capítulo 2

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Horas más tarde la voz del médico me despertó.
-Se ha despertado - Su aprendiz y otra persona que no idenficaba se acercaron con ojos curiosos e interesados.
-¿Que tal te encuentras?- Pregunto la desconocida, que era una mujer rubia y alta con el pelo no más largo del hombro. Al igual que el aprendiz vestía una bata desabrochada y por debajo llevaban una camiseta azul y unos vaqueros ajustados. -Me encuentro bien...Pero no entiendo nada de lo que está pasando- Me incorporé despacio esperando explicaciones pero lo único que recibí fue silencio, pasados unos largos minutos el aprendiz habló.
-Acompañame en unos minutos te explicamos todo - Le obedecí y le seguí hasta ese pasillo de cristal. Tras unos minutos andando llegamos a una sala gris que poseía asientos blancos de apariencia cómoda, sólo había uno libre los demás estaban ocupados por personas que tenían el rostro tan confuso como el mio.
-Sientate- Me senté obediente y observé como regresaba al pasillo de cristal. Observé todo lo que había a mi alrededor, la sala estaba constituida por una serie de pantallas, los asientos estaban colocados en círculo en torno a una gruesa columna color humo. Todo era demasiado futurista para ser real, pensé que tal vez estaba en un sueño, demasiado real, confuso y en ocasiones doloroso pero un sueño. Pensé en esa posibilidad durante unos minutos hasta que una mujer entro en la sala y fue encendiendo cada pantalla mientras hablaba.
-Bienvenidos, entiendo que muchos estaréis confusos por que no sabéis donde estáis, otros los más crédulos y menos curiosos supongo que ya sabréis cual es vuestra situación - Tras decir esto la mujer se acercó a una mesa que había en una sala y cogió una libreta. Las pantallas proyectaban lo que parecía ser la vida en aquel sitio. La mujer siguió hablando.
-Bien, a continuación voy a ir uno por uno preguntando nombre y edad, empezaré por ti - Aquella mujer de puso enfrente mía esperando mi respuesta - Me llamo Alice y tengo 16 años - La mujer apuntó cuidadosamente en su libreta y dijo - Cada vez son más jóvenes - Y pasó al siguiente asiento. Seríamos como doce personas unas mayores y otras más jóvenes.
Cuando aquella mujer término habló de nuevo.
-Mi nombre es Kate y soy la supervisora de este sector, os ayudaré en todo lo que os haga falta en los días venideros- Mientras hablaba caminaba de un lado a otro y me estaba poniendo realmente nerviosa, Kate prosiguió hablando.- Vuestra vida humana terminó, estoy segura de que habéis recordado o sentido el momento de vuestra muerte, si pensáis que estáis soñando estáis muy equivocados- Tenía una voz agradable y al mismo tiempo desagradable no era la clase de persona que me caía bien. Siguió hablando sin parar -Estaís en el cielo y vuestro futuro dependerá de vuestros actos como humanos. El dolor que sentís en la espalda son las alas que os están creciendo. Respecto a eso, nos dividimos en tres grandes rangos, alas blancas, grises y negras. Las alas blancas son aquellas personas que han actuado bien mayoritariamente, las grises son las que han actuado tanto bien como mal, y las negras las que han actuado mal- Me revolví en el asiento, no sabía si había sido buena o mala y eso me ponía nerviosa pues no quería tener las alas negras ni grises, aquellas mujer insoportable siguió hablando - A continuación tomareis el suero que hay a vuestro lado para acelerar el crecimiento de las alas, adelante- Mire a mi derecha y había un vasito que contenía un líquido verdoso, sin observarlo demasiado y sin pensarlo me lo bebí rápidamente, ni siquiera lo saboreé, sólo note como caía ardiente por mi garganta, me estremecí. Segundos después un dolor en mi espalda hizo que me estremeciera y después de esto sentí un peso en mi espalda. Si sentada me molestaba de pie no lo quería ni pensar . La mujer, Kate se acercó a mí - Bien veamos tus alas - Me tendió la mano para ayudarme y acepté su ayuda, me costó mantener el equilibrio pero una vez que lo conseguí fue fácil mantenerse en pie, no pesaban tanto. Kate giro a mi alrededor observando las alas con cuidado,cuando finalmente dijo- Tienes unas alas perfectamente blancas, has sido una buena chica -
Un rato más tarde cuando terminó de examinar las alas de los allí presentes Kate volvió a hablar - Muy bien a continuación vendrán unos compañeros y la iréis con ellos según el color de vuestras alas- Se abrieron dos grandes compuertas y por ella enteraron el médico, su aprendiz y otro hombre.
El médico habló - Me llamo Adam y guiaré a los alas grises - Cinco personas de levantaron de sus asientos y se acercaron a Adam , cuando todos estuvieron reunidos desaparecieron por una compuerta.
A continuación el otro hombre habló.
- Yo soy James y guiaré a los alas negras - Cuatro personas de levantaron , uno de ellos pasó por enfrenté mía y me miró, tenía unas grandes alas negras y vestía de gris , tenía una gran cantidad de pelo negro y unos ojos azules, tan azules que parecían el océano, automáticamente, me acordé del aprendiz del médico al cual miré sin pensarlo, eran exactamente iguales, salvo por las alas.

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