Quería decirle las cosas más melosas y asquerosamente ridículas que había leído en libros, pero sólo me limité a reír dulcemente. Mientras dibujaba me había planteado la idea de la rapidez con la que Nicholas había pasado de decirme un simple halago por leer a un "Estoy enamorado de ti". Habían pasado sólo tres días, sin contar el mes en el que las preguntas y la duda eran mi desayuno.
Era toda una novedad para mi. Enamorar a un chico en tres días con un cuerpo distinto al estereotipo, hoy en día, era difícil.
Pero yo no había estado haciendo nada para enamorarlo, y eso me sorprendía aún más. Él había aparecido de un día para otro en mi vida y era él quien hacia el trabajo de enamorarme con sus palabras.
Que egoísta Jane.
Frunzo el ceño. Ningún chico querría acercarse a mí sabiendo mi manera de tratar a los hombres y encima enamorarme. Pero él descubrió un ser que ni siquiera yo sabia que podía llegar a existir, pero aun éste se mantenía muy reservado. Tengo que descubrir el motivo por el cual él se arriesga a que sus compañeros lo golpeen por mi, y el motivo por el cual aparece ahora y hace el trabajo por los dos.
Tras varios intentos fallidos de querer hablarle mientras él saca de la bolsa dos bandejas con nuestra comida, mi alarma de hija suena.
-¡Mi madre!- grito- No le he avisado que no voy a almorzar.
Como Becca vive en la misma cuadra que yo, sabía quedarme a almorzar en su casa siempre y cuando le avisara a mi madre donde estaba. Mientras saco apurada el celular de mi bolsillo, Nicholas comienza a reír.
-Salió responsable la chica- lo miro achicando los ojos y se ríe aún más- No te preocupes preciosa, ya le avisé a tu madre. Ella sabe donde estas y con quien.
Abro los ojos de repente sorprendida ¿Cómo? Hasta hace un instante era yo la responsable. Río internamente, me imagino la cara de mi madre en esa situación. Ella siempre supo de mis sentimientos hacia Nicholas y lo aprobaba constantemente.
-¿Cuando has hablado con ella?
-Ayer- dice naturalmente. Al ver mi expresión de querer saber más, continuó- Fui mientras tu estabas en tu cuarto, o al menos eso me dijo.
-¿Qué pensó al respecto?
-Nada, solo me miró y me dio su aprobación. Estaba sorprendida debo decir.
Asentí. No era capaz de preguntarle si dijo algo sugerente con respecto a mí, y no era porque lo podía llegar a hacer, sino por curiosidad.
Tuve que reunir todas mis fuerzas para preguntarle finalmente.
-¿Nick..
-Si, Jane.
-¿No crees que todo esto es muy precipitado?- ahora es él quien abre los ojos de golpe, pero yo continúo antes de que diga algo- Quiero decir, no dudo de ti- Bueno, en realidad no lo sabía- y quiero que esto funcione. Pero tengo preguntas, muchas. ¿Podrías sacarme..
-¿Qué quieres que te saque Jane?- dice con expresión pervertida. Entorno los ojos, estoy por bombardearlo con preguntas y él solo dice groserías.
-..mis dudas, Nick. Dudas- intentaba soñar lo más sería posible, pero la risa amenazaba con brotar.
-¿No era que no dudabas de mi?
-No lo hago, solo dudo de ésto- digo señalandolo con la mano a él y luego a mi.
-¿Por qué?
-Porque siento que todo es rápido y no me das tiempo a nada. Ademas tú haces todo el trabajo por mi, y es injusto.
-Jane, tu ya hiciste todo el trabajo. Hacen años que lo haces.
-¿Ah?
¿Acaso le encanta ponerme nerviosa?
Recuerdo que siempre que pasaba por su lado al ir a mi escondite me seguía con una mirada que no transmitía nada. Debo admitir que siempre esperaba lo que sus amigos me decían cada vez que pasaba cerca de ellos, pero no.
Tampoco niego haberme pavoneado cuando pasaba por su lado, porque, ¿qué mujer no hace eso cuando ve un chico que le gusta? Aún así me sentía como una idiota luego de exagerar mis pasos y levantar el mentón. Eso no era una presentación en un escenario, pero en el momento me sentía más que realizada, incluso cuando de seguro me veía de lo más ridícula.
Él sonríe como si le hubiera dicho algo dulce.
-No lo entiendo- digo más que confundida y buscando en mis recuerdos haber hecho algo.
-Pues así lo es Jane.
-Sigues evadiendo mi pregunta- lo riño- Nick, han pasado tres días solamente, porque sólo son esos en los que hemos podido hablar- Y no sólo eso, bombardearme con emociones y dudas. Es un chico que demanda tiempo, del cual yo estoy dispuesta a darle- ¿Por qué ahora? ¿Por qué tienes prisa?
-Cómo te dije, son años que he sentido este sentimiento de atracción hacia ti. Cuando me di cuenta de que el año se termina y que éste es nuestro último tiempo aquí, pues... me asusté. No iba a poder verte todos los días y si lo hacía, iba a ser cuestión del destino- mi cara tiene que haber tenido una sonrisa estúpida, porque su dulzura al mirarme me ruborizó. Corre la comida, que nos separaba, se pone de rodillas frente a mi y toma mi mano- Jane, quiero aprovechar los meses que nos quedan e invertirlos en esto. No quiero perder más tiempo. Y tienes razón, estoy siendo precipitado.
Tira de mi mano, obligándome a arrodillarme a la altura de sus ojos cafés, y por un momento creo que está por besarme y yo no iba a prohibirle. He soñado con sus labios cientos de veces y echarme atrás iba a ser una actitud muy idiota de mi parte.Me mira por unos instantes y recorre con ella todo mi rostro dulcemente. El mundo existente a nuestro alrededor se desvanece y solo escucho la respiración de ambos. Tomo su cara entre mis manos y el cierra los ojos.
-Si vas a besarme- dice mientras abre sus ojos- Hazlo. Me ahorrarías ese protocolo, preciosa.
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Se que es poco, pero no se preocupen, hay más aún. He subido éstos ya que eran los que estaban completos, faltan dos que tengo que agregarle más cosas. Aun así quiero su opinión, SIEMPRE ES IMPORTANTE! 😙
Gracias por su apoyo. En especial a LeslieVazquez557 Gracias por tus palabras bella!
Dentro de un par de días subiré los demás capítulos!
Saludos 👋
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Las cuatro estaciones enamorándome
Roman d'amourJane, la chica autosuficiente. Nicholas, el chico por el cual todas morirían por ser basadas por él. Ella, la chica invisible y rellenita. Él, el chico que luchaba a escondidas de sus amigos por los estereotipos y la igualdad sexual. ¿Podrán ellos t...