Girls Misfortune.

Episodio 9

"Fantasía"

3 años más tarde...

Ayuda.

Era lo que Anna había escrito en una hoja de papel que ahora flotaba protegida por el vidrio de una sucia botella transparente.

- Estas loca.

- Solo estoy tratando de volver a casa. - Responde Anna con algo de molestia.

- ¿Escribiendo?.

La chica deja el carbón a un lado y pone uno de sus dedos en los labios en señal de que Esther deje de hablar.

Esta responde suspirando y voltea los ojos. Esther decide ponerse en pie y caminar sin rumbo hacía algún lugar, para después volver por el mismo sendero, con las manos vacías, con la cabeza baja enfocando su vista a sus pies descalzos y algo dañados, en pocas palabras daría un paseo para distraerse.

Caminó, escuchando a la vez el lejano canto de algunos pájaros y el cercano sonido de sus pisadas, rompiendo ramas y corriendo hojas secas. Un canto interrumpió su concentración, era de tono masculino y se podía oir mas fuerte a la vez que apuraba su paso.

Lo vio. Era un joven no tan mayor que ella, sentado en un tronco de espaldas que rompía ramitas para entretenerse, eso no lo podía ver, pero lo sabia al escuchar los crujidos.

"Estas loca."

"Estas muy loca... por mi."

"La... La... La."

"Actúas como loca para ocultar lo que en verdad sientes....por mi."

Esos fueron los cortos versos que Esther pudo escuchar antes que este parara y se diera la vuelta dejando ver su rostro. Tenía cabello rubio bien cuidado con unos ojos bastante claros.

- Hola, ¿quien eres?.

La joven rubia se queda en silencio antes de decirle su nombre.

- Esther.

- Jerome. Un gusto, Esther. - Él se levanta y se hacerca a la chica con una sonrisa amistosa. - ¿Quieres bailar?. - Le extiende la mano.

Ella se lo queda pensando hasta que asiente con una sonrisa. Jerome comienza a bailar junto con Esther con música que pone en un viejo tocadiscos. El comenzó a rodear la cintura de la chica con sus brazos a la vez que esta se apoyaba en su pecho. Esther levanta su mirada y con un carbón en mano comenzó a dibujar un rostro en la cara de Jerome que al poco tiempo su rostro original comenzó a desvanecerse quedando el rostro dibujado. Sus manos comenzarón a sentirse más frías y su cuerpo más duro.

Esther se separo de aquel muñeco mal hecho y volvio con Anna quien no hacía nada más que orinar trás de un árbol.

Ella se dio cuenta de que Esther se acercaba y se dirigió rápidamente a ella.

- ¿Que te ocurre?. - Pregunta el ver a su compañera mirando al suelo.

- Que te importa, idiota.

- ¿Por que te caigo mal?.

- Por que sí.

- Debes tener alguna razón.

- No sé como explicarlo.

Anna pone una de sus manos en el hombro de Esther.

- Esther, ¿tu.... te has Masturbado?. - Masculla.