Girls Misfortune.

Episodio 3

"Milagro"

Mientrás iba caminando, Annalise se tropieza con un pequeño tronco que estaba en el suelo, cuando se levanta ve una pequeña peineta sucia entre las hojas y la tierra sin pensarlo dos veces la levanta y la sacude, observa algo brillante entre unas hojas, era un espejo. Muy entusiasmada se lleva los dos objetos para mostrarselos a Javiera.

— ¡Esther , Esther¡ — grita mientras corre.

Esther estaba sentada sobre la arena.

— ¡No grites — Exclama Esther molesta.

—... Queria enseñarte esto, mira. — Annalise le muestra a Esther aquellos objetos que había encontrado enterrados en la tierra.

— Ahora podremos peinarnos.

— ¡Yo me peino primero!. — Exclama arrebatandole las cosas de las manos.

– ¿Y por qué no yo primero?.

— Porque eres tan lenta.

Annalise, solo se sienta a su lado esperando su turno, se queda mirando el gran lago y los lejanos árboles que lo rodean, se fijó en la extraña silueta de un barco.

— ¡Esther, mira, mira un barco!. — Habla emocionada mientrás la agita de su hombro.

Esther se para rapidámente. Las dos niñas comienzan a gritarle al barco con el proposito de que este volteara hacia a su direccion, no tuvo resultadó, el barco se alejaba más y más, las niñas poco a poco fueron bajando su tono de voz. El barco se habia ido.

Las niñas intentaron hacer fuego antes de que callera la noche estuvieron un largo tiempo, girando la rama en un tronco pequeño debajo de hierba seca.

— ¡Sigue tú!. – Le dice Esther mirandose las manos pegajosas por el sudor. Se levanta.

– ¿A donde vas?.

– Voy... voy... voy a... — Ella se sonrroja y suelta lo que iba a decir — ¡Voy a orinar!. — Esther fué corriendo trás unos arbustos.

Annalise prosiguio, fastidiada, lo empezo a hacer con más fuerza y más rápido, estuvo por un largo tiempo.

— ¡Vamos, vamos!. — Anima Annalise. Humo empezo a salir, al ver eso Annalise se motivó y empezó a soplar y el milagro se hizo, fuego se hizo. — ¡Si, si, si! — Grito y salto de alegria — ¡Esther, Esther, fuego, fuego!

Esther escucho los gritos de su compañera y fue corriendo a ver lo que pasaba. Se puso muy contenta y empezo a celebrar junto con Annalise. Empezaron a traer ramas y troncos para que la duracion del fuego sea más duradera. 

Annalise después de un largo rato logro sacar un gran salmón del lago. Llego la noche y las niñas estaban saltando y bailando de alegría alrededor del fuego que ya era una gran hoguera, el salmón fue atravezado por un gran palo y cocinado con las llamas del gran fuego.