Capitulo 38 - Gracias Pollito

3.7K 134 13
                                    

Ninguno pronunció palabra, Diego y Roberta los miraban confundidos. Diego cada vez se ponía más nervioso y Roberta fue la única que se atrevió a romper el silencio.

Roberta: ¿no van decir nada?

Alma: ¿es una broma no?

Roberta: mamá no es una broma, cómo crees que voy a jugar con esto.

En ese momento Alma se levantó echa una furia mientras caminaba de un lado a otro.

Alma: pero cómo se te ocurre decirnos algo así de esta manera.

Roberta: mamita no hagas drama, ¿que querías que te dijera?

Alma: (a Reverte) y tú no le vas a decir nada, pero por Dios en donde tienen la cabeza ustedes.

Franco: Alma traquila.

Alma: tranquila mis calzones. Yo mato a este niño, pero es que ustedes no saben lo que es cuidarse o qué.

Reverte: Alma por favor, ya. Mira si son jóvenes pero que le vamos a hacer, cálmate.

Roberta: bueno ya, se acabó. Mira yo ya soy grande y no tengo porque darte este tipo de explicaciones pero fue algo que no planee, no fue ni mi culpa ni de Diego ¿ok? Y si soy joven pero me hace inmensamente feliz y si no están de acuerdo me parece perfecto, Diego nos vamos.

Diego: Roberta...

Roberta: ¡dije que nos vamos!

Mabel: no espérate, si es cierto que son jóvenes pero esto iba a suceder porque se quieren y al menos yo los apoyo, aparte voy a ser abuela, felicidades niños.

Diego: (abrazandola) gracias mamá.

Roberta: (abrazandola) gracias Mabel.

Reverte: hija, sabes que yo respeto tus cosas y aunque no me esperaba esto, eres mi niña y si tú eres feliz yo también.

Roberta: (abrazandolo) gracias pá, te quiero mucho.

Reverte: y yo a ti, y tú Diego ahora ni se te ocurra hacerle de llorar a mi hija porque...

Roberta: papá por favor.

Diego: no mi amor, tranquila. No te preocupes Martín, jamás la voy a hacer llorar, te lo juro.

Franco: más te vale porque también te las tendrías que ver conmigo ¿tambien es mi nieto no?

Roberta: claro que sí, gracias Franco.

Alma: mi reina ¿podemos hablar?

Roberta: mamá si es para seguir sermoneando lo siento pero no.

Alma: no discúlpame, me altere. Perdóname, me pilló de sorpresa, pero ya dejesmolo por la paz. Felicidades mi reina.

Roberta: entiendo mamita, no te preocupes, la verdad si fui un poco brusca pero no sabía como decírtelo.

Alma: (a Diego) y tu y yo ya hablaremos yernito.

Diego: está bien.

Roberta: nos tenemos que ir ya mamá, nos vemos mañana.

Alma: está bien, te cuidas y tu y yo tenemos que hablar ¿eh?

Roberta: sí mamita, pero ya quiero descansar. Nos vemos.

Roberta y Diego se despidieron de sus padres y se fueron a su departamento. Después de un largo baño, Roberta decidió acostarse un rato mientras Diego se encargaba de hacer la cena, se quedó dormida. Diego al ver que su novia no llegaba a cenar fue hasta el cuarto y la vio profundamente dormida, se arrodilló a su lado mientras la observaba.

Siempre A Tu LadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora