Amor Sumiso [EreMin](Pausada)

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-¡Ja! Otra vez idiota, ¿cuántas veces no te han repetido que laves los platos antes de salir del comedor si eres el ultimo?.-Como de costumbre por la noche en los dormitorios Jean y Eren discutían por diversas cosas, al igual algunas sin sentido.

-¿¡Y a ti idiota no te he dicho que no te metas en mis asuntos!?.-Observe como siempre al lado de Eren la discusión, por desgracia él me obligó a que le ayudará ¿y cómo negarme? Me es casi imposible. Desde luego Jean se burlaba de Eren por ser "castigado", y Eren se apenaba de lo sucedido pero le desagradaba que se lo recordara el ya mencionado.

-Eren termina con esto ¿quisieras?. Ya es tarde y el guardia se enojará nuevamente si nos ve despiertos.-Dije en voz audible y firme, llamando la antención de los dos, pues noches pasadas los han encontrado peleando y todos al rededor, algunos no pues ya están acostumbrados. Lo peor es que suelen castigarlos haciendo limpieza o organizando cajas "pues si no tienen sueño es por que tienen energía, y esa la pueden utilizar para cosas buenas, en vez de hacer tonterías" palabras empleadas por los guardias de habitaciones.

-Anda haz le caso Eren, igual todos sabemos que no puedes contra mi.-Jean sonrió con sus manos en su cintura, seguramente creyendo que está es una victoria para él. Escuche como mis compañeros de dormitario hacían sonidos y gritaban pelea, pelea, pelea constantemente.

-Seras...-Los gritos de los demás hizo emocionar a Eren. Que patético no quiero ser castigado por culpa de ellos.

-Eren por favor deja de discutir por cosas sin sentido.-Ya me tenían cansado, observe el rostro de mi amigo quien arqueo la ceja con una expresión de sorpresa y enojo.

-¿Ahh?, Armin creí que estabas de mi lado, bien llevate a mi único amigo... que ni parece, te duermes al lado de Jean.-Retrocedi con sorpresa ¿qué? ¿pero, por qué? sólo trato de ayudar.

-Eren...-Trate de explicar pero paso sus manos a sus oídos acostándose en su lugar.

-Nada buenas noches ¿eso querías?-Aprete los puños achicando los ojos en dirección donde dormía Eren y por supuesto yo.

-No te preocupes Armin el idiota nace siendo idiota.-Cometo Jean tratando de darme ánimos, seguramente abra visto como estaba por el comportamiento de mi amigo.-Igual vamos a dormir, si me pateas en la noche juro que te tiro de la cama.-

-No es verdad. Y ya Jean que el que hará eso no seré yo...-Desde luego seguí a Jean a su litera, dudoso me acosté a su lado dejando todo el espacio que podía. Al poco rato de quedar dormido volví a despertar sentí como pasaron sus manos a mi cintura. Me sobresalte busque de quien se trataba pero sólo era mi compañero de cama.

-Armin calma, sólo sera por esta vez-Logre escuchar su susurro.-Solo por hoy.-

-Si estas consciente por mi no hay problema.-Respondi mas tranquilo seguro a de extrañar a alguien y por eso el abrazo.

-Sí, lo estoy descansa.-A como pronuncio me volví a dormir. No me incómoda pues sino mal recuerdo con Eren pasa lo mismo, sólo que él finge que no pasa nada.

•°•°•°•

-Ah vaya par de idiotas nunca imaginé que te vería tan tranquilo y abrazando a Jean, ¿eh Armin?.-Acomodo su chaqueta, me asuste al ver tan cerca a Jean casi que llegue a caer al piso. Eren sólo me miró unos segundo y se fue, ya no había casi nadie en el dormitorio, o mejor dicho sólo estaba Jean y yo.

-Tch... Ay Eren... Duele... Y eso que no esta tan alta y es la cama de abajo.-

-¡Eh Armin!, ¿te caíste? -Desvie la mirada a Jean quien al verme en el piso rápido se levanto ayudandandome a levantar.-Fue Eren, ese maldito... No te preocupes le haremos la vida imposible. -Comentó Jean mirando hacia la puerta

-Jean no fue él, es que me asusto tenerte tan cerca por eso caí y él nos vio y me preocupe.-Comenté con ligera pena, pues no soñaba tan común mí comentario. Jean me volteo a ver de una forma un tanto triste.

-Siempre preocupandote por él.-Se acercó a mí extendiendo su mano la cual acepte y me levanté.

-Ja si vamos a pasar lista.-Evite el tema pues somos los últimos. Rapido me aliste al igual que él y en seguida fuimos a pasar lista, busque entre la multitud a mi amigo, estaba al lado de Connie no me preocupe y fui con él, tan entusiasmado saludé a mis compañeros pues habían llegado Reiner y Bertholdt.

-¡Hola chicos buenos días!-Al saludar todos me sonrieron y contestaron menos Eren. Ay mí amigo tan especial.

-Ah veo que dormir al lado de Jean te motivo. -Dijo Reiner cruzado de brazos mientras caminabamos para ir al centro, sentí mucha vergüenza, incluso sentí como si se me subiera el calor a las mejillas, Eren me observaba sin decir nada, sólo estaba caminando de mí lado izquierdo. Y Connie sólo me abrazó algo extraño de su parte.

-¡¡Eh Armin!!, con razón lo defendiste en la noche.-Connie hizo un gesto gracioso pero podría decirse que pícaro. -Nunca imagine que Jean ¿desde cuándo? - Todos dejaron de caminar y me miraron fijamente.

-¡Connie!, Armin no es así, no digas eso de él. Además dudo que tenga malos gustos.-Hablo por fin Eren tan enojado, Reiner
y Bertholdt cruzaron miradas, y yo sólo bajé la mirada apenado por su comentario. Si supiera.

-Hey vamos Eren, son sus gustos dejalo.-Connie me miró pensando en algo, debe ser algo serio y interesante todos guardaron silencio cruzando miradas rápidas.-¿Oh qué celitos?-Escuche a Reiner atragantarse. Mientras que Eren sólo abrió los ojos sorprendido, para luego achicarlos molesto. Camino más rápido.

-¡Hey chicos esperen!, vaya ¿qué reunión?- Todos pasaron su mirada atrás de mí y Eren dejó de caminar para ver. Esa voz la conozco a la perfección. Miré a Eren pero él sólo veía a Jean. . . con molestia. Connie se atravesó dándome media vuelta para ver a mí compañero. Supongo que mi mejor amigo ya se fue.

-Mira Armin ya llegó tu niño. Oh tú hum... bueno eso.-Entre risas Reiner caminó hasta Jean, sólo dio algunos pasos.

-Vamos chicos yo no soy nada de él, y además no hagan que Eren se enoje y me mal intérprete. -Intenté calmarlos lo que menos quiero es perder su amistad. Y no sólo por malos pensamientos lo perderé.

-¡Que asco!- Eren caminó más rápido rodeandonos a todos. Llevándose todas las miradas. ¿Qué no se había ido?.

-Maldición Eren. - Murmure en voz baja, aunque al parecer todos me escucharon.

-¿Y a este qué le pasa?- preguntó tan confundido Jean. Ya no logré escuchar pues salí corriendo detrás de Eren tomandolo de la mano, pero en seguida se soltó de una manera tan brusca.

-Vete con él. Déjame solo -Siguió caminando sin rumbo pues parecía entrar a un callejón, demasiado pequeño. ¿a qué horas llegamos hasta aquí? .

-Vamos Eren tú tienes la culpa de mal interpretar yo no siento ni tengo nada con él.-Deje de caminar al igual que él, me miró de reojo pues sólo se ladeo.

-El abrazo de la mañana hum me hace creer todo lo contrario.-Pasó su mano a su mentón con alegría obviamente fingida.

-Pero ¿no somos amigos desde la infancia?, debes conocerme tanto como yo a ti.- sonreí cerrando los ojos recordando tan lindos momentos. Agh que ingenuo para recordar tan lindos momentos en esta ocasión.

-Pues resulta ser que no es así, me mentiste y vaya.- Siguió su camino sin decir nada preferí no seguirlo. Sí por miedo.