Diego: bebé esto no es normal, puedes enfermarte de nuevo como antes de venir, acuérdate, mejor vamos a la clínica y salimos de dudas.

Roberta: no de verdad que estoy bien, vamos a desayunar ¿si? Además tienes que ir a la productora y yo al bufete, hoy voy de oyente al juicio por estafa.

Diego: Roberta si estás mal no vas.

Roberta: de verdad ya me encuentro bien, vamos a desayunar que me muero de hambre.

Diego: está bien, pero si te vuelves a encontrar mal, vamos con Teo para que te revise y es mi última palabra.

Roberta: está bien no te enojes.

Diego: no me enojo, solo quiero que estés bien porque te amo.

Roberta: yo también te amo.

Roberta dio un beso a su novio y después de desayunar juntos, Diego se despidió de su novia y salió hasta la productora. Roberta se arregló y se maquillo un poco, ya que aún se veía un poco pálida, y salió hacia los juzgados.

Salió de su departamento y después de arreglar todos los pendientes que tenía se reunió con su hermana en una cafetería.

Mía: (sentándose) perdón, perdón, llego tarde pero es que había mucho tráfico.

Luján: no te preocupes, acabo de llegar.

Mía: bueno y cuéntame que pasó.

Luján: ah bueno es que quería contarte algo, o más bien preguntarte.

Mía: ¿sobre qué o quién?

Luján: de Roberta, quiero saber si tu sabes qué le pasa últimamente.

Mía: no entiendo a qué te refieres.

Luján: Mía si lo sabes, el otro día cuando estábamos en el parque con Álvaro, Roberta casi se cae desplomada al suelo y después también le sangró la nariz.

Mía: ¿no te dijo nada?

Luján: bueno sólo sé que fue a ver a Teo para que le hiciera análisis.

Mía: es que bueno...

*******: puede que tenga leucemia.

Luján se quedó pálida y totalmente paralizada ante las palabras de su hermana que acababa de llegar.