Capitulo X: "Primer día en el pasado".

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-Saben, hemos vuelto 4 personas al pasado, quienes se mantienen de un mismo eje, o sea yo.  Por lo cual, genera que mi poder se debilite y tal vez su figura no sea estable.- Aún seguía pensando muy preocupada.
-Conozco algo sobre las leyes del tiempo.- Propuse.
-Recuerdo algo sobre el número del tiempo, las personas, los momentos y él estado actual del individuo.- Menciona Mint.
-Saben, actualmente estamos en un pasaje regresivo. Aquí, las cosas no transcurren por el tiempo, más bien, el tiempo transcurre por las cosas de aquí. Este tipo de espacio es el único de tiempo indefinido, pero estando aquí, puedes perder la cabeza,  te vuelves loco con este absoluto silencio.- Tomó aire.- Sacando los cálculos, dando que somos 4 individuos.- De la nada salió una pizarra y comenzó a hacer cuentas.
-Qué haces?- Preguntó ansioso J&J
-Cómo has sacado esa pizarra!!- Grité.
-En esta dimensión puedes tener lo que quieras y hacer lo que quieras, aquí no existen las leyes de la física. Y hago el cálculo de la energía que pueden gastar.- Respondió fríamente y concentrada.- Miren, llegando a los cálculos, podemos observar que la cantidad de individuos, multiplicado por la cantidad de 86.400 que son la cantidad de segundos que hay en cada dia y suponiendo que dirán una palabra por segundo. Esta cifra dividida 1,296, multiplicada  por el número del tiempo nos da un total aproximado de 160000 palabras que podrán decir.- Hizo otros cálculos.- Y podrán recorren 134  km corriendo o 235 km caminando. No usen sus poderes mucho. Esta es la energía mía. Para ser justos las he dividido en proporciones casi iguales. Así, eviten cualquier movimiento que requiera mucha energía, de lo contrario, si la gastan toda, lo mejor que les puede pasar es quedarse paralizados y lo peor es la muerte.- Se sentó.- Prepárense porque estamos a punto de llegar y no se en donde caeremos.- Se posicionó lista para caer con las rodillas flexionadas pero antes sacó un medidor.- Tomen pónganse en sus muñecas, allí marca el contador desde 160000 hasta el 0 y marca la potencia de la energía utilizada, fínjanse que la barra este máximo al naranja.- Todos nos las colocamos, eran dos marcadores, uno era como un contador y el otro era una barra que empezaba desde el color amarillo y terminaba en la escala del violeta, a su lado una barra llena de color sólido, ambas de lado vertical.
-Espera, vamos a caer, cómo q- De pronto comenzamos a bajar en picada.
-¡Waaaahhhh!- Gritó Mint.- Ayudaa!!- Recordé su fobia a las alturas e intenté acercarme para salvarla, pero me habían ganado.
-Tranquila.- La calmó Joles teniéndola en sus brazos mientras caíamos. Mint asintió con su cabeza.
- Cuanto nos falta!!- Logré decir  ya que el viento no nos permitía mucho hablar.
-75,45 metross!!- Gritó la joven, todos estábamos a los gritos.
Ya podía ver, estábamos cayendo a un lago.
-Maldición!!- Gritó la joven.- Justo tenemos que nadar y gastaremos energía!!- Tomo aire a todo pulmón.
-Prepárense! Esto será genial.- Dijo J&J preparado para nadar al igual que todos.
¡Booom! Fue como un baldazo de agua fría y ya estábamos todos mojados, aquella caída nos llevó hasta el fondo y efímeramente hacia arriba. No tuve tiempo de pensar en nada. Cuando tan solo saqué mi cabeza, pude respirar, aquel impacto me hizo gritar. Pero eso fue inolvidable.
Nos encontrábamos en una laguna, rodeada por un bosque y de tras nuestro una pequeña cascada. De fondo, como a kilómetros, podíamos ver la gran ciudad.
Nadamos hasta la orilla de manera pausada y observando la pulsera. Cuando vi que la barra de color sólido se debilitó una pequeñísima porción mientras nadaba, por lo cual supuse que es como un taque de gasolina, pero en vez de ella, es energía.
Al llegar a las orillas, la joven sacó una pequeña lámina y de ella una no muy gran casa surgió.
-Bien, ya hemos vuelto 10 años, aquí nos cambiaremos las ropas y partiremos. – Apuntó a una puerta- Aquí tienen,  hay ropa de la época, vayan a cambiarse. Nosotras iremos por allí.
-Oye, aquí tu tenías 14 años, no?- Pregunté a Joles.
-Pues sí y tu 6.- Observó la ropa que había.- Esto me trae nostalgia.
- Tu usabas esa ropa?- Indagué.
-Estas bromeando, esto es la moda de aquí.- Dijo mientras se desvestía. En ello, me impresioné con aquel físico, el cual no era patético como el mío. Él tenía una espalda marcada, pero al darme cuenta, tenía una cicatriz.
- Qué te pasó ahí?- Apunte a su espalda.
- Carroll caminó por un bosque  y un Limo (Animal parecido al León, solo que aquí ya se extinguieron.) intentó atacarla y pues yo me interpuse.- Respondió.
- No estarás pensando volver a tu casa en esta época o si?- Comencé a cambiarme.
- Puede ser…- Se hizo el tonto.- Que te ha pasado a ti, pero que cuerpo más flacucho!- Gritó riéndose.- Haz crecido mucho, pero que te pasó en el pecho.- me tocó una de  mis cicatrices.
-Esa es mi cicatriz más vieja, la tengo desde que nací. Según mi madre, mi padre la hizo.- Lo miré extrañado ya que parecía preocupado.- Te pasa algo?
- No, no, no nada.- Pensó un rato.- Bueno si, sabes, te contaré quien era tu padre, pero promete no contarle a nadie más.
- Lo juro si lo deseas. Pero dímelo ya!- Espere ansioso.
- Tu padre fue el poseedor de esa piedra. Él murió apenas nacías. El portador de la piedra debe elegir a su nuevo dueño. Tu papá, cuando apenas naciste, no pudo contenerse al ver aquel cabello igual al suyo y te introdujo en el corazón un fragmento de la piedra. Nosotros ya sabíamos que eras el nuevo portador, por ello entraste a la academia y gracias a eso te convertirás en héroe.- Me dijo entusiasmado.
- Espera, esto es demasiado bueno para ser verdad, en tu relato me estas ocultando muchas cosas y quiero que me las digas! Te conozco!- Le exclamé.
-Ya nos vamos, dense prisa o sacaré esto junto con ustedes!- Vociferó la joven.
- Me debes la verdad.- Le susurré.- Si, ya estamos terminando!- Hablé con las chicas saliendo de la habitación.
- Por cierto, mi nombre es Lina.- Agrego aquella.- En cuanto lleguemos a la ciudad, nos separaremos y marcaremos un punto de encuentro.
- Vale!- Respondió eufórica la chica de ojos zafiro.
-Cada uno hará lo que desee, pero antes déjenme advertirles las reglas. Primera: Jamás le digan a su yo del pasado que son ustedes. Segunda: No revelen datos que no se conozcan en esta época. Tercera: No maten a nadie, ni siquiera a un insecto. Cuarta: pasen lo más desapercibidos posible. Quinta: actúen como los demás y déjense llevar por las masas y no por su opinión. Sexta: No dejen ni se lleven objetos de distinta época. Séptima: no  dejen morir a su yo del pasado, de lo contrario no existirán.- Antes de que otro comente, prepuso.- Recuerden esto, estamos en la misma dimensión que en nuestro mundo, solo que en diferentes tiempos. Cualquier cosa que hagan aquí, modificará el futuro.- Al decir esto, los ojos de Joles se iluminaron e inmediatamente supe que iba a evitar que maten a Carroll.
- Yazzi, puedo acompañarte, es que no sé qué hacer.-  Me dijo Mint y yo acepté.
Íbamos salida al bosque en cuanto llegamos a una ruta. Y Lina se puso a hacer dedo. Una camioneta paró, nos subimos y partimos a la ciudad.



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