Cápitulo 5.

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Josh empezó a hablarme sobre nuestro sector.-Los ángeles custodios tenemos que proteger a los humanos, cada uno de nosotros tenemos un humano asignado, debemos proteger a ese humano hasta que un ángel de la muerte, es decir, un alas negras decida que es la hora de ese humano- Yo asentí y el continuó- Nuestro líder es Dios, yo sinceramente no creo en él puesto que nunca ha sido visto por nadie, tu elijes si crees en el o no, pero nunca expongas tus creencias públicamente puesto que es ilegal no reconocer a tu líder. Esto que te acabo de decir es una de las cosas que nos impone el gobierno, según vaya pasando el tiempo te enterarás del resto. Si no cumples sus imposiciones serás expulsada del cielo y serás enviada a un lugar intermedio-Yo no creía que hubiese un Dios nunca lo había creído y no iba a hacerlo ahora.- Esta bien- Asentí.

 Me condujo por un pasillo y le pregunté.- ¿Queda muy lejos adónde vamos?- Josh me sonrió.-Vamos al lugar de residencia si estás cansada de andar puedes volar es algo de lo que nunca se cansa uno- Dijo señalando mis alas.  Me pareció una buena idea y tras sopesarlo unos minutos decidí hacerle caso, me centré en mis alas y estas se movieron alegres en mi espalda haciéndome flotar. Josh me miró y dijo.- Vuelas muy bien y tienes unas alas preciosas- Yo sonreí sonrojada y le dije.- Tu también- Llegamos a un ascensor y Josh lo llamó, esperamos unos minutos y cuando finalmente llegó entramos en él y Josh pulso el botón para ir al piso 8.

-Alice ahora te llevaré a tu habitación y te pondrás el uniforme y después te llevaré a que te asignen tu humano- Yo asentí y entonces se me ocurrió preguntarle quién había sido mi ángel custodio, justo cuando fuí a preguntarle se abrió la puerta y una hermosa chica rubia se disponía a entrar en el ascensor- Hola Josh- Esta le miró sonriente y mirándole como si no le fuera a volver a ver - Hola Lyss- Dijo Josh sin apenas mirarla.

  Salimos del ascensor y fuimos a una salita.- Espera aquí- Yo asentí y tras unos minutos Josh volvió con unas llaves.- Toma guapa las llaves de tu habitación, que casualmente está al lado de la mía.- Dijo guiñándome un ojo.

Me guió hasta mi habitación y una vez allí me dijo- Entra y ponte el uniforme que está encima de tu cama, después ven a mi habitación te llevaré a que te asignen el humano- Una vez dentro de la habitación vi el pijama perfectamente doblado encima de la cama. Eran un pantalón y una camiseta de color negro, la camiseta tenia dos ranuras en la espalda para dejar salir las alas.

Me costó mas de 15 minutos intentar ponerme la maldita camiseta, Josh llamó a mi puerta varias veces - Alice no pienso esperar ni un minuto más o sales o entro- Yo suspiré avergonzada     - Espera-Josh suspiró audiblemente y entró- Vaya Alice estás muy sexy, ¿seguro que no lo planeabas?-Yo me puse roja y estudie la situación.

 Yo tapándome con la camiseta por que no era capaz de ponérmela...Era ridícula -No soy capaz de meter las alas-Dije con desesperación, Josh se rió-Dame la camiseta-Yo le miré incrédula y dijo entre risas- Me daré la vuelta o datela tú no tengo ningún interés en verte-  Yo me sonrojé y me di la vuelta dándole la camiseta, se acercó a mi por la espalda y dijo hablándome al oído.        -Toma pequeña, prueba ahora- Cogí la camiseta y le miré esperando a que saliera. - No voy a salir pequeña- Yo suspiré y me di la vuelta cogí la camiseta y la miré. Claro tenía una cremallera en la espalda, me regañé internamente y por fin me puse la maldita camiseta.

Plumas negrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora