OTOKAGE

PUERTA

TODO ES ESCRITO POR writer168 YO SOLO LO TRADUZCO DEL INGLES AL ESPAÑOL.

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-¿Hemos terminado? Sasuke preguntó mientras su marca maldita retrocedía de nuevo en su pequeña marca. -"Nunca pensé que tu me decepcionarías"-

Kabuto oyó que la escena se desarrollaba con desinterés. Sabía exactamente cómo iba a funcionar esto, como Orochimaru había grabado este momento en su mente desde el día en que Sasuke dejó Konoha. Orochimaru actuaría como el malo, pretendiendo hacerse cargo del cuerpo de Sasuke. Inevitablemente, sería asesinado y absorbido para que ya no estuviera en la tierra de los vivos. Seguramente había más detalles, pero no se había preocupado lo suficiente como para recordarlos.

De repente, la puerta se abrió y Sasuke pasó.

"... ¿Cuál eres tu?" -preguntó Kabuto fingiendo sospechas.

-"¿Por qué no me lo dices?"-

Con una sonrisa arrogante, Sasuke se alejó. Kabuto subió las gafas y entró en los aposentos de Orochimaru. Él cernido a través de los escombros de la batalla durante un tiempo antes de encontrar una mano preservada rodeada de vidrio roto. Kabuto deslizó el anillo de su dedo meñique y lo sostuvo para examinarlo en la luz.

-"Querido, querido Sasuke ... Que poco sabes"-

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Haruno Sakura suspiró mientras se sentaba en el escritorio del Hokage. No es como si estuviera quejándose o algo por el estilo; Sería bueno que Tsunade hiciera su trabajo por una vez. Pero acababa de completar tres horas de documentos en el hospital para ser arrastrada a la oficina para hacer más papeleo.

Se giró en su silla y miró a Konoha a través de la recién pulida ventana. Le gustaba la vista desde lo alto. Se oyó un golpe en la puerta y se giró dando vuelta, gritando un suave "entra". Shizune entró y se detuvo.

-"Sakura-chan... Oh dioses, ¿dónde está Tsunade-sama?"-

Sakura se encogió de hombros. Shizune lanzó un suspiro y sacudió la cabeza.

-"Realmente lo siento Sakura-chan, puedes irte a casa ahora y arrastraré a Tsunade-sama de vuelta al trabajo" dijo ella. Sakura le dio una sonrisa agradecida y agarró su abrigo antes de salir de la torre. Las calles de Konoha estaban salpicadas de nieve que crujía a cada paso que daba. No era completamente aburrido hacer el trabajo de su maestra, ya que se educaba en política avanzada, pero había algunas decisiones que ella deseaba poder cambiar. No era su lugar, por supuesto, pero sería bueno ser la que haga las elecciones por una vez.

Ser Hokage...

Sakura sacudió la cabeza. ¿En qué estaba pensando? El título de Hokage pertenecería a Naruto un día, no a ella. Nunca a ella. Soltó una bocanada de aire y la observó condensarse en el aire frío.

Deseaba haber trabajado más duro en el pasado, deseando que nunca hubiera sido la carga del equipo. Deseaba no haberse aferrado a Sasuke y haber abandonado sus estudios hasta los últimos momentos. Al principio, antes de su encaprichamiento en la Academia, su objetivo inicial era algo grande. Ser mejor que los que la intimidaban.

Quería llegar a ser alguien más de lo que era ahora.

-"Pero ¿qué puedo hacer?"-

Al llegar a su apartamento, vio una pequeña caja púrpura en la puerta de su casa. Sin nombre. Sin dirección de retorno. Sakura la arrancó del suelo y entró en su lugar, disfrutando del aire cálido que la aplastó. Después de colgar su abrigo en una de las sillas de su comedor, se sentó en su sofá y abrió la caja.

"... Oh no"