Dos chicas que tendran que unirse para sobrevivir en un bosque, pasando por situaciones realistas, cómicas y bizarras.
(ADVERTENCIA : CONTIENE EXAGERACIÓN DE LAS SITUACIONES Y HOMOSEXUALIDAD.( no tengo nada contra la comunidad LGBT, pero no se si to...
Annalise y Esther estaban mirando al ciervo que habia caido en una de sus trampas, tenia la pata llena de sangre ya que la trampa era para osos. Annalise acaba con el sufriento del pobre animal undiendo su cuchillo en el cuello, salio mucha sangre, pero por fin el animal habia dejado de sufrir dolor.
No paso mucho tiempo cuando el animal ya estaba en llamas a causa del fuego que habian echo las dos.
- Ese era el último. - Dice Annalise mientras arroja la caja vacía de fosforos al agua - Tenemos que ir a buscar mas.
- No seas tonta. - dice Esther mientras comía - De seguro no queda nada.
- Y si hay algo.
-¡Que no. Terca!.
- Voy al lago... no me molestes. - Dice ella molesta.
Annalise se sumerge en el lago y nada de espaldas sin ver hacia donde va, pero no le importa y cierra los ojos. Empezo a mirar hacia su alrededor por el rabillo del ojo. Agua, solo había agua, pero algo la mantenia tranquila, no se desesperaba por ningun momento. Ella se sumergio escuchando el sonido profundo y relajante del agua. Un animal acerco a ella, ella no se asusto y espero al animal para poder visualizarlo mejor.
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Annalise le sonrio al animal y se sorprendio al ver que este no hacia nada para "defenderse".
Necesitaba aire asi que saco su cabeza del agua el animal hizo lo mismo y vio como este se alejaba. Era un animal hermoso.
Annalise salio del agua muy contenta por la interesante situacion en el lago, se lo conto a Esther, pero a esta no le intereso mucho, a Annalise no le gusto su reaccion y se molesto.
- Pesada. - Dice y se sienta en la tierra como un indio.
- Ya no aguanto. - Rezonga Esther.
- ¿Que no aguantas?. -
-¡Este bosque!. - Dice enojada y se deja caer al suelo -¡ y a ti tampoco te soporto!.
- Pues te aguantas - dice Annalise con el ceño fruncido - y deja de actuar como si todavia tuvieras ocho años... A ver ¿cuantos años tienes?.
-¡Que te importa!.
- Ocho. Lo sabia.
- ¡Tengo doce!.
- Bueno pues actua como si tuvieras once.
Después de esa pelea las dos se quedan calladas.
Annalise estaba jugando con sus dedos hasta que volteo a donde Esther . Estaba tallando una punta en una rama.
- ¿Que estas haciendo?. - Le pregunta Annalise.
- ¿Que no ves?. - Le dice ella con el ceño fruncido. - Es una lanza.
-¿Y que vas a hacer con ella?. - Dice Annalise.
- Voy a sacar algun pez. - Se levanta y se va al lago.
- Ay, que pesada. - Dice Annalise en tono bajo y enojada. Suspira y se recuesta en el colchon.
Esther, habia sacado un salmón y como una sorpresa saco un fosforo de su bolsillo. Cocino al pez y lo tuvo que compartir con Annalise después de otra pelea. Un gruñido se habia escuchado las niñas voltean rapidamente, era un oso, el mismo oso que ellas habian visto cuando eran mas pequeñas, el oso que habia matado a sangre fria a uno de los suyos.
Ellas se escondieron rapidamente y vieron al oso pasar, estaba mucho mas viejo y un poco mas grande que la ultima vez. Lo vieron alejarse, ellas suspiraron de alivio.
-¿Por cuanto mas soportaremos a ese estupido animal?.
